La compañera del Seerpes

Azahara Vega o Sheyla Drymon, la autora, nos lleva a un planeta habitado por hombres serpientes para hablarnos del amor interracial, y el comportamiento humano cuando se siente alguien amenazado o con miedo.
La novela narra la llegada fortuita de una humana a un planeta habitado por hombres serpientes, donde sentirá un ardiente deseo por su rescatador/salvador al mismo tiempo que intentará superar sus miedos para comprender su cultura. Y todo ello en un hipotético futuro.
Desde el comienzo, se puede ver y leer cómo el comienzo de una relación amorosa, está lleno de deseo sexual más que verdadero sentimiento de Amor. Así, de esta manera describe cuán importante es la atracción física a la hora de pensar en alguien como pareja. A la misma vez que resalta los inconvenientes que derivan de pertenecer a culturas, religiones y/o razas distintas, lo cual hace que el entendimiento sea complicado o se produzcan situaciones donde se produzcan malentendidos por desconocimiento.
También, y como consecuencia de tener que vivir en un lugar o país que no es el tuyo, tienes que adaptarte a las nuevas costumbres, nueva cultura y el nuevo idioma. Todo esto provoca que nos llenemos de miedos aun cuando quieran ayudarnos. No obstante este miedo, la misma naturaleza humana consigue que saquemos lo mejor de nosotros mismos para integrar a los nuevos e integrarnos en una nueva comunidad.
Por otro lado, la novela también se puede entender como un canto a la libertad amorosa y a la aceptación de lo no normativo, en cuanto a cuerpos. En este sentido, el principal mensaje que podemos sacar es que la verdadera belleza se encuentra en el interior de las personas y no en su físico.
Incluso, en ocasiones se puede pensar que es una manera de ver el choque cultural y tecnológico que existe entre dos pueblos de la misma especie, aunque no con el mismo nivel de desarrollo. O de adaptación al medio. Ejemplos de estos son la convivencia entre Neandertales y Cromañones, o españoles y nativos americanos.
Por último, incide en la manera que protegemos a nuestros seres queridos de cualquier amenaza, del tipo que sea. Aunque también puede parecer que esta protección está rayana en la anulación de la voluntad de la persona querida, al tener un exceso de celo en ese instinto de protección que muchas veces consideramos una prueba de amor.
En mi opinión es una novela de sci-fi romance que nos lleva a pensar, divagar, sobre las maneras de enamorarnos, (sea de lo que sea) y demostrar esa pasión. Recomiendo su lectura porque tiene momentos de fina ironía, comedía, pasión y sobre todo porque es de lectura ágil para pasar un buen rato.

Me ha gustado mucho porque combina muy bien el romance erótico con secuencias de humor y acción, y con la ambientación CiFi de viajes espaciales, avances tecnológicos y planetas habitados por diferentes alienígenas. Todo esto se convierte en una trama lógica en la que los protas se encuentran y hacen que su relación avance a pasos correctos y tenga sentido hasta el final.
La carga erótica me ha parecido comedida dando suficiente espacio a los otros géneros que abarca la novela, pero es cierto que las escenas son de alto voltaje. El prota nos sorprende y nos cautiva con la posesión de dos 🍆 (cosa que pocas veces se ve aunque no fue la primera vez para mí), y siempre me ha parecido un aspecto curioso y de algun modo sexy. En cuanto al aspecto romántico me ha parecido coherente la evolución desde un primer susto, pasando por la atracción sexual y despues por el enamoramiento. Es cierto que al tener pocas páginas la novela estas fases suceden bastante rápido, pero se compensa con la relación sana que ambos mantienen, destacando como el prota masculino respeta la libertad y empoderamiento de la prota.
Pero si hay algo que me ha gustado más ha sido el humor. Durante los primeros encuentros todo es un caos y malentendidos por la diferencia de idiomas. Me lo he pasado genial en esos momentos, al igual que cuando interviene en voz alta el tercer personaje en discordia que es la IA que tiene la prota implantada en el cerebro y que ha vuelto loco a nuestro hombreserpiente; ha sido un punto muy bien traído que hace aún más especial la historia.
Por último me gusta que otro personaje secundario (la amiga humana de la prota) deje abierta la posibilidad de su propia historia.

Esta novela es muy loca, si bien me he reído mucho sobre todo porque la protagonista cae a un mundo dónde todo es complicado y los habitantes son serpientes que no entienden el idioma, que si una hembra los ataca significa otra cosa que no es la misma que la de ella.

La narración en esta historia es fresca, divertida y amena. Está ambientada en el mundo inventado Seerpeland.

Dentro de la trama, nos encontramos aliens, dudas, miedos, amor, problemas con el idioma, momentos con equivocaciones, dónde la trama principal es el romance entre los protas con algo de acción. Es una historia bien llevada con dos seres muy diferentes.

X700, es mi personaje favorito, aunque quiera matarlo también.

Es una historia que realmente vale la pena leerlo. Porque es divertido, romántico, tiene acción, tiras y afloja y unos personajes que hacen época. Sin duda alguna, 100% recomendable.

Claudyem se estrella en un planeta del que no sabe nada y tiene un encontronazo con uno de los habitantes. A partir de ahí se dan todas las confusiones que se puedan imaginar: barrera idiomática, lenguaje no verbal, usos y costumbres,... vamos que ella intenta matar al alien y él se ha creído que quiere llevarlo a la cama.
Un libro que se lee en un par de ratos debido a su narrativa ágil que se adentra en las diferentes formas de vivir que tienen los protagonistas, cada uno criado en un planeta diferente y, por supuesto, con una biología que casi no se parece.
El amor, los momentos de tensión y los de humor están presentes a lo largo de la lectura y nos damos cuenta de que, con voluntad, se pueden superar todas las barreras. Me he reído a ratos con alguno de los chismes que salen, no lo he podido remediar. Un libro entretenido para pasar un buen rato y desconectar.