Una corte de hielo y estrellas

Le di a él mi ser..., como nadie más que él podría ver nunca. Como nadie más que él podría llegar a comprender.

Te amo —susurró—. Más que la vida, más que mi territorio, más que mi corona.

Yo podría haber jurado que las galaxias se arremolinaban en su mirada. En las sombras entre sus alas moraban las gloriosas profundidades de la noche.

Tengo que crear. Porque si no todo habrá sido en vano. Tengo que crear, o la desesperación se apoderara de mi y nunca saldré de mi cama. Tengo que crear porque no tengo otra manera de darle voz a esto. Es difícil y duele, pero si fuera a detenerme, si fuera a dejar este telar quedara en silencio... Entonces no habría Esperanza brillando en el Vacío

Por las estrellas que escuchan, Feyre.
Por los sueños atendidos, Rhys.

Nuestras manos se entrelazaron, acaricié las firmes paredes de su mente. Las barreras cayeron de inmediato, dejándome entrar. Permitiéndome mostrarle ese último obsequio.
Lo que había esperado que él también considerara un obsequio.

Naciste la noche más larga del año. — Sus dedos me acariciaron la espalda. Más abajo —. Desde el principio estabas destinada a estar a mi lado.

...no habría Esperanza brillando en el Vacío.

Ignorándolos, proyectando el mensaje de que no eran suficientemente importantes como para que se los considerara una amenaza.

Tengo que crear. Porque si no todo habría sido en vano. Tengo que crear, o la desesperación se apoderará de mí y nunca saldré de mi cama. Tengo que crear porque no tengo otra manera de darle voz a esto. (...) Es difícil y duele, pero si fuera a detenerme, si fuera a dejar este telar y quedara en silencio... Entonces no habría Esperanza brillando en el Vacío.