Escuela de mujeres/Las preciosas ridículas

El dinero es la clave de todos los grandes impulsos, ese grato metal que trastorna tantas cabezas, en el amor como en la guerra, adelanta las conquistas

(El amor) vence los obstáculos de la Naturaleza en nosotros, y sus repentinos efectos parecen verdaderos milagros. En un momento hace de un avaro un pródigo, un valiente de un cobarde, un hombre cortés de un patán; vuelve ágil el alma más pesada y da talento a la más simple.

Solo quiere lograr la dicha de veros y de hablaros; únicamente vuestros ojos pueden impedir su ruina y ser la medicina del mal que han provocado

Os creía de vuelta a cada hora; y no oíamos pasar por delante de casa caballo, asno o mula a los que ella no tomara por vos

Soy lo bastante rico para poder, según creo, elegir una mitad que me lo deba todo y cuya sumisa y entera dependencia no puede echarme en cara ni caudal ni ascendencia

No deseo tener junto a mi a un elevado espíritu; y la mujer que escribe sabe más de lo necesario

¡Debéis de haber tenido una buena escuela! ¿Quien diantre OS ha enseñado de golpe tantas cosas? ¿No tenéis miedo ha a encontraros fantasmas?

Digan lo que quieran, el cornudismo se considera fácilmente bajo un aspecto menos horroroso, y, toda la habilidad consiste en saber tomarlo por el lado bueno

No hay por qué enrojecer ante lo peor que una mujer pueda hacernos

Aunque se goce cien veces una dicha perfecta, no está uno contento si alguien no lo sabe