Al final mueren los dos

Da igual el momento, todos terminamos por llegar al final del camino. Nadie escapa a esta regla, pero lo que dejamos atrás hace que sigamos con vida para otros.

El hombre no ha de temer la muerte. Lo que ha de temer es nunca comenzar a vivir.

El amor es un superpoder que todos tenemos, pero que no siempre somos capaces de controlarlo. Sobre todo cuando nos hacemos mayores. Es posible que a veces se descontrole, y no debía asustarme si mi poder algún día se centraba en una persona inesperada.

Vivir es lo más raro de este mundo, pues la mayoría de las personas no hacemos otra cosa que existir.

Quisiera leerll

Sí, es verdad que vivimos o por lo menos nos dan la oportunidad de hacerlo, pero vivir a veces resulta duro y complicado por culpa del miedo.

Me educaron para que fuera sincero, pero la verdad a veces puede ser complicada. No importa si esa verdad de hecho no va a causar destrozos; las palabras a veces no te salen hasta que te encuentras a solas. Ni siquiera eso es seguro. La verdad a veces es un secreto que te escondes a ti mismo, porque vivir una mentira resulta más fácil

Me educaron para que fuera sincero, pero la verdad a veces puede ser complicada. No importa si esa verdad de hecho no va a causar destrozos; las palabras a veces no te salen hasta que te encuentras a solas. Ni siquiera eso es seguro. La verdad a veces es un secreto que te escondes a ti mismo, porque vivir una mentira resulta más fácil.

El reloj de arena está a punto de llegar a su final. Me asaltan pensamientos sombríos. Visualizo que la Muerte me sigue los pasos, ocultándose tras los coches y los arbustos, presta a golpear con su guadaña maldita

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