El reloj de sol

Todos ustedes quieren que el mundo entero cambie para que ustedes sean distintos. Pero yo no creo que la gente cambie solo porque haya un nuevo mundo.

La gente no está hecha para mirar hacia dentro. Por eso tenemos cuerpo, para ocultar el alma.

Es abominable necesitar algo con tanta desesperación que no te imaginas la vida sin ello. Es una contradicción a la condición humana.

El reloj de sol no marcaba las horas por las noches.

¿Cuándo habremos de vivir si no es ahora?

—¿Te casaste conmigo por el dinero de mi padre?
—Bueno, por eso y por la casa.

La visión del propio corazón es degradante; la gente no está hecha para mirar hacia dentro. Por eso tenemos cuerpo, para ocultar el alma.

Un lugar apacible, alejado de la mano del tiempo y el progreso.

El terreno de los Halloran se distinguía del resto del mundo por un muro de piedra que rodeaba por completo la propiedad, de modo que todo lo que estaba dentro del mundo era de los Halloran, y lo que quedaba fuera no.