Es un cuento corto pero me ha parecido sensacional. Normal que esta autora haya sido tan importante. Nunca había leído nada de ella, aunque sí la había estudiado, y ha sido fascinante. El protagonista de esta historia es Armando, un joven soñador de 22 años que vive en una aldeíta de Saint-Didier la Sauve. Iba para cura cuando estalla la revolución y decide emigrar a París para convertirse en escribiente a casa de Mauricio Dupley. Tras leer el final que me dejó bastante tocada lo releí hasta caer en la cuenta de que era el 28 de Julio de 1794, el inicio de la Revolución francesa tras la caída de Roberpierre. Como tenía la historia algo oxidada me ha costado un poco. Es un cuento que, sin duda, recomiendo y volveré a leer más de esta autora. |