La psicóloga

Los capítulos son muy largos y a veces necesitas parar dos veces tan tranquilamente a descansar. Repite mucho frases, mucho. Demasiado.

La trama, la historia, está pensada de una forma que desde la primera página llama la atención y mantiene en vilo en todo momento, haciendo que tengas ganas a cada rato de saber un poco más de la historia.

A cada paso que se lee y se desenvuelve , todo se vuelve mucho más engañoso, hasta llegar a un final que no se ve venir por ningún lado a pesar de que en todo momento ya se decía desde la primera página.

Asombroso y recomendadísimo.

Para empezar tenemos a nuestra protagonista, Sara, y su marido Sigurd, la cual parece ser una pareja estable sin grandes problemas ni desavenencias pero… esta visión está muy lejos de la realidad. Además de nuestra protagonista conoceremos a los pacientes de nuestra psicóloga a cual más peculiar y a la familia de Sara.

Tengo que admitir que hay varios giros que se me hicieron muy previsibles en cambio otro me dejaron con la boca totalmente abierta porque ni en mis pensamientos más locos lo hubiera imaginado.

La verdad que en cuanto a nuestra protagonista, al principio me caía muy mal y eso conseguía que la lectura se me hiciera muy lenta, sobre todo ante su pasividad por la situación que estaba viviendo pero con el paso de la investigación veremos como ella tomara las riendas de la desaparición de Sigurd.

En cuanto a la pluma de la autora es muy ligera y adictiva sabiendo combinar los momentos de tensión y respiro, además de un gran manejo a la hora de introducir los flashbacks.

El único punto negativo, no es un final abierto como tal ya que los interrogantes como la investigación de Sigurd y demás acaba todo bien cerrado pero lo deja en un momento crucial y me deja con las ganas de saber que pasó después.

Si os gusta el thriller este libro os encantará.
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El libro tiene un buen final, inesperado y poco predecible. Sin embargo no logre disfrutar completamente la historia ya que su desarrollo es lento, con información innecesaria y que no aporta a la trama. Durante la narración nunca nos dan pistas importantes o sospechosos potenciales que te permita unirte a la historia, indagar, crear hipótesis o entender desde tu punto como lector la trama. Los personajes en realidad son bastante planos, no muestran avances o deterioros importantes en su personalidad o vida. Lo que más resaltan son sus últimas páginas que nos develan un asesino bastante inesperado.

Pues, a ver...Empiezo.

Ves la tapa del libro muy atrayente y pues, desde mi opinión, hubiera pasado de él si pudiera ver el futuro y sabría como me sentiría al terminarlo. Estoy segura que habrá más libros que lo superen en mucho.
El libro empieza bien, interesante, atrapan te, pero mientras los vas leyendo te pierdes, y no a favor del libro. Las 400 páginas se basan en la vida del personaje, recuerdos, y banalidades partes del nudo que no aportan nada. Y luego después de esa larga "introducción"(porque así lo sentí) ingresamos a la "resolución del conflicto".
¿Dude en continuarlo? Sí
¿Me decepcionó el final? No
¿Me desgusto todo? No
El final me gustó, solo eso, el final.
La sensación al terminarlo fue como ¿He leído todo esto para esto? Mmm, ya que. No estuvo tan mal.
Ni dulce, ni agrio, es un agridulce.
No lo recomiendo si quieres un buen nudo, y no rodar los ojos después de casi 100 páginas sin a ver avanzado en ese tan "importante" conflicto.

Hacía algún tiempo que teníamos ganas de leer este thriller a pesar de las reseñas bastante neutras que hemos encontrado en las redes y, la verdad, es que nos ha entretenido, pero no es el libro del año, desde luego. Incluso ha habido momentos en los que se nos ha hecho bastante pesado. 


Sara es una joven psicóloga que descubre que su marido ha desaparecido. Básicamente, así empieza el libro. No se va por las ramas, si no que va directa al grano. Algo que podría haber hecho a lo largo de todos los capítulos, ya que alguno se nos ha hecho tedioso con descripciones innecesarias. 


Sara es un personaje que no nos ha convencido demasiado. No sabemos exactamente el motivo, pero no es lo que esperábamos de un personaje de sus características. A parte de que en algunos aspectos de su vida nos ha parecido muy ilusa e ingenua. ç


Quizás, nuestros personajes favoritos son los dos agentes de policía que siguen el caso de principio a fin, ya que son los únicos que le dan algo de seriedad al asunto. 


En cuanto al final... podemos decir que tiene dos partes. Una de ellas la hemos visto venir desde el inicio del libro, así que menuda gracia leer un libro del que ya conoces parte (sin ser relectura, claro). Y la otra... pues de alguna manera nos la esperábamos, pero por otra no estábamos 100% seguros. 


En definitiva, La psicóloga es un libro que nos puede entretener durante un rato, pero que en algún momento se puede hacer algo tedioso.  

La Psicóloga es una de las últimas novedades de Planeta, y una apuesta en el género del thriller que ya ha sido vendida a más de 28 países. La sinopsis la verdad es que llama la atención en seguida y termina resultando una historia de esas que atrapan sin darte cuenta. Su ritmo es pausado pero mantiene la duda en el lector y eso siempre es un buen aliciente en este tipo de novelas.

Sara y Sigurd son un matrimonio feliz, o al menos en apariencia. Una mañana, Sigurd se despide de su mujer para pasar el fin de semana en una cabaña con sus amigos pero, a las pocas horas, Sara recibe la llamada de uno de sus amigos: siguen esperando a que Sigurd aparezca por la cabaña. Extrañada, pues su marido le mandó un mensaje diciendo que había llegado bien, trata de localizarlo sin éxito, empezando a preocuparse no sólo por su paradero, sino también por las razones que le han podido llevar a mentirle en el mensaje de voz que le dejó. ¿Qué ocultaba Sigurd? ¿Le habrá ocurrido algo? ¿En qué más le habrá mentido?

Nos encontramos ante un thriller marcado por un ritmo constante y algo pausado, centrado en las dudas de Sara y en sus sentimientos y, sobre todo, pensamientos pues, a través de diferentes flashbacks descubriremos determinados momentos en la relación de Sara y Sigurd que son determinantes para ir atando cabos y tener una visión amplia de la situación y de lo que podría estar sucediendo. Igualmente, y debido a que Sara es psicóloga de profesión, también nos encontramos con momentos y narraciones sobre los diferentes pacientes a los que trata que, aunque en principio puedan parecer irrelevantes, influyen mucho en la forma que tiene Sara de sobrellevar personalmente cada bache con el que se encuentra en su relación matrimonial. Mientras tanto, en el momento presente, Sara tratará de llevar una vida lo más normal posible, siendo consciente de que, conforme evoluciona el caso de la desaparición de su marido, todo apunta a que ella es la principal sospechosa y los detectives del caso no la dejarán ni a sol ni a sombra, haciendo incluso que se cuestione su propia cordura y cómo sucedieron algunos hechos. Poco a poco, esos flashblacks, historiales de pacientes y el presente de Sara empezarán a encajar y cobrar sentido para la trama, por lo que, aunque puedan parecer insignificantes y ralentizar el ritmo de la novela, son elementos y explicaciones muy necesarias.

Sara es la principal protagonista y, en realidad, la única que conocemos a fondo. Es una mujer maniática y controladora, algo obsesiva y con una rutina diaria que mantiene a rajatabla entre citas de pacientes, quehaceres domésticos y actividades de ocio que la mantienen relajada y entretenida. Vive con su marido en una casa a la que han ido postergando la remodelación y reforma, y siente que, ahora mismo, la relación entre ambos está tan estancada como la idea de terminar la reforma. Con todo, sueña con que todo vuelva a ser como era y solo se trate de un bache más en el camino. Sara también es una mujer que le da mil vueltas a las cosas y baraja mil y una hipótesis a todo lo que le sucede tanto a ella como a sus seres queridos. Quizá le venga de profesión pero es algo que no puede evitar y eso también la llevará a cuestionarse la realidad de todo y todos los que le rodean. Desconfiará hasta de su propia sombra y tratará de descubrir la verdad por sus propios medios.
También tenemos a otros personajes como los detectives encargados de la desaparición de Sigurd, el padre y la hermana de Sara, los pacientes de ésta, los amigos de Sigurd; pero el mayor peso de la trama recae en Sara.

Lo bueno de la historia es que, desde el comienzo, empiezas a barajar varias opciones y sospechosos, descartando unos y añadiendo otros conforme se va enredando la trama y surgen otras líneas posibles en la investigación. Además, cuando parece que todo ha quedado claro en el final, se nos presenta un nuevo giro argumental que no vi venir y me sorprendió bastante. Fue un dato que se menciona de pasada en la novela y que, en mi caso, me pasó totalmente desapercibido hasta que la propia Sara lo plantea en la narración. La verdad es que me gustó.

En resumen, 'La Psicóloga' es un thriller entretenido y muy interesante pese a contar con un ritmo pausado que puede no ser a gusto de todos. Comienza como la típica novela de suspense de desapariciones y sospechosos habituales, pero destaca por la implicación de Sara, la propia protagonista y principal sospechosa, en hilar toda la información, recuerdos y pensamientos para llegar al fondo del asunto por su cuenta. Hacia el final de la historia se produce un giro totalmente inesperado que me ha gustado mucho.

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Una historia en la que conoces muy bien a la protagonista pero no sabes si lo que le ocurre es cierto. Unos personajes que confunden, otros que ayudan y otros que descolocan. La historia está muy bien contada y con capítulos no muy largos.

Sigurd, el marido de Sara, iba a pasar el fin de semana a una cabaña en el bosque con sus dos mejores amigos. Su esposa, Sara, se queda en casa trabajando; es psicóloga y tiene la consulta en el hogar familiar. al poco Sigurd le llama para decirle que ha llegado bien. No obstante, unas horas después los amigos de Sigurd también le llaman: le dicen que Sigurd no está en la cabaña, que no le han visto en todo el día. Sigurd no coge el teléfono, no se pone en contacto con Sara ni con sus amigos. ¿Qué le ha podido pasar?

Aunque está definida como thriller, “La psicóloga” no es el típico thriller al que estamos acostumbrados: no tiene el ritmo rápido que suele caracterizar este género y tiene una profundidad de personajes mucho mayor de lo habitual. Como mucho, podríamos calificarlo de thriller psicológico poniendo énfasis en el adjetivo: psicológico. Esto no es una crítica ni un “pero”, sino una simple constatación o advertencia: no os esperéis un thriller adictivo a tope y haceros a la idea de una novela más pausada que se va a centrar más en los personajes que en la acción. Si así lo hacéis –como yo lo hice- creo que “La psicóloga” no os decepcionará.

Dicho esto, el hecho de que no tenga un ritmo vertiginoso no significa que sea una novela lenta; ni mucho menos. Su ritmo es medio, la narración es ágil y la facilidad de lectura alta. Por lo que es un libro que engancha y que mantiene constante la intriga y el interés. Y que nos hará dudar constantemente sin que, creo yo, podamos predecir el final.

Si tuviese que calificar esta novela con un solo adjetivo éste sería “perturbadora”. Es una novela en la que no sabes a qué atenerte. Ello se debe, en gran parte, a que sólo conocemos una versión: la de la propia Sara. Sara nos lo cuenta todo en primera persona pero ella es una de las (más)implicadas en la historia: es la mujer del desaparecido y ya se sabe que, en estos casos, la pareja es siempre la principal sospechosa. Pero si Sara le ha hecho algo, nos engaña como a chinos porque, o bien está loca, o bien parece la persona más inocente del mundo. Pero, ¿una psicóloga loca? Ay qué lío. El problema es que no hay demasiados personajes de los que sospechar; no hay demasiados personajes y punto. Siempre puede ser un tercero que se saque de la manga la autora pero al lector le da que no va a ser así. Entonces, ¿de quién sospechamos? He de decir que yo no he conseguido dibujar ninguna teoría medianamente coherente. Se me pasaban ideas por la cabeza, claro que sí, pero a locas. Teoría como tal, ninguna. Y, claro, como no podía ser de otra forma, el final me sorprendió y mucho. Y lo bueno es que no es un final sacado de la manga; estoy convencida de que si volviese a leer el libro sabiendo lo que ahora sé, encontraría pistas en las que no me fijé. Pero, ya os digo, sorprendente lo es y mucho.

Como digo, es Sara quien nos lo va a contar todo. A dos bandas. Por un lado nos cuenta cómo está viviendo la separación: la preocupación, las dudas, el miedo… porque se da cuenta de que algo está pasando, se siente observada, cada vez se siente más insegura. ¿Y si quien ha ido a por Sigurd va ahora a por ella? Pero, ¿por qué? Ambos eran personas absolutamente normales, sin enemigos conocidos, ¿quién les puede estar haciendo esto? Por otro lado, Sara nos habla del pasado. Nos cuenta cómo conoció a Sigurd, cómo se enamoraron, cómo formalizaron su relación, su vida de pareja… Es importante para conocerles y os aseguro que acabaremos conociéndolos muy bien. La mayor parte de la historia se sitúa en el presente; las partes del pasado se distinguen perfectamente porque están escritas en cursiva.

A pesar de ser una novela de intriga en la que todo gira en torno a una separación, el papel de la policía es secundario. al tener sólo la versión y la visión de Sara, no sabemos apenas nada de la investigación policial. Sólo en aquello que la toca: los interrogatorios a Sara, las pequeñas noticias que le van dando, etc… Así que nosotros estaremos tan desconcertadas como la propia Sara.

El ritmo, como he mencionado más arriba es medio. No lento, en absoluto, la verdad es que las páginas se pasan rápidamente ayudados por la abundancia de diálogo. La novela se lee bien pues, además de ser una lectura sencilla, la intriga se mantiene constante.

Los personajes están muy trabajados. La autora hace un gran esfuerzo por dibujar correctamente su psicología y la verdad es que lo consigue. A la que mejor conoceremos es a Sara, protagonista y narradora. Una persona de la que parece que podemos fiarnos pero que no tenemos claro si podemos hacerlo. de los demás, conoceremos a su hermana y a su padre, a algún vecino y amigo, a algún policía y el propio Sigurd. Como veis, pocos personajes, poco material para elaborar teorías…

Conclusión final

“La psicóloga” es un thriller psicológico entretenido e intrigante con un final sorprendente. Me ha gustado.
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Un libro que tenía mucho potencial pero se ha quedado a la mitad. La autora repite muchísimas veces la misma información sin que sea relevante y acaba haciéndose tedioso.

Además la sinopsis te hace un gran spoiler de lo que pasa practicamente al final del libro y eso me frustraba bastante porque yo esperaba que pasara al principio y pasa cuando ya llevas más de 350 páginas.

En sí la historia está bien pero considero que tiene bastante relleno y eso le hace bajar la puntuación.
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Siempre que sale un thriller con una promoción grande y entusiasta me emociono mucho y quiero leerlo inmediatamente. Esta vez, gracias a masa crítica de Babelio he podido leer este libro, La psicóloga.

Conocemos a Sara, una psicóloga durante sus sesiones en una mañana de viernes. Conoceremos a tres de sus pacientes, tres jóvenes con diferentes problemas y que acuden a Sara para contarle sus pensamientos. Sara tiene un día extraño, se ha despertado justo cuando su marido se va de fin de semana con unos amigos, pero sentimos una sensación extraña mientras nos lo cuenta. Pero lo peor todavía no ha empezado: unas horas después, su marido le deja un mensaje comentando que ya ha llegado a la cabaña donde va a alojarse con sus amigos, pero horas después recibirá la llamada de los amigos preguntando sobre Sigurd: Sara se siente muy desconcertada... ¿dónde está Sigurd? ¿Le están gastando una broma pesada? ¿Le ha mentido Sigurd?

Así comienza esta perturbadora novela donde nada es lo que parece y todo es una locura. Esa es la palabra perfecta para describir esta novela, locura. Locura por parte de la narradora, Sara, y locura de trama. Sara nos narra sus vivencias antes, durante y después de la desaparición de su marido, y nos hace cómplices de su total locura, de sus paranoias y de su turbación por los sucesos que van ocurriendo. Y es que desde que su marido desaparece ella y el entorno parecen actuar de forma extraña, desubicada y obsesiva. La trama, además, ayuda a no entender mucho: el marido desaparece, la policía duda de todo, sobre todo de Sara, no aclara nada y encima, tenemos serias dudas de la capacidad mental de la protagonista. Una total paradoja ya que estamos hablando de una psicóloga.

La novela me ha gustado finalmente, pero tengo varios puntos negativos que me han decepcionado mucho. Lo primero de todo es la excesiva repetición en la primera parte de temas innecesarios y totalmente prescindibles. Admito que ayuda a meterte e introducirte en la mente perturbada de la protagonista y sobre todo consigue producir una atmósfera asfixiante y loca durante todo el relato, pero hace que el ritmo frene y se estanque: demasiadas redundancias que no me aportaban más que cortar el ritmo. Eso es lo que más he sufrido, que esperaba mucho más, un ritmo apoteósico, más espectacular, más sorpresas, y me he encontrado con una novela psicológica más reflexiva, mucho más ética, aunque admito que en la segunda parte remonta y tiene un ritmo mucho más acertado y el misterio se hace más palpable. Eso sí, el final compensa en cierta medida los errores de la primera parte: intenso, sorpresivo y con un punto muy original.

Esta es una novela de “personajes” ya que el peso de la trama es totalmente de Sara. Sara es la protagonista y narradora de la historia por lo que tenemos una visión sesgada y viciosa del relato. Esto contribuye a desubicarnos y a no creernos nada y dudar de ella en todo momento: gracias a sus flashbacks podemos hacernos una idea del pasado de la pareja, apasionado, pero apresurado, y a la vez solvente. En la actualidad, Sara actúa de forma extraña, poco profesional, desvirtuando las cosas y teniendo un descontrol total de todo. La autora dota al personaje de rasgos neuróticos y lo sentimos gracias a una narración sencilla, pero a la vez vacilante y despistada, haciéndonos creer que en esta tragedia nada es como parece. Recuerdos, flases, preguntas, secretos, todo ello transmite Sara en su relato, llega a transmitir verdadera incertidumbre por saber qué ha pasado con su marido y qué le está pasando a ella.

En rasgos generales, la novela es entretenida, y se lee de forma fácil con una atmósfera muy estresante y creíble, aunque no actúa como un auténtico thriller. al contrario, es una novela más de intriga, más psicológica, más introspectiva que un noir típico (se vende como thriller y no lo es). No es un mal libro, pero tampoco tiene ese algo que lo destaque. Lo mejor de la novela es, sin duda, su final: un final contundente, nada predecible y que me ha sorprendido para bien y que mejora la novela notablemente.
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