Segunda parte de la bilogía del autor cántabro, Abel Arnaiz, con un género difícil de definir entre ficción histórica y thriller. En este libro, viajamos en el tiempo para caer de lleno en el s.XI. Guerras, amores, asesinatos, conspiraciones, secretos. Y un libro. Un libro cuyo contenido no puede revelarse el alta voz y debe ser escondido durante siglos. Las hazañas, engaños y devaneos del Rey Poeta, al-Mutamid, van siendo desgranados con gran maestría ayudándose de un lenguaje pulcro y cuidado con adaptación del vocabulario a la época y a la zona y demostrando, como en el primer libro de la bilogía, una gran base de documentación previa. Narrador predominantemente omnisciente con una conciencia muy cercana a la historia y pensamientos de los personajes. Muy buena caracterización de estos personajes, tanto física como psíquicamente, gracias a las descripciones y representación de las formas de ser mediantes acciones y diálogos. Los personajes fluyen e interaccionan muy bien entre sí, sin encontrar incoherencias entre ellos ni con el ambiente que les rodea. La ambientación hace que nos podamos transportar a las calles de Isbiliya, principalmente, sin mucho esfuerzo. El autor ha conseguido traernos el aroma de sus plazas, jardines y alcázares y, además, podemos apreciar el esfuerzo por envolvernos en la época con el uso de arabismos andalusíes que por desgracia, la mayoría se encuentra en desuso. Considero que esta obra es una joya por la cantidad de datos históricos aportados, de personajes importantes que forjaron nuestra historia, el lenguaje tan cuidado y las descripciones tan precisas que han conseguido que todos los lectores hayamos sido andalusíes en la Isbiliya de Muhammad bin Abbad Al-Mutamid, el Rey Poeta. + Leer más |