La caricia del infierno

Después de ese final que me dejó con la boca abierta en el primer libro, tenía muchas ganas de seguir leyendo La caricia del infierno. Resueltas algunas dudas sobre sí misma y sobre lo que estaba pasando, Layla ahora pasa por un mal momento, pero todo vuelve a cambiar, porque la situación/problema que tenían antes, ni de lejos ha termiando. Hay mucho más y todos han de ponerse las pilas para investigar qué está pasando y porque ocurren tantas cosas extrañas a su alrededor.

En esta segunda parte, Layla se enfrenta a cosas nuevas y no me refiero solo a demonios que la persigan, sino que la situación en casa y con la que se supone que es su familia, cambia a mal. Abbot, el hombre que la criado durante casi tdo su vida, no se fía de ella y la trata con desprecio y confianza. No solo él, sino también otro miembro del clan de los Guardianes de Washington. Esto hace que Layla pase por un mal momento, ya que esos sentiemiento que siempre ha tenido de no pertenecer a ningún lugar se acentúan con el trato que está recibiendo. Además, por razones que no diré, algo le está pasando a los poderes-habilidades que tenía y esto hace que todo aún sea más confuso que antes. El único que duda de ella nunca por supuesto es Zayne, su mejor amigo y que ha sido como un hermano para ella. Aunque me sigue sin convencer mucho su personaje, he de reconocer que él demuestra en todo momento que quiere lo mejor para ella y nunca ha dejado de confiar en ella.

La trama del libro sigue estando muy bien conectada. La autora nos sigue dando a conocer cosas y lugares nuevos en este mundo de humanos, Guardianes, ángeles y demonios. Por tanto, mientras lees poco a poco vas intentando adivinar qué es lo que está sucediendo y porqué. No es complicada de seguir, al final, los libros de J.L.Armentrout no son los mejores libros del mundo, pero tiene una pluma tan ligera, cercana y juvenil que hace que te enganches rápidamente, todo eso lo combina muy bien con los diálogos, llenos de humor y comentarios sarcásticos e irónicos entre los personajes, que haces que rías mucho. Me parece que están muy bien llevados y los introduce con naturalidad.
Además de todo estos, suele crear personajes que están bien diferenciados y a los cuales puedes coger cariño o no, ya sea por sus actos o por su personalidad. Por ejemplo, como os he dicho antes, Abbot, es un personaje que odio y eso lo ha sabido plasmar muy bien en la historia. Pero también esta Zayne, el cual es un cachito de pan pero además es un guerrero que puede llegar a ser letal y muy amenazador; Danika, un personaje que no sale mucho pero se hace querer por su comprensión y confianza que transmite. Y como no Stacey y Sam, los mejores amigos de Layla, tan diferente uno de otro pero tan divertidos a su manera que es imposible no quererlos y pasar un buen rato leyéndolos. Como he dicho, es una historia sencilla, fácil y rápida de leer, lo que no quiere decir que no se disfrute y que te lleves unas cuantas sorpresas.

Otra tema que quiero destacar es el romance ya que en este libro nuestra protagonista, sufre y también se lo pasa bomba, todo hay que decirlo, en ese triángulo amoroso en el que se ha metido. Los sentimientos la agobian y se siente confusa y perdida, aunque se deja llevar por sus sentimientos. No voy a decir mucho para evitar spoilers como una casa, pero tengo que decir que está bien llevado y no se hace pesado, pero el fallo que le veo yo es que sabes muy bien de quién esta enamorada de verdad y a quién elegirá. Esto es predecible pero no me ha quitado el disfrute del romance.

Y por último quiero hablaros del final... Ese final sí que me ha dejado en shock. No me lo esperaba y he sufrido muchísimo con él. Sin duda me ha dejado con una ganas tremendas de leer el tercer último libro de la saga porque necesito saber qué pasará ahora con ciertos personajes. Sin duda, la autora sabe dejarnos con las ganas al final de un libro.

En resumen, ha sido una continuación muy buena. Sigue manteniéndonos en vilo con la trama sin llegar a saber lo más importante hasta el mismísmo final. Un triángulo amoroso bien llevado, sin ser demasiado empalagoso, aunque predecible. Todo esto con toques de humor y personajes que se hacen querer. Un 4.

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Después de un paro cardiaco con el final del libro anterior, vemos como Layla intenta continuar con su vida lo mejor que puede, lo que claramente no es fácil. Parece que todo se empieza arreglar, sin embargo, empiezan a suceder cosas extrañas, haciendo que la complicada vida de Layla se complique todavía más.

“La caricia del inferno”, para mi, supero todas mis expectativas y me mantuvo enganchada al cien. en este segundo libro vemos mucha más acción desde el primer momento y te atrapa por los giros argumentales y sorpresas que te va dando a lo largo de la historia. Debo decir que hubo momentos donde me desespere con la extraña relación de Zayne con Layla, pero dejando de lado eso. esta segunda entrega me encantó.

En especial, Roth. Ese demonio me tiene mal (en el buen sentido) amo cada parte de él y me encanta como se desarrolla este personaje en el libro.

En pocas palabras, “La caricia del infierno” me ha encantado por como se desarrollo, por todas las sorpresas que tuvimos llenas de acción y sobre todo con la dosis de romance que nos dieron . No se hace para nada pesado, te engancha tanto que lo lees en una sentada. Su final te deja con la necesidad de ir por el tercer libro y leerlo para descubrir como terminará la historia y como se resolverá el monumental problema que tienen nuestros amados protagonistas.
Simplemente, fascinante.

Me ha decepcionado un poco. La historia sigue gustandome, pero este 2º libro esta escrito exclusivamente para que adores al personaje de Zayne. No cuenta nada importante para la historia, no la desarroya, no pasa nada importante en la mayor parte del libro. Siento que ha sido un libro practicamente inutil encuanto a avance de la trama

A pesar de saber cómo iba a terminar el primer libro, me dolió el corazón, pero tenía mis esperanzas de que Roth volviera, porque seamos sinceros, ¿cómo nos va a dejar Jennifer sin Roth? Así que no tardé nada en ponerme con él. Ya desde la primera página intentaba ver algún indicio, alguna señal de que ya había vuelto.

Había leído en otras reseñas que habían echado de menos a Roth, y pensé pues por lo menos hasta la mitad del libro no va a aparecer, pero spoiler, aparece bastante antes, así que tenemos Roth hasta cansarnos (cosa que no creo que pase nunca).

La trama es bastante predecible, en lo que va siendo la parte de en medio, ya que al principio no sabes qué va a pasar y al final no sabes cómo se va a resolver. Jennifer lo ha vuelto a hacer, y además de contar la historia, va un paso más allá y juega con el miedo a lo desconocido y a los prejuicios de los que hablaba en el libro anterior.

Seguimos en la narración de primera persona, con Layla de protagonista y capítulos muy rápidos.

Tenemos a una Layla más fuerte, más independiente, pero no la dejan que se suelte, sigue sin confiar en ella ni en sus poderes llenándose de culpa además de la que recibe del exterior.

Zayne tiene más protagonismo que en el anterior, pero seguimos sin conocerle del todo. Es fiel a Layla incluso más que a su clan, pero es demasiado sobreprotector, no deja que Layla se defienda ni en el ámbito de una pelea (que puedo llegar a entenderlo porque él está más entrenado) ni en una conversación. A veces me ponía de los nervios y había ciertas escenas en las que se veía una nueva faceta de él que no conocíamos, que no es mala, pero no puedo más porque sí que sería spoiler. No dudo de su amor por Layla, pero no termina de gustarme ni su relación con ella ni él.

He dejado al mejor para el final, Roth. Está más distante y más serio, pero desde el principio, aunque la trata mal se sabe que es por algún motivo, porque ya en el anterior sabíamos que nunca le haría daño y que está enamorado de ella y se ve en muchos detalles, en cosa que le dice y cosas que pasan, así que sigo en el equipo de Roth. Además, la única vez que la trata mal es en una escena (y tiene su explicación), el resto siempre intenta cuidarla, pero no sobreprotegiéndola, sino confiando en ella y dando más responsabilidad para que sea más independiente y ayudarle a pensar que todas las cosas que le han inculcado desde pequeña, no son todas reales.

El final no me lo esperaba, tenía mis dudas, pero de esto que dices veras tú que al final tal, pero no lo dices porque estés segura, sino porque tienes ligeras sospechas. Cómo en el primer libro tenemos el último capítulo narrado por otra persona, pero a diferencia del otro, este no te deja ver nada que ya no sepas o intuyas. Espero que en el tercero se aclaren las cosas y tengamos el final que esperamos.
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Al igual que os comente que el primero al principio se me había hecho un poco extenso, este ha sido totalmente lo contrario y más la última parte del libro, ayer termine de leerlo casi a las tres de la mañana...Con eso digo todo.

En este libro todo toma muchísima mas importancia, ahora Layla se encuentra en un estado en el que no sabe muy bien como llevar su vida después de todos los acontecimientos que han pasado, ahora tiene mucha más información de ella misma que antes desconocía y está abrumada, y a parte preocupada, pero todo cambia cuando de nuevo cuando aparece Roth después de semanas sin dar señales de vida, después del último enfrentamiento. Roth vuelve, pero vuelve cambiado y con información y eso hace que Layla se desmorone por completo, pero Zayne vuelve con mucho más protagonismo que en el anterior libro, y tras todas las escenas de acción y sentimientos, este libro se vuelve una auténtica bomba de sorpresas.

He disfrutado leyendo este libro lo que no está escrito y aunque bien es cierto que tiene los tópicos de toda novela juvenil, creo que aún así lo podría salvar ya que creo que las relaciones están escritas de una manera tan emotiva que quieras o no quedas prendada. Es un libro con chicha, que esta muy bien escrito, que no se deja nada en el tintero y que las relaciones se desarrollan muy profundamente, yo ahora mismo tendría un gran dilema y es que vivo enamorada de nuestros protagonistas m a s c u l i n o s , y es que si con el primero lo tenía claro, matarme, pero creo que acabaría actuando como Layla.
Layla sin en cambio me ha hecho crisparme los nervios en varias ocasiones, su carácter a veces me ha chirriado, y me gustaría (quizá el único pero que le puedo poner al libro) encontrarme con una persona más ''fuerte'' , la veo muy frágil pese a todo lo madura que pueda parecer.
También los personajes secundarios que en el otro libro no aportaban nada, en este cambia por completo todo, y tienen mucha importancia, salen muchísimo más y ha sido una cosa que también he disfrutado.
Las escenas de acción me han gustado mucho, y mientras lees tienes ahí la tensión presente, y ha hecho que las disfrutara como si estuviera viendo una serie de televisión.
Sin duda la trama de este libro se ha intensificado a un nivel indiscutible, y con ese PEDAZO DE FINAL que me ha dejado loca, así como os lo digo, LOCA, ahora mismo estoy muy triste de no poder ponerme con el tercero que por cierto si sabéis cuando va a salir dejármelo en los comentarios.

La pluma de la autora para mi maravillosa, ya lo sabéis que es de mis autoras favoritas, me encanta la chispa que aporta en las frases que te hacen sacarte sonrisas, y como no, todo lo que su cabeza puede llegar a imaginar, que plasma genial en los libros. Sin duda y siempre lo digo que me asombra mucho esta mujer, ya no se que más puede escribir ni que seres nuevos nos aportará en un futuro.

Sin duda ahora si que no tengo duda alguna de recomendaros la saga, me ha encantado este libro.

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The Dark Elements I : El beso del infierno
Autora : Jennifer L. Armentrout
387 pág.
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The Dark Elements II: La caricia del infierno
Autora : Jennifer L. Armentrout
472 pág.
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The Dark Elements III: El suspiro del infierno
Autora : Jennifer L. Armentrout
376 pág.
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No voy a haceros una reseña por cada libro de la trilogía que he leído, ya que tengo tantos por reseñar que de estos haré solo un post. Los tres son sumamente adictivos y les puse una valoración de 5 estrellas. No sé ni por dónde empezar para transmitiros esta maravilla. Todavía no he podido olvidar a ninguno de los protas, porque se han gravado a fuego en mi corazón.

Como estáis viendo no habrá sinopsis esta vez. Yo empezé a leer el primer libro por una recomendación, sin saber NADA de la trama y sin expectativas. Así que supongo que lo bonito es ir a ciegas. Ya que Jennifer ya se encarga de guiarte entre sus páginas. Disfrutad de los libros si finalmente os decidís a leerlos.

La historia que describe la autora está bien hilada de principio a final. No es nada precipitado y en cada capítulo suceden cosas.
Me la leí en menos de 5 días. Y se ha convertido en una de mis sagas preferidas.
Pronto leeré LUX, ya os lo digo TODO.

Durante la lectura he ido comentándolo con algunas chicas que se han leído los libros y hay dos grupos; las que somos de Roth y las que preferimos a Zayne, los protas masculinos del libro ¿De cuál eres tú?

«Me perdí por completo en el momento en que te encontré.»

WOW. Cuidado con el triángulo amoroso porque puede provocar infartos 😂😂
Me ha encantado esta continuación; es un libro considerable en cuanto a número de páginas, pero se lee en un suspiro!! Me han encantado ciertos giros en los acontecimientos y la evolución de los distintos personajes, además de que tiene un final que no he visto venir por ningún sitio 😂 me pongo con el tercero ya mismo!!

Volvemos con nuestra protagonista Layla, aunque no puedo desvelar demasiado de la trama para no hacer spoiler del libro anterior, que se encuentra atrapada dentro de ambos mundos, entre el cielo y el infierno, guardianes y demonios. En esta continuación tenemos una evolución considerable en la relación de los personajes principales, además de un estancamiento, pues se hace visible el triángulo amoroso que forman Layla, Roth y Zayne.

Por un lado tenemos un estancamiento por parte de Roth y Layla, pues los sucesos después del final del primer libro complican su relación hasta el punto de mantenerlos alejados la mayor parte del tiempo. A su vez, el personaje de Zayne, con el que no me llevaba demasiado bien al principio, es el que más va transformando su personalidad de hermano sobreprotector y se va mostrando más egoísta. Es ese egoísmo el que me permitió conectar con él, volviéndolo más humano y dándole un tinte más interesante a esta parte de la historia. En cuanto a los Guardianes, el recelo que tenía hacia ellos en el primer libro se incrementó hasta alcanzar el desprecio. Cada vez me disgustaban más los momentos que Layla tenía que pasar en casa o sus encuentros con Abbot, y, con el final de la historia, no podría ser capaz de arreglar mi relación con ellos.

En este libro aprecié más la situación que mantenía la protagonista con Zayne, así que espero que en la última parte pueda ver más de Roth, su personalidad y sus secretos. El final, por su parte, no me dejó indiferente, pues no me esperaba esa resolución. En general, la historia no tiene en sí demasiada complicación, al igual que la forma de escribir de la autora, lo que convierte la historia en un libro sencillo, ágil y atrapante. Es inevitable terminar de leer una vez que empiezas, pues siempre necesitas saber que va a ocurrir con los personajes y, sobre todo, con las relaciones personales de estos.


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La caricia del infierno comienza dos semanas después de lo sucedido en el final de El Beso del Infierno. Layla intenta recuperarse después de lo ocurrido, mientras que Zayne siempre estará a su lado para ayudarla y apoyarla, aunque no pueden estar tan cerca el uno del otro como le gustaría.

Layla empezará a desarrollar más sus poderes en esta segunda parte, y los guardianes, que siempre han estado ahí para protegerla, se empiezan a comportar de forma diferente y más distante con ella, y también guardan varios secretos.

Mientras que intentan averiguar porqué han estado apareciendo tantos asesinatos extraños, todo cambia cuando Roth aparece con unas noticias que podrían cambiar el mundo de Layla para siempre.

Esta segunda parte también me ha gustado mucho, sí que es verdad que un poquito menos que el anterior, pero aun así sigo disfrutando muchísimo de esta trilogía.

En la Caricia del infierno nos encontramos a una Layla más desconfiada con los demás y también consigo misma, sigue siendo la chica fuerte y luchadora del primer libro, y vemos una evolución en ella durante el libro, aunque todavía queda por ver todo lo que puede dar de ella, estoy segura. Me sigue gustando mucho el personaje aunque sus indecisiones y formas de actuar en algunas ocasiones me ponían nerviosa.

Zayne, por otro lado, coge más protagonismo en este libro, sigue estando al lado de Layla, apoyándola en todo y confiando en ella más que en cualquier otra persona. La verdad es que no sé qué pensar de él, porque durante el libro no me gustaba nada su forma de actuar a la hora de hablar de Roth con Layla, aunque al final sí que me ha acabado gustando, pero es que me ha parecido muy pesado en varias ocasiones.

Y por último tenemos a Roth, que aquí coge menos protagonismo y lo vemos mucho menos, y puede que sea por eso por lo que este libro me ha gustado un poco menos que el anterior, ya que este personaje es mi favorito de todo el libro. ¿Qué decir de él? Sigue en su línea y me encanta, sigue dándole el punto divertido al libro, y yo solo quiero que él y Layla terminen juntos porque Roth se merece todo lo mejor del mundo.

La historia me ha gustado mucho cómo se ha desarrollado, y ha habido varios giros que no me esperaba y que me han gustado mucho, aunque sí ha habido una cosa que ha sido predecible pero aun así no he podido evitar sorprenderme.

El final ha sido espectacular, no sé cómo lo hace Jennifer para terminar sus libros de esa manera que quieres coger el siguiente ya porque no aguantas más la espera de seguir.

En definitiva, La Caricia del Infierno sigue siendo un gran libro, tanto como el anterior, con unos personajes con una gran evolución y una historia muy interesante que prácticamente se lee sola.

La caricia del infierno comienza justo dos semanas después lo ocurrido en el libro anterior. Tenemos a una Layla que está todavía más unida a Zayne (si cabe) tras los tristes acontecimientos del libro pasado. Pero no tendremos mucho tiempo para superar ese dolor, pues cosas nada buenas se están cociendo en el mundo terrestre y nuestros protagonistas tendrán que hacer frente a la amenaza que más temían.
He de decir que este libro no me ha gustado ni más ni menos que al anterior, básicamente sigue la misma línea y eso me gusta mucho. Agradezco que en esta parte Zayne tome más protagonismo, porque por fin podemos conocerlo bien. Ya sabéis que a mí él al principio no me hizo demasiada gracia, pero os comenté que en realidad tampoco sabíamos mucho de él, al menos, no de primera mano. Esta vez contaremos con muchos momentos protagonizados por él, sabremos qué siente, por qué actúa de una manera u otra y qué piensa sobre Layla. ¿Piensa, como muchos guardianes, que ella es inferior y no está a su nivel o realmente la valora y no la teme? Todo eso lo sabremos. de él la verdad es que sigue sin gustarme demasiado que sea tan sobreprotector, porque lo entiendo hasta un punto. Siento que quiere proteger tanto a Layla que busca encerrarla en una jaula de cristal donde nadie pueda hacerle daño y eso al final es no dejarla vivir. Por otro lado, sí me gusta cómo la cuida y también cómo intenta entender su dolor respecto a nuestro demonio favorito.
Efectivamente, con esto me refiero a Roth, que sigue siendo mi personaje preferido. Sí, reconozco que en este libro me desespera mucho, porque de verdad, no tiene sentido su actitud a veces, me parecía bastante ilógica, porque trataba a Layla como al agua sucia pero luego la buscaba y la cuidaba. Así que sí, me daban ganas de darle un buen empujón. Pero sinceramente, con sus comentarios sarcásticos, sus detalles y su aura que envuelve todo, porque es aparecer él y cambia el ambiente, que ha conseguido seguir encantándome, a pesar de sus idas de olla, pues consigue enamorar (como la razón por la que lleva a Layla al club, me pareció muy bonito el motivo y dice mucho de él).
Layla, por su parte, me parece que ha evolucionado pero que todavía puede darnos más de sí. Creo que hasta que no se acepte completamente y deje de tener miedo de sí misma y de avergonzarse de lo que los demás piensan, no podrá tomar las decisiones que necesita ni tampoco conocerse a sí misma. Creo que es una chica que tiene potencial, el problema es que todavía no sabe cómo usarlo.
No puedo dejar de mencionar a Bambi, que en este libro toma algo más de protagonismo al estar ahora en el cuerpo de Layla. Esta serpiente es lo más, de verdad, me hacen mucha gracia las cosas que hace y también es una excelente protección contra los malos.
Ya os digo que en esta lectura la autora sigue manteniendo ese ritmo acelerado, quizás un poco menos que en el libro anterior, también porque creo que este se centra un poco más en la relación de Layla con ambos chicos, con los Guardianes, consigo misma y también con el tema del Lilin, que es una cosa que nos tiene en un sinvivir, además del cambio en los poderes de Layla. Jennifer L. Armentrout sabe llevarnos a su terreno, poco a poco nos va metiendo la duda en el cuerpo y nos hace desconfiar sobre un punto en concreto que es vital para el desenlace del libro.
También tengo que deciros que si no sois muy amantes de los triángulos amorosos, igual este libro os carga un poco, porque es cierto que se centra bastante en lo que Layla siente por Zayne, pero también en lo referente a Roth. Digamos que profundizamos en como es su relación con cada uno. A mí personalmente me gustan los triángulos amorosos siempre y cuando estén bien llevados y este lo está porque en realidad es la barrera entre lo que Layla conoce, lo que siempre ha sido y le es familiar, su "hogar", y lo nuevo para ella, lo que realmente es y saca todo de ella y la libera de esa baja autoestima que ha tenido siempre. Así que creo que entiendo por qué tiene sentimientos por los dos chicos y también el desarrollo de los mismos.

Hay un tema que me gustaría mencionar y que se materializa sobre todo en Danika, que es lo que sufren las mujeres guardianas, pues al ser pocas, son tratadas como seres que solo sirven para parir y no luchan, apenas salen de casa, etc. A pesar de que también están entrenadas, como los hombres. Me gusta mucho Danika, porque aunque Layla le tenga celos, no es rencorosa, es una luchadora nata, se preocupa por los demás, es simpática y quiere cambiar las cosas. Me gusta que se refleje ese problema de mentalidad anticuada y sobreprotectora y que haya un personaje excelente para luchar contra ello. También esto lo vemos un poco, como he dicho antes, en Zayne, que busca que Layla se quede siempre a su lado o en sitios completamente seguros, sin dejarla hacer nada, mientras que Roth la lleva siempre consigo por muy peligroso que resulte porque la trata como a un igual, no como algo a lo que proteger y admirar. No quiero decir que no la proteja, que lo hace, pero la deja ser ella, luchar y participar en los acontecimientos importantes, aunque suponga un riesgo.

Lo que menos me gustó del libro fue el motivo sobre el que se fundamenta la actitud de Roth. También me cansa un poco la perfección de los personajes, en serio, si atendemos a los adjetivos con los que describe a los protas masculinos, son los mismos, no tienen diferencia. Interpreto que Zayne está más "cuadrado" porque Roth lo llama Rocoso, con doble sentido con lo de ser gárgola, pero si vemos las descripciones de la autora, se basan en "abdominales", "sexy", "fuerte", etc. Que no pasa nada por tener un poco de chicha, o una mancha de nacimiento que no te gusta, o algo que los vuelva un poco más reales. Se puede justificar en que son un príncipe demonio y un guardián celestial, así que supongo que están cerca de ser perfectos, pero aunque sea justificable, me sigue cansando.
Ya para terminar, del final he de decir que me dejó con la boca abierta. Esta vez no me lo vi venir, no esperaba para nada que todo acabara así, con esa frase, pues yo pensaba que la historia iba a ir por otros derroteros pero no.
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