|
|
|
Planeta de exilio de Ursula K. Le Guin
Hiciste lo que pudiste. Humanos y no humanos no pueden trabajar juntos. Seiscientos años de fracaso deberían de habértelo dicho.
|
Planeta de exilio de Ursula K. Le Guin
Este mundo en el que había nacido, en el que habían nacido su padre y sus antepasados durante veintitrés generaciones, no era su hogar. Su raza era alienígena. Siempre habían sido profundamente conscientes de ello. Eran los nacidos lejos. Y poco a poco, con la majestuosa lentitud, con la obstinación vegetal del proceso evolutivo, este mundo los estaba matando.
|
El mundo de Rocannon de Ursula K. Le Guin
¿Cómo distinguir la leyenda de la realidad en estos mundos que se encuentran a tantos años luz de distancia? Planetas sin nombre, a los que sus habitantes llaman simplemente El Mundo, planetas sin historia donde del pasado se ocupan tan solo los mitos y el viajero que regresa descubre que sus actos de pocos años atrás se han convertido en gestos de un dios.
|
El mundo de Rocannon de Ursula K. Le Guin
Fueran quienes fueran estas gentes que habían bombardeado una nave de exploración desarmada apenas la avistaron, evidentemente pretendían explorar el planeta y apoderarse de él para colonizarlo o para fines militares.
|
El mundo de Rocannon de Ursula K. Le Guin
Eran una raza jactanciosa, los angyar: vengativos, arrogantes, obstinados, incultos y carentes de formas en primera persona para decir “soy incapaz”. En sus leyendas no había dioses, solo héroes.
|
Un mago de Terramar (Historias de Terramar 1) de Ursula K. Le Guin
Y la verdad es que a medida que un hombre adquiere más poder y sabiduría, se le estrecha el camino, hasta que al fin no elige, y hace pura y simplemente lo que tiene que hacer...
|
El relato de Ursula K. Le Guin
Todo se remitía a la palabras. Como los griegos con su Logos, la palabra hebrea que era Dios. Pero esto eran palabras. No el Logos, la Palabra, sino palabras. No una, sino muchas, muchas... Nadie hizo el mundo, gobernó el mundo, ordenó que el mundo fuera. El mundo era. Hacía.
|
El relato de Ursula K. Le Guin
- No estamos fuera del mundo, yoz. ¿Sabes? Somos el mundo. Somos su lenguaje. Nosotros vivimos y él vive. ¿Lo entiendes? Si nosotros no decimos las palabras, ¿qué hay en nuestro mundo?
|
Cuatro caminos hacia el perdón de Ursula K. Le Guin
Ninguna verdad puede convertir en falsa otra verdad. Todo saber es parte del saber completo. Una línea verdadera, un color verdadero. Una vez que se ha visto el dibujo completo, no se puede seguir viendo la parte como el todo.
|
Cuatro caminos hacia el perdón de Ursula K. Le Guin
Los historiadores se pasaban la vida viajando y reuniendo información sobre los otros planetas habitados del cercano Brazo de Orión, colonizado por sus antepasados dos millones de años antes, durante las Eras antiguas. [...] Estaban poniéndose en contacto con parientes perdidos hacía largo tiempo. Ellos nombraban a esta red de mundos con una palabra alienígena, Ekumen, que significa 'el hogar'.
|
Cuatro caminos hacia el perdón de Ursula K. Le Guin
Lo que yo descubrí en la historia es que la libertad se hacía, no se daba.
|
Los dones nº 01/03 de Ursula K. Le Guin
—Para controlar tu don tienes que usarlo —dijo Canoc, todavía con aquella amabilidad que debilitaba mi resolución. —No quiero usarlo. —Entonces puede que él te use a ti. |
Los dones nº 01/03 de Ursula K. Le Guin
¡No puedo controlarlo! ¡No puedo hacerlo cuando quiero y cuando no quiero hacerlo lo hago! ¡No me atrevo a mirarte! ¡No me atrevo a mirar nada!
|
Los libros de Terramar. Edición completa ilustrada: Ilustraciones de Charles Vess de Ursula K. Le Guin
El peligro de tratar de hacer el bien es que la mente llega a confundir la intención de la bondad con el acto de hacer las cosas bien
|
La mano izquierda de la oscuridad de Ursula K. Le Guin
Es una cuestión de preferencias. Los terrestres piensan que han de ir adelante, que es necesario progresar. La gente de Invierno, que vive siempre en el año uno, siente que el progreso es menos importante que la presencia.
|
La mano izquierda de la oscuridad de Ursula K. Le Guin
El impacto de una cultura tan diferente no tenía demasiada importancia comparado con el impacto biológico que yo sentía como hombre entre seres humanos que eran, cinco sextas partes del tiempo, hermafroditas neutros.
|
Quienes se marchan de Omelas de Ursula K. Le Guin
Todos saben que está allí, todos los que viven en Omelas. Algunos han ido a verla, otros se contentan solo con saber que está. Todos saben que debe estar allí. Algunos entienden por qué, otros no.
|
Quienes se marchan de Omelas de Ursula K. Le Guin
El lugar al que se dirigen es para la mayoría de nosotros un lugar aún menos imaginable que la ciudad feliz.
|
¿Qué objetousaron como traslador en el Mundial de Quidditch?