Lo primero que me llamó la atención de esta novela fue su título. Ya lo decía Benedettí 'Una parte importante de un cuento es el título: lo ilumina' y tenía toda la razón. Escoger un buen título para un libro no es fácil. A mí, al menos, no me lo parece. La historia comienza cuando una niña de ocho años ha desaparecido de su hogar en Oxford cuando se celebraba una fiesta de disfraces. Adam Fawley, inspector de policía de Thames Valley y su equipo serán los encargados de investigar qué paso el día de su desaparición. Lo siguiente que me llamó la atención fue la estructura formal de esta novela. Por una lado, no está dividida en capítulos. El texto de la novela está organizado mediante apartados señalados por asteriscos. También utiliza artículos de prensa, incorpora las transcripciones de los interrogatorios, recortes de los medios de prensa escrita y/o entrevistas y reproducciones de conversaciones de redes sociales como Twitter o Facebook con lo que consigue una mayor rapidez en la narración. Por otro lado, utiliza varios narradores. El enfoque narrativo se lleva a cabo con dos voces narrativas; una de ellas en tercera persona y otra usando la primera persona. La primera persona representa el relato contado desde la perspectiva del inspector Adam Fawley que intenta que seamos partícipes de los hechos, queriendo que el lector sienta las acciones de inmediato. También recurre a los saltos en el pasado recreando los últimos días de los pasos de Daisy Mason antes de la desaparición. Es una novela con un gran dinamismo que confiere a la novela una gran visualidad. Todo sucede con espantosa facilidad, con absoluta simpleza. No me extrañaría que acabara adaptándose a una serie de televisión. A veces, incluso, cuando leía algunos párrafos veía fotogramas en mi cabeza de las escenas que estaba leyendo. En esta novela nos encontraremos con los interrogatorios policiales de testigos y sospechosos, exhaustivas búsquedas y pistas tanto buenas como falsas que completaran el método para resolver el misterio. Algo que ya hemos visto en otras novelas pero lo que me resultó más inquietante fue el tratamiento de las redes sociales como elemento de amplificación y difusión de juicios paralelos. Esa campaña de odio que se extiende por las redes sociales actuales; algo que vemos constantemente en nuestro día a día, por desgracia. Advierto que hay muchos giros de tramas. La autora sorprende al lector usando muchos giros consecutivos. Cuando nos sentimos a gusto con la trama que fluye con una extraña tranquilidad la autora vuelve a sorprendernos con otro evento inesperado que hace que la trama gire de nuevo. A decir verdad, si se araña en la superficie de las personas encontramos secretos ocultos. Verdades simuladas, mentiras veladas. Y esta novela va mucho sobre eso. En este tipo de casos siempre hay algo más que de lo que parece a simple vista. Debemos leer prestando atención a cada pista que se vaya encontrando o cada dato que se vaya descubriendo pues en un caso enrevesado como este nada es lo que parece. El final es inesperado, de hecho, el giro final es totalmente repentino. Cuando la historia estaba cerrada, ¡Zas! no es lo que pensabas. Esta novela pertenece a la serie del inspector Adam Fawley. Próximamente estará disponible la segunda entrega. Estoy más que segura, segurísima, que no me perderé el siguiente libro de esta serie. Enlace: https://www.yoleonovela.com/.. + Leer más |