Trono de Cristal es una novela de corte fantástico juvenil en donde Celaena Sardothien es la protagonista. Así pues el libro describe a una mujer hermosa, inteligente, a una asesina despiadada y temida que es la mejor del reino pese a tener tan solo dieciocho años. Sin embargo, el problema de esta al principio de este volumen, es que su libertad le fue quitada. Ella está esclavizada, aguantando toda clase de maltratos en una mina de sal del reino de Adarlan. Para fortuna de esta, un día se presenta el capitán Chaol ante ella y ahí, todo cambia. Celaena tiene un buen trato ante sus ojos. Puede participar en una competición promovida por el rey, presentarse como la patrocinada del príncipe Dorian, pelear con otros guerreros hasta que quede uno en pie y, de ser ella la ganadora, trabajar para el rey de Adarlan durante cuatro años antes de obtener su completa libertad. El trato es bueno a los ojos de una presa. Con todo, en parte, también es desagradable. Después de todo, el rey es un hombre perverso, sin escrúpulos, un conquistador que ha arrasado con muchos reinos, incluído aquel al que ella un día perteneció. de modo que, esto se planta como un problema moral en Celaena, un dolor de cabeza que en un punto del libro termina dejándolo a un lado por el solo deseo de ser libre. Para Celaena solo existe esa necesidad de libertad. Lo da todo en cada prueba para conseguir su objetivo. No obstante, en el trayecto de la historia se encuentra con muchas cosas que no planeaba encontrar. En primer lugar, la amistad de una princesa fuerte y valiente que ama a su pueblo, una relación especial con el príncipe Dorian y el capitán Chaol y, por último, los extraños asesinatos de sus contendientes, que solo marcan el inicio de muchas interrogantes sin respuestas. Dicho esto, dejo por sentado que Trono de Cristal tiene una buena idea de trama. Todo el asunto del Wyrd, su relación con otros mundos y lo que sucede al final con Celaena es intrigante, pero en lo que respecta a los personajes, la forma en que se dan los acontecimientos y el final del volumen, le restan puntos a la obra. Y con esto me refiero que aunque Celaena me encanta por su fuerza y habilidades como asesina, siento que no evolucionó y no mostró el poder de una protagonista. Sus relaciones con Chaol y Dorian aunque tiernas, no fueron lo máximo. Todo fue muy lento. Incluso las escenas de acción carecieron de ese toque llamativo y hasta adictivo que se supone deben tener. En resumen, a grandes rasgos, esto es lo que para mi trata Trono de cristal: Un trato con el diablo en busca de un bocado de libertad, una amistad sincera y perfecta, un trío amoroso que se dirige a ningún lado. No estoy tan contenta con este libro. Después de leer otros escritos de Sarah J. Maas, siento que este me quedó a deber. No obstante, teniendo fe en que puede mejorar la trama, seguiré leyendo. + Leer más |