El árbol de las brujas

Como todas las noches de Halloween, un grupo de niños sale a pedir caramelos disfrazados pero, este año acabarán en una extraña casa, donde crece un árbol con calabazas: el árbol de las brujas.

En este contexto, realizaremos un viaje a través de la historia y el tiempo, buscando el sentido y el origen de Halloween.

En este libro encontramos concentrada, en apenas 100 páginas, la esencia de Halloween.

Me ha gustado mucho. Es cierto que la forma de narrar del autor es bastante particular, pero he disfrutado cada página y yo, que vivo muy intensamente el día de Halloween, lo he pasado genial dentro de esta historia.

En general, una lectura extraordinaria para Halloween, que te lleva de la mano por un viaje espectacular, con muchos misterios que desvelar.

Siendo decir que no he conectado nada con este historia. No conseguía leer una página seguida sin dispersarme, no me atrapaba nada, no me concentraba. No me ha parecido una prosa fácil de llevar. No sé si ha sido cosa mía o es algo del libro.

Creo que este libro es 100% para leerse durante el mes de Octubre, pero yo apenas lo pude encontrar en físico, es una historia que se lee rápidamente y que realmente te ilustra un poco sobre el orígen del día de Brujas y las diferentes tradiciones que cada cultura tiene para celebrar a sus muertos a lo largo del mundo y de los años.
Este es el tercer libro que leo de Ray Bradbury y definitivamente quiero leer más de el.

Menuda lectura.

Leí este libro por Paola (de Bicheando Libros) ya que le gustó mucho y tenemos gustos similares. Pues bien, me ha gustado bastante esta lectura. Sin duda se disfruta mucho más si se lee en otoño cerca de Halloween, porque la temática es más afín, pero aún así la he disfrutado.

"El árbol de las brujas" cuenta la historia de un grupo de niños de entre 11 y 12 años que deciden disfrazarse el día de Halloween para ir a pedir caramelos por el barrio. Esa es la premisa. Entonces Pipkin, uno de los chicos, no puede venir porque se encuentra mal y los demás chicos deciden ir aunque en realidad les da pena porque Pipkin es como el chico que cae mejor a todos. Entonces recuerdan que Pipkin les comentó que había una casa donde tenían que ir a pedir caramelos fuera como fuese, así que van. En esta mansión vive el señor Mortajosario, un hombre alto que les da un poco de miedo a los chicos. Dark vibes y eso. Los chicos le piden "truco o trato" (prenda o premio) y a partir de esa pregunta este grupo de chiquillos se verá transportado a través de distintas épocas en un viaje sobre "la noche de las brujas".

Me ha parecido un libro fantástico y lleno de lecciones sobre historia. No soy una persona muy fanática de la historia en sí, ni siquiera disfruto demasiado los libros de esa temática. Aún así, este libro trata sobre la historia de "la noche de las brujas" de un modo sutil pero bonito al mismo tiempo, aunque tiene toques muy oscuros la verdad.

Esta lectura me ha gustado bastante, ojalá haberla leído con 12-15 años, estoy segura que podría haberla disfrutado mucho más. La recomiendo a todo el mundo.

La cosa está así…

Un grupo de niños están listos para salir a pedir dulces como lo hacen cada Halloween. Deciden pasar por uno de sus amigos, a quien consideran el chico más divertido del mundo y con las mejores ideas para jugar. Sin embargo, su amigo se encuentra indispuesto y les comenta que los alcanzará en un rato.

Los niños comienzan su travesía para pedir dulces, cuando de pronto llegan a una casa que llama su atención. Es así como de pronto se encuentran en un viaje alrededor del mundo en donde conocen los orígenes del día de brujas.

Opinión personal

¿Cómo están? El día de hoy les traigo una reseña inspirada en las próximas festividades de Halloween y El día de los muertos.

El árbol de las brujas, como ya mencioné al principio, es una historia donde unos niños acuden a pedir dulces como todos los años. Llegan a una casa y piden dulces con el clásico “¿prenda o premio?” (así viene en el libro, aunque en realidad sería “trick or treat”, “truco o trato”). La persona que abre la puerta, les responde “Nada de premios solo prendas”. Es así como de pronto los niños encuentran en esta casa un árbol con calabazas colgantes con rostros. Un hombre o al menos es la mejor forma de describirlo, los lleva en un viaje en el tiempo y espacio por varios lugares del mundo como Egipto, Alemania, Francia y México. Mientras les explica el origen de la festividad.

Algo que también me dejo reflexionando, fue que muestra el paso de diferentes creencias y religiones. Dando a entender que deidades han pasado por el mundo a lo largo del tiempo y ahora estamos en la era del cristianismo.

El libro estuvo interesante, aunque no fue uno de mis favoritos y es que la intensión es mostrar como se recuerda a los muertos en diferentes culturas.

Aquí lo que no me gustó mucho (esto es muy personal) es que lo vean como la misma fiesta, es decir a estos niños los llevan por este viaje un 31 de octubre y les explican, cómo viven otras culturas el Halloween. ¿Comprenden lo que digo?

Para mí y en mí país el Halloween es el día 31 de octubre, día de la festividad de origen celta, del día de las brujas. El día de los muertos es el 1 y 2 de noviembre, así que son festividades distintas y en el libro lo manejan como una misma.

En lo personal me gusta el Halloween como una fiesta y El día de los muertos como otra.
Enlace: https://brimbooks.blogspot.c..

Que bonita historia y que bien contada!

Este libro es ideal para la época otoñal, especialmente si es Halloween. Yo lo leí en esa época y fue genial porque te metes de lleno en el ambiente.

Los personajes son entrañables y me divertí mucho leyendolos a pesar de que no les pasan cosas precisamente buenas. Pero el compañerismo que muestran y como se apoyan es algo que me enterneció muchísimo.

Un libro que pueden disfrutar tanto jovenes como mayores.
Se lee de una sentada y la forma en que está narrado es, cuanto menos, curiosa.

Sin duda merece la pena darle una oportunidad porque es muy interesante y el desenlace me ha encantado.
Enlace: http://fantasticomundodelibr..

Bradbury, con su estilo poético e impecable, nos muestra en forma de aventura fantástica el origen de la Noche de Todos los Santos.

La narración comienza en la noche de Halloween, donde ocho amigos disfrazados de diferentes monstruos se preparan para ir de casa en casa. Sin embargo, a última hora, se dan cuenta de que falta Pipkin, el alma de la fiesta. El crío llega tarde y les pide que empiecen sin él y se reúnan después en la solitaria casa de la barraca.
Emprenden la marcha y allí se topan con el Árbol de las Brujas, un árbol repleto de calabazas talladas que pertenece a un singular personaje: Mortajosario, un ser oscuro. Todo huesos y rareza.
Estando con él, ven llegar a Pipkin, e igual que lo ven llegar, observan con incredulidad como el niño desaparece.
Así pues, de mano de Mortajosario –que vuela como una cometa, formando los propios niños la cola-, emprenden un viaje en el tiempo para conocer las diferentes maneras de celebrar la, hoy por hoy, comercial noche y los diferentes ritos funerarios utilizados desde el principio de los tiempos… Y de paso salvar a su amigo.

A través de los ojos de ocho niños, viajamos al Egipto faraónico, al París medieval, asistimos a rituales druidas en Irlanda y al místico Día de los Muertos mexicano.

La historia transcurre a un ritmo frenético, contándose de manera absorbente, en frases cortas, claras y concisas, sin que el lector pierda ningún tipo de detalle.
Sin embargo en un par de ocasiones se da algún episodio que no termina de estar bien hilado y hace desviar nuestra atención del argumento, pareciendo estar de relleno.
Además Bradbury nos regala personajes interesantes y a la vez estrafalarios y vistosos, que bien podrían salir en una peli del maestro Burton.

En definitiva, este es un cuento para niños de todas las edades, idóneo para leer en una tarde con un café o chocolate a mano.
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A manera de un cuento estilo "cuento de navidad" un grupo de niños que se reúnen el día de Halloween se encuentran con un personaje que los hace ir a recorrer el mundo para conocer de primera mano las diferentes creencias y rituales sobre la muerte.

Pasando por Egipto, Roma, Irlanda, París y México, estos niños además de la aventura de conocer las diferentes culturas que rondan alrededor de la muerte, están trabajando para salvar la vida de uno de ellos.

Es un cuento interesante y entretenido, creo yo que con la finalidad de que los niños y adolescentes norteamericanos (sobretodo) sepan que su Halloween no es ni mucho menos una tradición real y que proviene básicamente de muchas otras de otros países y por supuesto más antiguas, más interesantes e incluso más hermosas.

Si bien está bastante bien, creo que nunca en mi vida me he encontrado con un autor que tenga tal capacidad de escupir adjetivos y después sinónimos, eso me lo ha hecho bastante cargado para leer, no tiene nada de malo, pero me ha cansado mucho leerlo por ese motivo y eso que es bastante corto.

Está bien, pero yo lo recomendaría y mucho a adolescentes o incluso a niños más que a adultos, es uno de esos libros que quedaría genial para lectura obligada en las escuelas, tiene un cuento interesante, lleno de aventuras, que enseña varias culturas aún y cuando solo sea por encima, pero cultura es cultura y sobre todo para los niños y mejor aún, los niños pueden saber que se pueden aplicar cualquier cantidad de adjetivos en alguna frase y que estos adjetivos tienen muchos sinónimos jajajajajaja

Es un libro considerado ya un clásico en Estados Unidos y Bradbury es considerado uno de los mejores autores norteamericanos de ciencia ficción, así que solo por eso vale la pena leerlo, me ha gustado, pero únicamente por tanto adjetivo y sinónimo le bajó su calificación, está bien para que los niños aprendan, pero como adulto realmente fue fastidioso.

1/5

No conseguí entrar en este libro. Tenía todas las papeletas para gustarme, Fahrenheit 451 del mismo autor fue una lectura buenísima. Sin embargo la forma en la que este relato está escrito no ayuda nada a meterte en la historia.

No puedo valorar ni la trama ni los personajes porque no me enteré ni de la mitad de lo que pasaba. Es todo muy caótico, frases y palabras sin sentido. Tengo entendido que la gente aprende mucho sobre distintas tradiciones de Halloween leyendo este libro, pero yo no saqué nada en limpio. En fin, un desastre de lectura que prefiero pasar por alto y seguir quedándome con el buen sabor de boca de Bradbury.

Ocho niños en la noche de Halloween viajan a través de diferentes eras para encontrar y rescatar a su amigo Pipkin y al mismo tiempo aprenden sobre los orígenes de algunas historias de Halloween.
Es un libro hermoso ideal para leer en las noches de otoño. La manera en que Bradbury escribe es genial y muy entretenida, creando grandes personajes mientras nos envuelve en su historia.