La muerte nunca es un comienzo, porque la vida nunca es un cuento de hadas. La muerte no es más que un cañón negro que escupe humo y una lluvia de casquillos de bala sobre el suelo.
|
La muerte nunca es un comienzo, porque la vida nunca es un cuento de hadas. La muerte no es más que un cañón negro que escupe humo y una lluvia de casquillos de bala sobre el suelo.
|
Nos pasamos la vida postergando para más adelante lo que querríamos hacer, engañándonos a nosotros mismos con «este no es el momento adecuado» o «mejor en otra ocasión».
|
En cierto modo somos como pájaros de mal agüero: solo aparecemos cuando se avecina lo peor y, en cuanto la tormenta ha pasado, nos esfumamos sin que nadie nos eche de menos.
|
Siempre viajando de un lugar a otro como portadores de malas nuevas, siempre preguntándose a quién tendrán que ver morir a continuación.
|
Nos pasamos la vida postergando para más adelante lo que querríamos hacer, engañándonos a nosotros mismos con "éste no es el momento adecuado" o "mejor en otra ocasión"
|
La casa se alzaba sobre el acantilado, tan cerca de la pendiente golpeada por el Atlántico que daba la sensación de estar planteándose seriamente el suicidio.
|
Nos pasamos la vida postergando para más adelante lo que querríamos hacer, engañándonos a nosotros mismos con «este no es el momento adecuado», o «mejor en otra ocasión» ...
|
Es un cuerpo creado a partir de la unión de distintas partes de cadáveres diseccionados, escrito por Mary Shelley a partir del reto literario de Lord Byron.