Ardí como hacían los cristianos en la antigua Roma y morí por segunda vez en ese día, en que la fortuna simplemente no me era favorable.
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Ardí como hacían los cristianos en la antigua Roma y morí por segunda vez en ese día, en que la fortuna simplemente no me era favorable.
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Si tú me hicieras caso, renunciaría a todas estas mujeres.
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Hay distintos tipos de casualidades: casualidades que se presentan como una catástrofe, pero se transforman en algo bueno; casualidades que de presentan como algo bueno y luego de convierten en catástrofe, y casualidades ante las que te quedas con la boca abierta durante mucho rato.
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Y también supe cuál era la lección que, según Buda, aún tenía que aprender: Los muertos también tienen que saber desprenderse de las cosas.
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Una mujer hermosa no lo es por su aspecto, sino por su carácter.
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Aquello era el caos, pero de un modo perfecto. ¿O era la perfección de un modo caótico? En cualquier caso, ¡era monumental!
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¡Qué egocéntricos somos los mortales! Yo pensaba todo el tiempo en lo asquerosa que es la vida después de la muerte. Pero la vida antes de la muerte era casi igual de complicada para los que habían quedado.
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Parece ser que la muerte también puede revitalizar a las personas.
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En la vida de después de la muerte te das cuenta de lo que es importante en la vida de antes de la muerte.
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Cualquier lugar es mejor que una cárcel.
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¿Cuántas novelas hay en la serie Harry Potter?