La chica de nieve

Como si yo fuera la niña de tres años, que no sabía que las sonrisas también tienen colmillos.

La noté mal, supongo que era este día, que toca demasiados sentimientos y abre todas las heridas.

La desgracia siempre busca a quienes pueden asumirla

Es difícil pedir ayuda y mucho más admitir necesitarla.

La alegría te hace creer que estás acompañado, la tristeza; en cambio, que siempre estuviste solo.

Pensar en ella y en todo lo perdido, en todo lo que podría haber sido y nunca fue, en cada..., en cada sonrisa que perdimos.

Quizá aún haya alguien ahí fuera que no quiera saber que hasta en la más bella de las rosas crecen las espinas sin temer.

Hasta en lo más profundo de los pozos más oscuros se puede escarbar un poco más.

La desgracia siempre busca a quienes pueden asumirla. La venganza, en cambio, a quienes no.

Y aquellas gotas, quizá, siempre tuvieron aspecto de lágrimas