Los dones de la muerte

Elías es un joven lleno de miedos e inseguridades que trabaja en la tienda de antigüedades de su familia. Elías es un nigromante con poco talento pero que esconde un poder que no le ha contado a nadie: tiene sueños en los que experimenta los momentos más dolorosos de las vidas de otras personas. Hasta que una noche, en unos de esos sueños aparece alguien que quiere comunicarse con él.

En esta historia acompañaremos a Elías que se embarcará en una aventura que lo llevará a Londres, al Londres Oculto (ojalá que en el segundo libro conozcamos más este sitio) y hasta Grecia, acompañado de una combativa activista, de un viejo amigo (¿o enemigo?) de la infancia y una estatua embrujada.

“Los dones de la muerte” es una novela juvenil de fantasía urbana muy entretenida, bien escrita y fácil de leer y que engancha desde las primeras páginas. Mantiene un ritmo ágil y siempre están pasando cosas así que no vais a soltar el libro hasta que se acabe.

Lo mejor de la novela son sin duda los personajes. Me han gustado muchos todos los protagonistas y como han ido evolucionando a lo largo de la historia. Están muy bien definidos y te acabas encariñando con ellos. La relación romántica es muy sutil y está en segundo plano y la verdad es que me ha encantado.

El tema de la magia también me ha gustado mucho. Raquel Brune nos transporta a un mundo mágico peligroso y retorcido con nigromantes, hechiceros, brujas, banshees, hadas… y donde utilizar la magia tiene un coste.

Magia, hechizos, maldiciones, sombras, mundos ocultos, mitología griega… Una primera parte muy interesante que deja con ganas de más. Necesito leer ya el segundo.