Tess de los d'Urberville de Thomas Hardy
-Hay un tiempo para cada cosa-continuó diciendo Izz,sin hacerle el menor caso-,un tiempo para abrazarse y un tiempo para separarse,y ahora el primero va a ser mío.
|
Tess de los d'Urberville de Thomas Hardy
-Hay un tiempo para cada cosa-continuó diciendo Izz,sin hacerle el menor caso-,un tiempo para abrazarse y un tiempo para separarse,y ahora el primero va a ser mío.
|
Lejos del mundanal ruido de Thomas Hardy
No me importaría ser la novia y celebrar una boda, si pudiera hacerlo sin tener un marido.
|
Lejos del mundanal ruido de Thomas Hardy
Era el suyo ese afecto sólido que surge (si es que llega a surgir) cuando al conocerse dos personas descubren primero los aspectos más ásperos de sus respectivos caracteres y desconocen los mejores hasta mucho después, mientras el amor va creciendo en los intersticios de una dura masa de realidad prosaica. [...] este sentimiento mixto resulta ser el único amor más fuerte que la muerte: ese amor que ni el agua puede saciar, ni las inundaciones pueden anegar; en comparación con él lo que normalmente entendemos por pasión resulta evanescente como el vapor.
|
Jude el oscuro de Thomas Hardy
«¿Tendrán la culpa las mujeres —se decía—, o la tendrá este artificial sistema de cosas bajo el que los normales impulsos del sexo se convierten en cepos domésticos y lazos que atrapan y sujetan a quienes aspiran a progresar?».
|
Jude el oscuro de Thomas Hardy
Y luego volvió a ver con dolor, como había visto cada vez más a menudo últimamente, el desprecio de la Naturaleza por los sentimientos más delicados del hombre, y su indiferencia hacia sus aspiraciones.
|
Jude el oscuro de Thomas Hardy
En cada palmo de tierra, un día u otro, se habían pasado momentos de energía, de alegría, de brutalidades, de riñas, de fatigas.
|
Jude el oscuro de Thomas Hardy
pertenecía a esa clase de hombres que nacen para el sufrimiento hasta el día en que caiga el telón sobre sus vidas inútiles, devolviéndoles definitivamente la paz. Siguió su camino de puntillas entre las lombrices, y no tuvo que matar ni una sola.
|
Los poemas del novelista de Thomas Hardy
Fue su ventana aquella en otro tiempo, y la vela cercana que brillar dentro se veía, señalaba: ¡Aquí estoy! |
Los habitantes del bosque de Thomas Hardy
Tenía el rostro quemado por el sol, del color del trigo; los ojos azules como las flores de ACIANO;
|
|
Los poemas del novelista de Thomas Hardy
De nuevo los cañones rompieron el silencio, proclamando que estaban dispuestos a vengar, y llegaron sus ecos hasta la Torre Stourton, Camelot y Stonehenge bañado por las estrellas. |
Tess de los d'Urberville de Thomas Hardy
"¿Por qué no me dijiste que se corría peligro entre los hombres? ¿Por qué no me previniste? Algunas señoras saben defenderse porque leen novelas que les hablan de estas cosas, pero yo nunca tuve ocasión de aprender de ese modo y tú no me lo enseñaste.“
|
Tess de los d'Urberville de Thomas Hardy
Cuando las palabras alegria y Mayo eran sinónimos, antes de que la preocupación por el futuro hubiera reducido las emociones a un monótono término medio
|
Tess de los d'Urberville de Thomas Hardy
ajustándose a los consejos de los sabios de todos los tiempos, acabó por convencerse de que ninguno de esos sabios había sabido nunca lo bastante de sí mismo para comprobar si sus consejos eran viables.
|
Tess de los d'Urberville de Thomas Hardy
El molino seguía laborando, que el alimento es necesario siempre; la abadía había perecido; todas las creencias son efímeras, y siempre se ve que el cuidado de lo temporal dura más que el de lo eterno.
|
Tess de los d'Urberville de Thomas Hardy
En el crepúsculo matutino parece activa la luz y pasiva la sombra, mientras que en el vespertino es la sombra la que actúa viva y creciente y la luz la que se adormece y rinde. |
|
Jude el oscuro de Thomas Hardy
Es curioso, pensó. ¿Qué le estaría reservado? Supuso que no era suficientemente digno del suicidio. La muerte liberadora le despreciaba como víctima y se negaba a llevárselo.
|
La edad de la inocencia