Progenie

Primer libro que leo de la autora y me ha gustado. Lo he leído en poco más de 24 horas, me enganchó desde el primer momento y se me pasaron las horas sin darme cuenta. Me han gustado los personajes y he empatizado con ellos. Seguiré con "Especie" y "Planeta" hasta terminar la trilogía.



Esta es la primera entrega de una trilogía cuya protagonista principal es Camino Vargas, jefa accidental del grupo de homicidios de la ciudad de Sevilla. Durante una ola de calor al final del verano, una mujer es atropellada salvajemente de madrugada. El asesino deja un chupete en la boca de la víctima antes de desaparecer.



En la autopsia se descubre que la mujer estaba embarazada y el equipo de homicidios empieza a investigar. Pronto se descubre el cadáver de otra mujer asesinada en su casa con un babero atado al cuello; ¿se enfrentan a un asesino en serie?



La lectura se hace muy amena y entretenida, con capítulos cortos y mucho diálogo, con las justas descripciones y explicaciones para ir siguiendo el hilo. Una trama con un punto de originalidad que discurre muy correctamente. Los personajes bien perfilados que componen un todo muy armónico, cada uno con su personalidad y su historia vital, muy cercanos al lector.



Ha sido para mí una muy buena aproximación a la autora que me anima a conocer más de su obra y también me anima a recomendarte su lectura si eres amante del género; no esperes cohetes y fuegos artificiales pero puedes pasar unos buenos ratos leyendo.

Llevaba mucho tiempo con ganas de hacerle hueco a esta novela, porque había leído muy buenas críticas sobre ella y porque transcurre en Sevilla, ciudad a la que le guardo mucho cariño.
El argumento no puede ser más atrayente: un asesino en serie con un modus operandi bastante ecléctico y que firma dejando elementos relacionados con bebés... Todo esto, unido a un equipo de detectives poco acostumbrado a este tipo de casos, con la presión mediática que conlleva.
Lo mejor 💙
- Capítulos cortos, que te dejan con ganas de más y más.
- Sevilla.
- Lupe, la novata del equipo.
- Me quedo con ganas de conocer más de la historia entre Camino y su jefe, Arenas.
Lo peor
- El final se va intuyendo a medida que avanza la novela, por lo que te quedas con ganas de algún giro argumental que te deje con la boca abierta.
- Policías típicos-tópicos.
Novela recomendable para todos los amantes del género. Y si no lo sabíais, en una semana tendremos la segunda parte de esta serie: Especie. Así que con muchas ganas de leerla 😃¿Conocíais a la autora @susanamartingijon? ¿Habéis leído algo suyo? A mí se me ha antojado leerme su anterior trilogía que transcurre en Mérida.

Ha sido todo un descubrimiento para mí. Su narrativa y el ritmo de la historia son fantásticos. Hace que la lectura sea amena y fluida.
Esta es la primera novela que leo de Susana y si os aseguro que no será la última.

Hablemos de las tripas de Progenie;
Encontré una trama muy trabajada que me sorprendía continuamente. Te va dando la información justa para mantenerte en vilo, asegurándose que el lector no sabe demasiado y sigue siendo un privilegiado espectador.
Trata de una forma muy equilibrada el tema de la violencia de género y el feminismo introduciéndolos en la historia con toda naturalidad y respeto.
Todo esto lo narra en un escenario Sevillano y caluroso que sin duda, pone la guinda a este thriller. Protagonizado por la inspectora jefe Camino Vargas, que mientras suda la gota gorda a causa de las altas temperaturas, se enfrenta a una serie de asesinatos especialmente retorcidos , pero con un trasfondo y un mensaje social siempre controvertido:
Simples seres humanos jugando a ser Dioses...

No puedo resistirme a una novela que huela a thriller, negra, misterio o incluso cozy thriller y esta ya se me había resistido mucho tiempo.

¿Qué me he encontrado?

- Un thriller de capítulos cortos bastante bien atadito.
- Una inspectora de policía con su mochilita a cuestas, pero nada espectacular, bastante normalita, vamos, muy creíble como personaje. Eso sí, con un genio de copón bendito. No se yo si me gustaría tenerla de de compañera.. y mucho menos de jefa.
- Una Sevilla calurosa asediada por un asesino de mujeres y una marca personal muy peculiar
- Un tema bastante polémico y candente en nuestros tiempos
- Una crítica social interesante.
- Un final un poco cogido por los pelos.

Camino Vargas tendrá que enfrentarse a uno de los casos más complicados desde que está cubriendo a su jefe como inspectora. Una mujer aparece asesinada en un barrio marginal de Sevilla, ¿qué hace una chica de clase media en ese barrio? ¿ha sido su reciente expareja? Tras la autopsia se descubre que estaba embarazada. Todo apunta a su anterior pareja a la que dejó hace solo unos pocos meses, pero mientras dilucidan qué está pasando, los asesinatos comienzan a sucederse con un modus operandi parecido. ¿Estaban relacionadas las víctimas?.

La verdad es que es una historia sencilla y ágil, con algunas cositas que me han rechinado un poco, sobre todo al final, pero se lee bien y rápido y mantiene la tensión lo suficiente como para seguir con la serie.

No he logrado conectar demasiado con Camino y eso quizás le ha bajado puntos.

Toca algunos temas de actualidad como el deseo de ser madre y la verdad es que lo hace con sensibilidad y respetando todas las opciones.

Veremos como evoluciona con el segundo

He leído una novela negra que me ha gustado por varias razones. Puede que la principal sea que la mujer tiene un papel bastante diferente al asignado en las novelas negras tradicionales. Hace tiempo que descubrimos a una mujer capaz de abandonar el papel de víctima y acogerse al de policía o eludir a la mujer fatal, usual en el género, para adoptar el de “normalita”. Pero Progenie sigue los pasos marcados por su título y la mujer se erige en personaje absoluto. En Progenie hay víctimas, mujeres que no son tan inocentes como cabría esperar o como daban a entender en el entorno en el que se desenvolvían; el equipo policial no está compuesto sólo de mujeres pero sí lo son la inspectora jefe, la comisaria, la forense, la policía más antigua y la novata; todo un plantel en el que podemos ver diferentes prioridades, diferentes causas por las que han elegido el trabajo y diferentes formas de entender la felicidad. Entre los personajes secundarios también encontramos alguna mujer que destaca por su inteligencia, incluso Nerea, guapa, despampanante, se aparta del cliché de secretaria algo limitada intelectualmente para todo lo que no sea su trabajo y aparece como una chica culta y capaz de tratar temas de diversas índoles.

Susana Martín Gijón ha dado una vuelta de tuerca a la mujer del siglo XXI y ha puesto el dedo en la llaga con Progenie. Las víctimas son mujeres, en principio poco sociables, con pocas relaciones sociales. Las víctimas han sufrido una muerte violenta, aparentemente sin motivación; no ha habido robo ni violación. Los asesinatos no siguen ritual alguno, sin embargo, todas las mujeres asesinadas aparecen con un objeto inquietante:

Soledad Cabezas, recepcionista de la clínica Santa Felicitas, especializada en técnicas de reproducción asistida, donde trabajaba desde hacía dieciocho meses, desde que se había trasladado a Sevilla a vivir con su expareja, después de dejar a su padre en Madrid. «Me contó que se venía aquí a vivir con él. Así, por las buenas. Que habían hablado mucho sobre su relación y querían intentarlo […] Me enfadé tanto que dejé de hablarle […] Que se estaba cavando su tumba y que no contara conmigo».

Soledad aparece atropellada en la noche, con un chupete en la boca.

Lola Cuadrado, escritora de novelas. Sin pareja, entregada exclusivamente a su trabajo «Y Lola no tenía hijos ni sobrinos ni nada por el estilo […] —¿Ni un ex con el que pudiera haber vuelto? —No. Por lo menos desde […] hace más de diez años».

A Lola le abren la cabeza con su trofeo literario y le ponen un babero al cuello.

María de la Concepción Arjona, apuñalada en el abdomen y tirada en la fuente de un parque junto a unos patitos de goma.

Las tres mujeres, de edades diferentes, estaban embarazadas en el momento del crimen, incluso María Concepción, de 54 años. Las tres se han quedado embarazadas gracias a la clínica Felicitas, por lo que su directora, Natalia Matute, está desolada, cree que puede ser obra de «retrógrados que no se han enterado de que las mujeres tenemos tanto derecho como ellos a hacer lo que nos dé la gana».

También Camino, la inspectora, está soltera y ha dejado de pensar en traer hijos al mundo, algo que nunca le ha atraído y menos ahora, con 44 años.

Por el contrario, Lupe, la más joven del equipo, debe enfrentarse a su hijo casi adolescente y a un marido en el paro con sueños de escritor. Lupe debe luchar con la conciliación familiar esperando que la traten en serio y dejen de relegar su trabajo al papeleo.
Y, finalmente encontramos a Teresa, a punto de jubilarse, con hijos y nietos, feliz de su papel como ama de casa y cuidadora, y feliz de no haber deseado adquirir más responsabilidades en el trabajo para poder dedicarse a su familia.

Mujeres que realmente han debido elegir entre el trabajo (y las aspiraciones) y la maternidad. Mujeres que, como la forense, cuando se han visto instaladas social y laboralmente, se les ha hecho tarde para engendrar un hijo y deben pasar por la tortura física y psicológica que supone la fecundación médica «Micaela la mira desde el fondo de unos ojos acuosos, tratando de contener la rabia […] —Era un embarazo gemelar».

Otras, que han decidido no engendrarlo, y deben pasar por la culpa personal o social a la que serán sometidas, «No quiere un hijo ni dos ni tres, como no quiere un marido ni un gato ni un perro. Quiere su tiempo para ella, quiere ser buena en su trabajo […] quiere pasar por la existencia disfrutando en lo que pueda […] ¿Es mucho pedir?».

En cualquier caso son situaciones que el hombre no ha conocido, por lo que es difícil que todos sean capaces de entenderlo.

Susana Martín da cuenta con este argumento tan actual, de la sociedad española; el poder que da el dinero y el afán por controlar de quienes poseen un razonamiento asocial y egoísta. El grupo de sospechosos estaría en esta situación. El grupo de víctimas es el resultado de las dificultades con las que se encuentra hoy cualquier mujer, siempre apremiada a lo largo de los siglos por el reloj biológico y hoy, además, capaz de desmentir el instinto maternal. El grupo de policías es bastante resultón formado por mujeres y hombres diferentes, unos con más corazón que aspiraciones, pero todos capaces de realizar un impecable trabajo.

Si el tema de la maternidad es el principal, no debemos obviar otro, presente como fondo, la fertilidad como negocio. No todo en este mundo son buenas intenciones. Asimismo, hay trazos de violencia de género, no olvidemos que las huellas mentales, a diferencia de las físicas, apenas se borran con el tiempo.

El suspense de Progenie está desde el comienzo, en el que Soraya y Mª Jesús se dirigen felices a empezar su futuro, pero esta narración queda interrumpida por el dolor del padre de Soledad al enterarse de la muerte de su hija. Soraya y Mª Jesús irrumpirán de vez en cuando en el relato, con una letra en cursiva que las diferencia del resto de personajes, para generar una expectación creciente en el lector.

La lectura es fácil pues, a la personalidad diferente y atractiva de todas las mujeres, la autora añade una sugerente intriga que conseguirá hacer desaparecer a los sospechosos, por falta de motivos y por la manifestación de un secreto que saca a la luz el antiguo inspector. Con este personaje y este enigma la historia termina de enriquecerse y la estructura de la novela queda perfectamente encuadrada en cuatro partes y cuatro víctimas.

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No juzgues un libro por su portada, no me atraía para nada pero sin duda ha sido una sorpresa y un buen descubrimiento.

Un libro muy ameno de leer, bien narrado, adictivo.

Sus capítulos cortos son todo un acierto pues hacen muy fluida su lectura.

Continuaré con esta trilogía sin duda.

Hace mucho que ví esta trilogía por aquí y tenía muchas ganas de leer estos libros, así que cuando entré en la biblioteca y lo vi, me lo llevé a casa corriendo.

Primero de los libros, narración ágil, con capítulos muy cortos, con un ritmo de vértigo. Esto hace la lectura se haga adictiva.

Personaje principal, Camino Vargas, como es costumbre ya en este tipo de libros, con algo personal que debe superar. Y en esta parte es donde encuentro lo más destacable de la novela, el conjunto de personajes secundarios que la acompañan y que dan realidad al libro. Me explico, lo normal es que en las novelas policíacas el equipo esté centrado de manera muy seria en la resolución del caso, sin embargo aquí vemos un equipo muy humano que, si bien, trabajan duro para descubrir los hechos, no dejan de tener una buena relación entre ellos y hay momentos de relajación e incluso de risas, que es como creo yo que debe ser una comisaría. Seriedad en el trabajo pero buen rollo en los descansos. Esto me ha gustado mucho.

La historia en sí muy original, me recuerda a la trilogía de Carmen Mola.

No veo en el fondo de esta historia una crítica pero si un debato social sobre el que se puede hablar y mucho con distintas opiniones al respecto.

En resumen, una lectura a tener en cuenta para los amantes del thriller y por supuesto seguiré leyendo los siguientes.

Es una historia ambientada en Sevilla, donde la inspectora Camino y su equipo se encuentran ante un caso de asesinato, una mujer ha sido atropellada salvajemente y el conductor se ha dado a la fuga, la autopsia revela que la víctima estaba embarazada y se filtra a la prensa que dentro de la boca de la victima había un chupete de bebé. Su expareja empieza a ser el primer sospechoso, sin embargo esta teoría pierde fuelle cuando comienzan a sucederse más asesinatos

Toca un tema muy controvertido como lo es la maternidad, el negocio de las clínicas de reproducción asistida, la obsesión tanto de científicos por los avances experimentales como las ansias de las madres por tener un hijo cueste lo que cueste, sin duda un tema original y polemico

Un thriller que engancha, rápido de leer, capítulos cortos, entretenida, con mucho ritmo e intriga y aunque el desenlace se vuelve previsible no baja la intensidad

Segunda reseña de la semana :) Hoy os enseño un libro que me llegó por parte de Alfaguara: Progenie de Susana Martín Gijón. Está presentado como un thriller espectacular que te quitará el aliento y ya sabéis que no me puedo resistir a eso. Me ha durado unos tres días más o menos y aquí os dejo mis conclusiones.

La premisa es muy sencilla y es la típica que nos encontramos nada más empezar un libro de este género: Ha aparecido una mujer atropellada con un chupete en la boca en una calle sevillana. Camino Vargas será la encargada de llevar la investigación sobre este triste y terrible suceso y tendrá que encontrar al culpable antes de que ocurran más asesinatos.

Para mi, lo mejor de la novela ha sido la estructura de sus capítulos. Son muy cortos y están contandos desde distintos puntos de vista y eso le da un toque rápido y ameno a la lectura. Los capítulos pasan volando y cuando te das cuenta, ya vas por más de la mitad del libro. Muy buena idea de conformar los capítulos de esta manera, me ha encantado. La trama está bien. No es nada del otro mundo, pero está entretenida. El problema que he tenido han sido los personajes.



Me ha sido imposible conectar con ninguno de ellos. Sobre todo con Camino. Me encantan las mujeres policia fuertes, decididas y valientes, con ese toque de bordería o chulería que tan bien caracterizan a otros personajes masculinos. Pero lo de Camino me ha resultado exagerado. Demasiado borde, demasiado apática, demasiado bruta. No se, no he empatizado y no me ha caido bien. Ni me ha parecido buen policía. Y los demás integrantes del equipo... parecen de risa. No me han parecido profesionales en ningún momento. He sentido que le falta seriedad a la historia en algunos momentos clave, cuando todo lo que ocurre no tiene nada de gracia. Ojo, me encanta el humor y para mi, una novela sin humor no es nada, pero me ha faltado credibilidad en ese sentido. Los chistes no me hacían gracia y algunas conversaciones de daban vergüenza ajena.



Se tocan temas de muy actualidad como la violencia de género, el feminismo y las políticas del gobierno, y eso si que me ha gustado, pero a veces alguno de esos temas, como el feminismo, lo he visto un poco forzado. El final la verdad que no me lo esperaba y si que me ha sorprendido, me ha parecido bastante correcto. Aunque este libro no ha sido lo que esperaba, el estilo de la autora me ha gustado y quiero seguir descubriendo su obra.

En definitiva, Progenie no ha sido lo que esperaba y me ha acabado decepcionando. Se lee muy rápido y engancha pero sus personajes no me han convencido nada y me han lastrado la lectura.
Enlace: http://addicionaloslibros.bl..

Hoy os hablamos de “Progenie” última novela de la autora Susana Martín Gijón. En mi caso es la primera vez que me acerco a la obra de la autora y en esta ocasión viene de la mano de Alfaguara.

La jefa de homicidios Camino Vargas se tiene que enfrentar a una serie de asesinatos que se están produciendo en una calurosa Sevilla. Camino lleva poco tiempo como jefa ya que su antecesor y compañero se encuentra en el hospital herido.

Pronto se darán cuenta que los asesinatos tienen algo en común y que por tanto se enfrentan a un caso complejo, ya que en ninguno de ellos hay pistas que seguir ni testigos. Todas las mujeres estaban embarazadas y este hecho hace que el caso sea extremadamente duro.

La novela está estructurada en cuatro partes que a su vez se subdividen en capítulos cortos relatados por un narrador omnisciente que en tiempo presente nos va detallando lo que va ocurriendo. Cada una de las cuatro partes se inicia con una parte en cursiva en la que se va detallando la historia de dos mujeres que no sabemos inicialmente que relación tienen con la trama. Los capítulos empiezan de forma original ya que todos se inician con una frase en cursiva. Puede parecer un detalle más, pero a mí estos puntos de distinción me gustan y hacen la lectura más atractiva.

La trama puede parecer simple, un caso policial manido pero lo importante aquí es el trasfondo de la historia, saber el motivo por el que alguien asesina de forma despiadada a estas mujeres. Y aquí, en la denuncia social, es donde quizá más me ha fallado esta historia. El tema de la maternidad me ha parecido algo repetitivo, es cierto que está bien tratado, pero me hubiera gustado que se profundizará menos, que hubiera menos alusiones, pero es solo una impresión personal que para nada afecta a la investigación policial que es la trama principal de la novela.

El lenguaje empleado es correcto, con una narración sencilla pero acorde a la historia nos encontramos una trama con un ritmo que, aun no siendo rápido, consigue mantener el interés del lector a lo largo de toda la lectura. No quiero dejar de destacar la gran cantidad de temas que se tratan en «Progenie»: la maternidad, las clínicas de reproducción asistida, machismo, violencia de género, conciliación familiar, la homosexualidad, las relaciones de pareja tras una separación, custodias compartidas…en mi opinión demasiados temas que no acaban de entrar de forma natural en la historia.

«Progenie» es una novela que se lee rápido, por tanto, para nada es aburrida pero que a los que hemos leído mucho de este género quizá no encontremos un punto de distinción en la historia con respecto a otras ya leídas. Pero si te gusta el género y quieres pasar un rato entretenido te animo a adentrarte en la historia y las subtramas de esta novela.
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