Ojo de gato

Me llamó la atención la nota de la autora ya que en un principio nos cuenta la investigación que realizó sobre que el sonido de los patos no emite eco. Esto me resultó curioso porque hasta ese instante ni siquiera me había planteado esa cuestión. Yo vivo en Santander y tenemos el parque de Las Llamas donde hay patos y ahora cuando llevo a mi hijo recuerdo este dato. Pero me estoy yendo por las ramas, os cuento que me ha gustado mucho la novela, Gemma Herrero Virto me ha vuelto a sorprender con este thriller de suspense. Bien, conozcamos a nuestra protagonista Laura Ugalde, quien no está pasando por su mejor momento. Laura es profesora y está a punto de irse de vacaciones pero tiene que terminar su trabajo pero sus circunstancias personales se lo están poniendo difícil por lo que adelanta con el consentimiento del rector sus vacaciones. Un día mientras va dando un paseo por la calle se encuentra con su vieja amiga Marta, hace muchos años que no se ven así que deciden tomarse un café para ponerse al día. Marta le comenta que está trabajando para la Ertzaintza en la identificación de un cadáver y como Laura es catedrática en antropología igual la puede ayudar. le cuenta que en las obras que se llevan a cabo en un pequeño pueblo de Erkiaga fue donde lo encontraron pero que Zubeldia el dueño del terreno está presionando para que cierren el caso cuanto antes porque pierde dinero y además por lo que insinúa Marta está llamando a ciertos amigos suyos políticos para que metan prisa. A Laura no le apetece nada meterse en ese compromiso pero Marta es muy persuasiva y al final la convence. Para ponerse manos a la obra decide ir al lugar donde encontraron el cuerpo. El sitio no es fácil de encontrar, de hecho en un primer lugar se pierde, dando a parar a una vieja casa cerrada que pone que se vende. El sitio es maravilloso, tranquilo y hace que Laura se interese por él. Llama al número para solicitar información, la atiende una mujer muy amable, Laura le indica que se ha perdido y ha descubierto la casa y que por el momento no está interesada en comprarla pero que igual si le interesa alquilarla, ya que ha descubierto que ese lugar la hace olvidarse de todo lo ocurrido en su vida últimamente y se siente a gusto, la mujer le indica que tiene que llamar otro día ya que ella no es la que lleva los temas relacionados con la casa, es su marido Luis quien lleva las gestiones de la casa porque perteneció a su tío y amablemente le indica a Laura como llegar al pueblo. al llegar le sorprende todo lo que ve a su paso, el pueblo está desierto, es como si no viviese nadie, así que continúa su camino y llega a las obras las cuales están paradas y no hay nadie. Así que ni corta ni perezosa se dirige al lugar donde encontraron el cuerpo ya que aún está precintado. Empieza a recoger tierra del lugar para que esta la ayude en su trabajo y de repente siente cierta sensación que no puede explicar, esto hace que se meta en el agujero, de rodillas y con las manos sobre el suelo empieza como a buscar algo, pero sin saber bien porqué lo hace. En su mano encuentra tras rebuscar en la tierra un colgante lleno de suciedad, una voz la saca de su trance y ella se da cuenta de que es el guardia de seguridad que no la está mirando con buenos ojos, como puede se guarda el collar en el bolsillo del pantalón y acompañada por el guardia al que no le hace mucha gracia que Laura se haya colado mientras él estaba en el pueblo comprando su comida y sin miramientos la saca de las obras. Laura se monta en su coche y se marcha todo aquello le está resultando interesante además le está haciendo salir del mal estado en el que se encontraba. El error que comete Laura es que cuando habla con Marta y le comenta que ha estado en las obras no le da el colgante, es más, lo lleva a limpiar y a reparar ya que el cierre está roto, en la joyería le indican que no tiene ningún valor la piedra que lleva. al salir y dirigirse a su casa, la cual se le cae encima cada vez que entra, pasa por una tienda de esoterismo, en el escaparate hay diferentes piedras y esto hace que Laura entre a preguntar por la que tiene ella. Cuenta que se lo han regalado y no sabe que piedra es y si irá con su personalidad, la dependienta le indica que la piedra se llama “ojo de gato” y que sirve para estimular la capacidad de razonamiento y de creatividad también aporta seguridad, valentía y confianza así como una claridad mental y que sirve para aumentar la conexión con el mundo de los espíritus y poder comunicarse con ellos, tras esto que deja a Laura un poco sorprendida sale de la tienda. Marta habla con Laura y le indica que van a cerrar el caso, con las pruebas que tienen no puede hacer más, así que Laura que ya está metida en toda la investigación sobre el cuerpo decide hablar con los jefes de Marta y se ofrece para hacer una reconstrucción facial, la idea es aceptada y le dejan el cráneo para que realice el trabajo. Como en su casa de Bilbao no se consigue concentrar decide llamar al número de la casa cerca del pueblo para ver si se lo alquilan, la suerte le sonríe y tras realizar el papeleo necesario se muda allí. al primero que conoce es a Ander un chico un poco raro y que no tiene muy buena reputación entre los pocos habitantes del pueblo, después cuando necesita llenar la nevera acude al pueblo y encuentra, gracias a una anciana que la mira con reparo, el bar que es a su vez un colmado, la dueña es muy amable y ya se ha corrido la voz de que alguien vive en la casa de las afueras, ella es la cuñada de Ander y le advierte de que no es bueno que ande con el joven. Pero dentro del local están aparte de unos viejitos jugando una partida de cartas se encuentran dos hombre que no van acorde con el sitio, para su sorpresa cuando se abre la puerta aparece el guardia de seguridad que la hecho de la obra, así que muerta de vergüenza y lo más rápido que puede paga lo que ha comprado y se encamina a su coche, pero una voz a su espalda la mandó pararse es el dueño del terreno donde se encontró el cadáver, pero las obras ya se han reanudado, así que Laura no entiende porque la interroga de esa forma por el motivo de que este en el pueblo. Sin más Laura vuelve a su nueva casa para pasar la primera noche la cual es movidita. Por lo visto y sin saberlo ahora es sonámbula. Laura está con la mosca detrás de la oreja, así que habla con Marta y se lo cuenta todo. Ella le dice que cuando llevaba el caso también tenía sueños raros. Pero la cosa no queda aquí, un día al llegar a casa han prendido fuego al cobertizo, por suerte entre ella y Ander consiguen apagar el fuego y cuando llegan los bomberos, terminan lo poco que queda. Para complicar más las cosas, comienzan a aparecer muertos varios vecinos, la gente no mira con buenos ojos a Laura porque todas las cosas extrañas han empezado cuando llegó ella. Laura decide centrarse de lleno en terminar el trabajo que tiene que hacer para que al menos pueda presentar resultados que ayuden en la identificación de la chica. Pero no es tarea fácil, ya que el trabajo que realiza por el día por la noche lo destruye sonámbula. Desesperada por la situación, hará una cosa que jamás se habría planteado en otra situación, volver a la tienda de esoterismo a pedir consejo, ayuda, algo que termine con aquello. Los consejos que le dan no le hacen mucha gracia, pero en el punto en el que se encuentra, solo quiere terminar el trabajo y con todas las cosas raras que le están pasando. Cuando Laura regresa a casa y sube a la guardilla para intentar hacer lo que le han dicho, nota que una de las tablas del suelo está suelta. Y como es más curiosa que su gato Rahu, decide investigar y encuentra el diario de Luis de cuando pasaba los veranos allí. Así que aunque por un instante duda, se le pasa rápido y comienza su lectura. Lo que descubrirá a partir de aquí y con los consejos que le dieron en la tienda, viviremos un final fuera de serie, donde te quedarás con la boca abierta. Vamos, una lectura que recomiendo sin dudarlo.

Ojo de gato tiene todos los ingredientes de un buen thriller, misterios pasados y presentes, suspenso, muertes, una investigacion criminal y en el centro de todo eso un personaje que debe resurgir de sus cenizas, todo eso aderezado con situaciones paranormales y brujería. Tiene un ritmo trepidante, absorbente...
Dos cosas según mi criterio podrían mejorarse, una: fue bastante predecible el final, ni hubo giros insospechados, creo que el mayor defecto es que la autora no quiso jugarnosla y nos dió todas las pistas demaciado evidentes... Vaya perdió fuelle.
El otro punto, es que lo verdaderamente diferente en esta novela, era la mezcla de thriller y esoterismo y eso podía explotarse más, me gustó esa faceta y me hubiera gustado que tuviera más protagonismo.
Laura es una mujer atormentada, con conflictos no tan conflictivos, con una construcción un poquitín forzada, no iría yo con un desconocido a ningún sitio, ni me quedara en una casa casi abandonada y solitaria, ni me adentrara en un busque... En fin es evidente que no tengo la valentía de Laura y de solo pensarlo se me ponen los pelos de punta.
No es una historia de terror/horror, pero a mí muchos pasajes me impresionaron mucho, al punto de no conciliar el sueño fácilmente luego de pasar por ellos.
Creo que en general es una buena lectura, muy adictiva.