Soñando contigo

Azahara Vega nos ofrece un romance entre dos hombres muy diferentes, que se aceptan como son y se dan tiempo para conocerse el uno al otro.

Mario García es un divorciado de cuarenta años que trabaja como abogado en un bufete de divorcios y herencias. Va tirando como puede hasta que decide apuntarse a un gimnasio. Allí, sin saber cómo ni por qué, comienza a sentirse atraído por uno de los clientes. El problema es que ni es homosexual ni le había pasado nunca algo así con ningún otro hombre.

A partir de ahí comienzan las desventuras de nuestro personaje, confusas para él pero muy divertidas para el lector. El pobre Mario parece volver a la adolescencia y se excita solo con pensar en el desconocido cliente, porque por no saber no sabe ni su nombre.

La familia de Mario es odiosa, pero la de Fernán es un amor. Tratan al abogado como a uno más desde el minuto uno. La parte de la vaca Margarita es muy divertida.

Me gusta que las cosas vayan poco a poco entre la pareja. Mario tiene muchas dudas, pero Fernán le da el tiempo y el espacio que necesita. A pesar de la escasa longitud del libro, no encontré apresurada la trama ni eché nada en falta.

La novela es cortita, de ágil lectura y muy divertida. Tiene su parte de reflexión, pero lo que priman son el romance y la diversión. Sin más pretensión que la de entretener, es perfecta para leer en una tarde, desconectar y olvidar el día a día. Os animo a descubrir la historia de amor entre Mario y su bombero.

Una cosa que agradezco cada vez más es saber de antemano que un libro es único y tiene un final cerrado, como en este caso indica la sinopsis. Porque cada vez me encuentro más libros que no indican que pertenezcan a una serie o saga y luego me encuentro las sorpresas. Así que esto agradezco mucho a la autora que lo indique en sus novelas.

La portada no me gustaba pero la sinopsis me llamaba bastante la atención y me gusta leer lo que saca esta autora, así que me adentré en esta novela cuyo protagonista es Mario García. Como indica la sinopsis: "Mario es abogado, está divorciado y tiene cuarenta años. Su vida es monótona y aburrida. Cada día es igual". Y eso me ha ocurrido con la primera mitad de la novela, se me ha hecho monótona y aburrida y sentía que tenía que haber arrancado la historia mucho antes. Se lee rápido pero esperaba algo más dinámico. Por suerte la segunda mitad de la novela mejora bastante en cuanto al ritmo.

No he conseguido conectar con el protagonista. Por más que te explica su situación, la mentalidad con la que ha sido criado y sus sentimientos, no me ha gustado. Quizás por eso la primera parte se me ha hecho un poco densa y para mí no ha terminado de arrancar hasta que ha aparecido Fernán en escena.

Lo que más me ha gustado ha sido la familia de Fernán. En especial la madre, pero todos ellos son maravillosos. Y la ambientación gallega.

Os recomiendo su lectura porque la historia es bastante buena y que yo no haya simpatizado con el protagonista, no quiere decir que no lo vayáis a hacer vosotros.

He leído otros libros de esta autora que sí me han gustado, pero este no es uno de ellos.
La novela tiene dos partes bien diferenciadas. La primera está centrada en Mario, que es el protagonista absoluto de la historia. Es un abogado heterosexual que de repente se siente atraído por otro hombre y su historia es la que ocupa la mayor parte del libro. Considero que la segunda parte comienza cuando Fernán, el otro protagonista, aparece en escena.
El libro se me ha hecho muy pesado. Capítulo tras capítulo lo único que se cuenta es el debate interno de Mario, luchando contra sus propios deseos porque no se considera homosexual. Entiendo que la autora pretende mostrar ese conflicto personal que el hombre tiene, pero se hace aburrido leer una y otra vez cómo el protagonista se niega a aceptar lo que siente.
El momento en el que Fernán aparece en la trama esta se vuelve más interesante, pero son pocos capítulos y cuando empezaba a engancharme, el libro se termina. Tuve que asegurarme de que no me había saltado capítulos, porque de repente me encontré con el epílogo donde se cuenta la vida de ambos meses después y donde no se explica nada sobre cómo Mario ha conseguido dar el paso y superar sus miedos y prejuicios. El libro tiene un segundo epílogo que no me esperaba y cuyo fin es contar más detalles de la vida de los protagonistas.
En resumen, es un libro que no me ha gustado y me ha aburrido. La autora tiene mejores obras que son más entretenidas e incluso divertidas.

Soñando contigo es una novela contemporánea en la que su protagonista ve cómo su mundo se tambalea al no ser capaz de quitarse de la cabeza a un joven que ve cuando acude al gimnasio.
Mario es un abogado recién divorciado que nunca hasta ahora se ha sentido atraído por ningún hombre, por eso no comprende qué le pasa con ese desconocido con el que ni siquiera ha hablado porque no logra olvidarlo y se excita como un adolescente ante el mero hecho de pensar en él.
Aunque a veces me han dado ganas de darle un coscorrón al protagonista, Azahara Vega consigue transmitirnos el mal momento que atraviesa Mario porque, de buenas a primeras, su ordenada vida da un vuelco tal que es lógico que le resulte difícil de asumir.
Me ha gustado especialmente la paciencia de Fernán –que tiene una paciencia tremenda– y su familia, incluida Margarita, porque son geniales y suponen el contrapunto perfecto para compensar el huraño carácter de Mario, je, je.

Es una historia que me sorprendió, con sus más y sus menos. En ella nos transporta a conocer a Mario, un tipo que me cayó mal desde el principio. No piensa en los sentimientos de los demás, pero todo cambiará por un suceso que ocurre en cierto momento de su vida.
Esta historia trata muchos temas, el rechazo por ser gay, los sentimientos encontrados por amar a un hombre, la orientación sexual.
Por otro lado tenemos a Fernán, un personaje que me ha gustado mucho. Es un amor de hombre. Es paciente, tranquilo, sabe lo que quiere y no duda en conseguirlo.
Lo más importante: La historia de transfondo.
Lo guay: Fernán y Margarita.
Lo que menos me gustó: El prota, Mario.
En resumen, es una historia sencilla, que se lee en un ratito, y que no te puedes perder. Recomendable.