El hilo invisible

"El hilo invisible" es un hermoso cuento que aborda de manera tierna y profunda los vínculos familiares y el amor incondicional. Con la pluma experta de Míriam Tirado, este libro nos sumerge en una historia que captura la esencia de las relaciones humanas.

A través del personaje de Nura, nos adentramos en un descubrimiento revelador: el hilo invisible que la conecta con las personas que más quiere. Esta metáfora poderosa nos recuerda que, a pesar de la distancia o el tiempo, los lazos familiares perduran y nos mantienen conectados.

El libro transmite un mensaje reconfortante y tranquilizador para los niños, ya que les enseña que siempre estarán unidos a sus seres queridos, incluso cuando no están físicamente presentes. El hilo invisible representa el amor y el afecto que trascienden las barreras físicas, brindando seguridad y confianza a Nura y a los lectores.

Además, "El hilo invisible" destaca la importancia de valorar las conexiones invisibles y profundas en nuestras vidas. A veces, las cosas más importantes son las que no se ven a simple vista, y este cuento nos invita a ser conscientes de ello.

¿Cómo puede explicarse tanto en tan pocas páginas? ¿Cómo escribir sobre la conexión y la separación de un modo accesible a todos los públicos?

Una historia maravillosa sobre el hilo que nos une a las personas que amamos, a pesar de no estar juntas.

Una historia sobre el vínculo y las conexiones, más allá del tiempo y la distancia.

Un cuento que puede utilizarse para la gestión emocional de grandes y pequeños en las distintas etapas de la vida (duelo, separación, amor verdadero, expresión de sentimientos...).

¡Un cuento ilustrado muy recomendable!

Gané un sorteo de la autora y podía elegir cualquiera de sus libros. Me decidí por este porque me parecía que iba a ser ideal para mi peque y ha sido todo un acierto. La historia me ha parecido preciosa y está acompañada de unas ilustraciones maravillosas. A mi niño le encanta que le lea el cuento mientras va mirando las ilustraciones. Además estoy segura de que en unos meses, cuando empiece el cole, esta historia nos ayudará mucho. Lo recomiendo tanto para peques como para adultos.

Hoy os voy a descuadrar los esquemas publicando una reseña infantil, igual no lo sabéis pero tengo una sobrina muy pequeña, así que estoy leyendo (todo lo que yo no he leído en su día) bastantes libros infantiles para hacer de filtro. En mi época hubo algún que otro libro que estaba un poco desfasado en cuanto pensamiento, por decirlo con suavidad, así que prefiero hacer yo la selección.

Dicho esto, este libro lo recomiendan a partir de los cuatro años, así que lo tengo guardado para un futuro. Me ha parecido preciosa la historia y el mensaje que traslada la autora, sin obviar las ilustraciones que son increíbles.

Este cuento sirve para explicar muchas situaciones: para ir al colegio, en el caso de que no pueda ver todos los días a sus abuelos o tíos, para el supuesto de que no vea a su padre/madre durante un tiempo porque están en el trabajo o divorciados... Los niños suelen tener mucho apego y separarse de sus progenitores es algo duro, y este cuento es una bonita forma de explicarlo.

A Nura, la protagonista de este cuento, le cuentan un gran secreto, y es que todos estamos conectados por el hilo invisible, que parte del ombligo. Entonces aunque Nura no vea a sus padres, abuelos o a su mascota, ella está conectada a ellos por el hilo y los siente, se siente acompañada.

Con este descubrimiento, va al cole y le explica a todos sus compañeros el hallazgo, logra levantar el ánimo a más de uno y todos consiguen palpar esa conexión hacia sus seres más queridos.

Estoy buscando historias de este estilo para cuando le toque empezar al colegio, a lo tonto y a lo bobo entramos con cinco años y salimos con diecisiete (es cuanto menos impactante); de lunes a viernes. No sé vosotros pero en mi caso me costó un montón ir a clases, lo de separarme de mis padres y de mi casa fue bastante traumático y he de decir que todavía me acuerdo de los nervios que pasaba; y no se lo deseo a nadie (ni a peques ni a los padres que también sufren lo suyo).

Si os interesa, también tenéis la versión pop up (con desplegables), adaptado a peques de 2 años.

Tanto las ilustraciones como la historia me han encantado. Lo veo ideal tanto para niños como para mayores. Y admitiré que en alguna ocasión hasta se me han empañado los ojos. Es una historia que te hace sentir muchas cosas buenas.

Nura es la protagonista de esta historia, a la que podéis ver en la imagen de portada.

Si aún no conocéis el secreto que guarda el ombligo, tenéis que leerlo. Es precioso.

Un libro diez! La historia es muy bonita, la forma en que la narra y acompañan la ilustraciones a los textos me parece una manera preciosa de ayudar a los más pequeños a enseñarles a estar bien sin x persona, a no pasarlo mal cuando tiene que estar cierto tiempo fuera... En definitiva: a aprender a estar solos, a ser independientes, sin sufrir por si la persona no vuelve. Precioso

Nura, la protagonista del cuento, descubre un día el secreto del hilo invisible. Cuando le pregunta a su madre que para qué sirve el ombligo, ésta le cuenta que ahí es donde se esconde el secreto del hilo invisible, es decir, el ombligo es ese mágico lugar de donde salen todos los hilos que nos unen a las personas que queremos para sentirlas cerca estén a nuestro lado o no.
Me parece una idea super original que da forma a un cuento precioso pero sobre todo "El hilo invisible" me parece un recurso fabuloso para utilizar en momentos difíciles que los niños puedan atravesar, bien sea preocupación por estar en un lugar desconocido, pérdida de un ser querido, mudarse a vivir a una nueva ciudad o tener miedo a la oscuridad, por ejemplo.
Una herramienta fantástica para uso de padres, educadores o cualquier adulto que necesite hacer ver a los peques que siempre estamos al lado de las personas a las que quermemos sin importar el tiempo o el espacio que nos separe de ellos pues los vínculos que nos unen trabajan para estar siempre cerca con ayuda, por supuestísimo, de todos esos hilos invisibles que van de ombligo a ombligo ; ).
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Tenía muchas ganas de leer este cuento de Miriam Tirado y la verdad es que este libro es puro amor

El texto es maravilloso y los dibujos también me han gustado muchísimo. Es un libro que trata sobre esos hilos que nos unen siempre con las personas que queremos, estemos donde estemos, en cualquier momento y circunstancia... de tal modo que nunca estamos solos. Me parece una historia fantástica para abordar esos momentos en los que a los peques les resulta difícil separarse de su papá o mamá para ir al cole o para cualquier otra actividad... pero para qué engañarnos, también nos sirve a nosotros para llevar mejor esos ratos sin nuestros pequeños. No sé quién echa más de menos a quién.

De momento no lo tengo en papel porque Lucas es muy pequeño para poder entenderlo... pero dentro de un tiempo me haré con él para leerlo juntos sin lugar a dudas. Creo que será muy mágico.

Me encantan los libros que abordan estos sentimientos de apego y amor con tanta dulzura.. y ya tengo alguno más fichado así que poco a poco los iré leyendo.

¡Menuda sorpresa con este libro! Me esperaba que fuese más cortito y son 64 páginas y en gran formato, más grande que los álbumes ilustrados a los que estamos acostumbrados en casa.
La historia de Nura, que descubre su ombligo y los hilos que salen del mismo para conectarnos a las personas (y también a los animales) que más queremos, desde incluso antes de su existencia hasta más allá de ésta,me parece genial.
Es un libro que puede servir de punto de apoyo para explicar diferentes situaciones que se dan a menudo: la separación de las figuras de apego cuando se empieza el colegio, el fallecimiento de un ser querido, el deseo de tener una mascota, la separación de los padres, la ausencia por un viaje largo en el tiempo... Hasta sirve para esos momentos de bajón de no poder vernos por culpa del coronavirus.
Además, Nura se muestra muy empática con un compañero que llora en el patio del colegio, punto que también me parece muy importante. Ella comparte su secreto y reconforta a su compañero.
Las ilustraciones casan a la perfección con el texto, son entrañables y muy coloridas.
Nos ha gustado muchísimo.

Con la llegada de la edad adulta, no debemos de olvidar los pequeños placeres que alimenten a nuestro niño interior. Ese que en ocasiones todavía sueña con jugar o leer un buen cuento antes de dormir. "El hilo invisible" nos muestra una historia que no solo es capaz de enternecer incluso al corazón más maduro, sino también con un importante mensaje dirigido a todos los públicos. Seas un niño, un adulto o incluso un anciano que disfruta leyendo.

A través de su historia, empleando un lenguaje sencillo y accesible a cualquier lector, nos transmite un poderoso mensaje: Nunca estamos solos. A través de la metáfora del hilo invisible, nos muestra como pese a estar lejos de quienes amamos, nos encontramos conectados por y para siempre con dichas personas.

Un aspecto positivo a valorar es sin duda alguna la inclusión de los animales en dichos lazos, los habitualmente olvidados por los cuentos cuando hablamos de vínculos afectivos. ¿A caso nuestros compañeros peludos no merecen nuestro amor incondicional? Según el libro, lo merecen tanto como cualquier otro ser perteneciente a la familia. Y yo, con total sinceridad, no podría estar más de acuerdo.

Como ya anteriormente he anunciado, la lectura de este libro resulta sencilla en manos de cualquier lector a causa del uso de un lenguaje claro y asequible. Sin duda alguna, parece emplear la palabra exacta en el momento exacto, propiciando una gran satisfacción al leerlo. No obstante, a parte del lenguaje empleado, también cabe destacar las ilustraciones que acompañan a este libro que consiguieron enamorarme sin siquiera llegar a abrirlo. Dibujos que consiguen llenar de dulzura los días grises en los que vivimos.

Seas madre o padre, profesor o profesora o simplemente una persona a la que le agrada disfrutar de una lectura breve llena del más inocente sentimiento, te invito a perderte entre sus ilustraciones y palabras. Déjate llevar por "El hilo invisible".