Últimos días en Berlín de Paloma Sánchez-Garnica
Sobre todo miedo , un miedo que se fue incrustando en cada poro de la piel , en cada latido , en cada respiración de un aire viciado por una maldad desatada.
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Últimos días en Berlín de Paloma Sánchez-Garnica
Sobre todo miedo , un miedo que se fue incrustando en cada poro de la piel , en cada latido , en cada respiración de un aire viciado por una maldad desatada.
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Las tres heridas de Paloma Sánchez-Garnica
Solo el que lleva la literatura metida en las venas puede alcanzar el extasías casi místico que se produce cuando los dedos se deslizan libres por el folio blanco, cubriéndolo de letras, palabras, frases y párrafos hasta convertirlo en vidas vividas en los personajes que se moldean en su cabeza y que toman forma a través de ese movimiento inconsciente de las manos.
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Mi recuerdo es más fuerte que tu olvido de Paloma Sánchez-Garnica
La suerte no se tiene, se busca y se persigue
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La sonata del silencio de Paloma Sánchez-Garnica
El problema es que en asuntos de mujeres los hombres no tienen empacho alguno en anularnos incluso para lo que nos afecta directamente, nunca se privaran de exigirnos explicaciones de lo que ellos mismos nos han obligado a hacer; siempre habremos de justificar todo aquello que hacemos o dejamos de hacer más allá del mundo limitado de cuatro paredes
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Mi recuerdo es más fuerte que tu olvido de Paloma Sánchez-Garnica
....como sería pasar unas navidades cenando sola, dejar pasar aquellas fiestas sin demasiada pena ni gloria, dispuesta a encerrarse en la calidez de su casa, con la nevera llena, buena música de fondo y un rimero de libros que esperaban pacientemente ser abiertos entre sus manos para entregarle historias apasionantes en las que sumergirse.
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La sospecha de Sofía de Paloma Sánchez-Garnica
No se pueden imponer a la fuerza unos ideales por muy loables y encomiables que sean. Si le privas a la gente de libertad no podrás convencerles nunca, y mucho menos a la juventud que necesita volar y elegir y equivocarse, y caer, y levantarse, y triunfar y rendirse, y hasta fracasar. Los jóvenes necesitan vivir su vida, no la que les impongan un grupo de prebostes desde su despacho, pretendiendo controlar haya el número de latidos de su corazón.
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La sospecha de Sofía de Paloma Sánchez-Garnica
Tenía muchas ganas de leer algo de la autora, los premios y las críticas le avalaban, así que me estrené con esta novela. El resultado: gratamente sorprendida. La historia refleja muy bien la época franquista y los años en los que el muro de Berlín dividía las dos alemanias, la federal y la democrática, con todo lo que ello acarreaba para los habitantes de uno y otro lado. Cuando el personaje principal, Daniel, se entera de que la que siempre ha creído que era su madre, no lo es biológicamente, corre en busca de respuestas a una cita en París. Allí descubrirá sus orígenes y acudirá a Alemania, donde su vida se verá totalmente trastocada, la suya y la de su mujer, Sofía. Se trata de una novela de espías, con la Stasi y la KGB por medio, llena de intrigas, de historias de amor y desamor, con una recreación y una ambientación muy buenas y una narrativa de una gran intensidad que nos hará penetrar en la historia como si fuéramos los propios protagonistas. La trama está muy bien urdida, de manera que no quedan flecos en la historia que la hagan flaquear. Los personajes, tanto los protagonistas, como los secundarios, tienen una gran importancia en todo el desarrollo y además tienen mucho peso en cuanto al dibujo que la autora ha hecho con sus personalidades y sus retratos psicológicos. Un libro que se devora en muy poco tiempo y que, a pesar de su más de 500 páginas, se lee en un suspiro. El mismo suspiro que te hace exhalar la autora cuando llegas al final. + Leer más |
La sospecha de Sofía de Paloma Sánchez-Garnica
Bajó los ojos, le dió la espalda y echó a andar en busca de su libertad.
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La sospecha de Sofía de Paloma Sánchez-Garnica
La gente que lee puede ser muy peligrosa para aquellos que pretenden el pensamiento único. La lectura es el germen de toda revolución.
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La sospecha de Sofía de Paloma Sánchez-Garnica
Es nuestra obligación dudar de todo poner en entredicho todas las certezas de nuestro tiempo, y del pasado, incluso las del futuro que aún no se han convertido en certezas, analizarlo todo, la crítica la duda, preguntarse por qué las cosas son como son y no de otra manera, esta es la única forma de mejorarlas
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La sospecha de Sofía de Paloma Sánchez-Garnica
Aquella cicatriz de indignidad humana se iniciaba en el lado occidental con la solidez del muro de cemento, grandes bloques blancos y sólidos redondeados en lo alto para impedir que nadie del Oeste pudiera alcanzar su cresta.
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¿En qué año nació Benito Pérez Galdós?