Tigres de cristal de Toni Hill
Hay olas que pueden destrozar vidas enteras, resquebrajar la roca de un solo golpe de mar.
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Tigres de cristal de Toni Hill
Hay olas que pueden destrozar vidas enteras, resquebrajar la roca de un solo golpe de mar.
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Tigres de cristal de Toni Hill
Ahora sabe que los auténticos monstruos salen a la luz del día y pertenecen al mundo real, que no tienen aspecto terrorífico y que es imposible protegerse contra ellos; que están tan cerca que a veces una los tiene delante sin ser capaz de reconocerlos.
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Tigres de cristal de Toni Hill
Reclama tu sitio, no te dejes pisar. El mundo es un lobo hambriento y si no le plantas cara te va a comer. No puedes quedarte leyendo en un rincón, viendo pasar las cosas.
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Tigres de cristal de Toni Hill
La nostalgia puede ser peligrosa, una enfermedad fácil de contraer que sólo se cura con el olvido y para la que uno debe vacunarse con una dosis extra de frialdad.
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Tigres de cristal de Toni Hill
Los muertos desaparecen de verdad cuando ya no queda nadie que los recuerde.
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El verano de los juguetes muertos de Toni Hill
Nunca se mató a nadie por amor, eso es una falacia de los tangos. Sólo se mata por codicia, despecho o envidia, créeme. El amor no tiene nada que ver con eso.
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Tigres de cristal de Toni Hill
Necesita saber. Recordar los detalles de ese momento en que ambos fueron tigres ignorando que la vida se les rompería en pedazos.
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El último verdugo de Toni Hill
Hay que sobreponerse a los errores, aceptarlos como parte del oficio y esforzarse por no repetirlos.
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Tigres de cristal de Toni Hill
Cuando uno es básicamente pobre ,los que lo son aún más,provocan más miedo que compasión
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El oscuro adiós de Teresa Lanza de Toni Hill
Tú misma lo dijiste antes: las cosas son como son por alguna razón. Y tal vez por eso duelen, porque una entiende las razones y no puede evitarlas
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El oscuro adiós de Teresa Lanza de Toni Hill
fui tan ingenua de pensar que la muerte sería el final...
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El oscuro adiós de Teresa Lanza de Toni Hill
El temor de que cada instante pueda ser el último es tan adictivo como la droga más potente.
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Los ángeles de hielo de Toni Hill
Los cuerpos de los novios estaban cubiertos con el velo extraviado, tul blanco manchado de rojo sangre.
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Los ángeles de hielo de Toni Hill
Frederic pensó que su padre acababa de decir una gran verdad: el amor era, sin duda y entre otras muchas cosas, una cuestión de hábito.
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El verano de los juguetes muertos de Toni Hill
Quieren la pasta, no matarlo, ni nada de eso. Pero cuando el calvo deja de pegarle el tiempo suficiente, le ve la cara. El muy cabrón está disfrutando. Y es entonces cuando siente pánico; al ver esos ojos inyectados de satisfacción, una mano apoyada sobre el paquete como si fuera a masturbarse. Adivina lo que está pensando como si su frente fuera un cristal transparente y sus intenciones estuvieran escritas al otro lado. Clava la mirada en el bulto que se le ha formado al calvo en la entrepierna e intenta transformar el terror que siente en una mueca irónica. Cuando el otro le asesta dos nuevos puñetazos, sabe que lo ha conseguido y casi agradece el dolor. Es mejor que otras cosas. |
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Tigres de cristal de Toni Hill
No todo en el mundo es una puta cuestión de voluntad. Joder, tío, deberías saberlo ya a nuestra edad. La vida no se arregla sólo a base de esfuerzo.
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Tigres de cristal de Toni Hill
Los muertos desaparecen de verdad cuando ya no queda nadie que los recuerde.
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Tigres de cristal de Toni Hill
Menos aplaudir y más estudiar, que lo que quieren algunos es que no salgan de burros para así seguir tratándolos a palos. Aquí hoy se acabaron los palos, pero si no dejan de ser burros la vida se los dará igualmente.
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Gregorio Samsa es un ...