El cuerpo en que nací

Una obra que tiene mucho que ver con la propia vida de la protagonista, una narradora en primera persona, que nos va contando todo lo vivido, sufrido y sentido.
En realidad, lo que relata es su iniciación a la vida así como la aceptación de uno mismo.

Una narración contada desde el diván de una psicoanalista, la Doctora Sazlavski, haciéndonos partícipes de este modo, de todo cuanto le ocurrió y vivió desde su infancia.

Enseguida nos damos cuenta de que la protagonista se deja llevar y comienza a contar su vida, cuando se adentra en el consultorio de la psicoanalista y empieza a relatar sus vivencias, sus recuerdos y todo aquello relacionado con su niñez y adolescencia con mucha agilidad y franqueza.

Nosotros, los lectores, también nos inmiscuimos y nos integramos en el conjunto de las imágenes que nos deparan sus recuerdos.

El título ya nos dice y nos adelanta que será la historia de una niña, nacida con un defecto en un ojo, una mancha blanca en el iris, que le influirá en todos las actividades que realice.

Y de aquí el título, “El cuerpo en que nací” ya que, evidentemente, su escasa visión desde su nacimiento, hará que se desarrolle con ciertos problemas y tenga que llevar una vida diferente, con visitas a médicos y cuidados, hasta que llegue a poder normalizar su vida, ya siendo adolescente, viviendo de una manera más natural y pueda alcanzar también sus deseos.

Lo que sí está muy claro es que se trata de una autora que desarrolla un mundo muy personal, además de conmovedor, aunque también, la obra está narrada con sentido del humor en aquellas interpretaciones que destaca de su propia vida y de sus íntimos recuerdos.

El desarrollo de la vida que nos relata se produce durante los años setenta, donde también encontramos la ideología del momento, como la vida que sus padres llevaban, muy liberales y viviendo como un matrimonio abierto, que desean que sus hijas crezcan libres y sin mentiras.

Po ello, intentan educar a sus hijos con el método Montessori, llevándolos a una escuela Montessori, así como también la madre se siente atraída por las comunas hippies donde se instalará, durante un tiempo, con sus dos hijos, Lucas, su hermano y ella misma, plena libertad sexual del momento ,…

Cuando los padres se separan y después del período en la comuna hippie a la que no se adaptarán, la madre, optará por dejar a los niños con su abuela en México, porque ella decide irse a vivir a París y estudiar, aunque más adelante, los niños se instalarán con ella en Francia, por lo que de nuevo habrá cambios y nuevos intentos de adaptación y por lo tanto, nuevas inseguridades.

Aunque los grandes cambios y movimientos a los que se verán sometidos, debido a las circunstancias de vida de sus padres , tampoco ayudarán a alcanzar la estabilidad tan necesaria en unos niños y por lo tanto, también se sentirán un tanto perdidos en un país extraño.

Hasta encontrar el equilibrio y la autora conseguir su objetivo, el de escribir y publicar sobre esa búsqueda para comprender su propia identidad.

Pero serán las diferencias físicas y por tanto, también las psicológicas, las que incidan en la protagonista para que sea una persona que no se ocupe ni viva de todo aquellas convenciones sociales o de la moda.

Y realmente lo que encontramos es un relato escrito con total y absoluta sensibilidad, naturalidad, sinceridad, introspección y reflexión.

Un lenguaje claro, íntimo, profundo pero fluido, palabras directas y mucho sentimiento.

A mí me ha gustado leerlo y lo he disfrutado.

La obra narra la vida de una niña con un defecto de nacimiento en un ojo. Nos hace un recorrido a la niñez y adolescencia de la autora, donde se adentra al dolor, la incomprensión, al rechazo y el desamor. Este camino lo recorre desde la silla de la psiquiatra, donde va develando su historia. En este libro, la escritora desnuda su alma, y hace al lector entrar en sus vivencias y compartir sus sentimientos. En lo particular, disfrute mucho la novela, tiene sentido del humor, drama, amor y tristeza. El estilo literal es fantástico, se lee fluido y mantiene el interés a todo lo largo de la obra.

Guadalupe Nettel describe su infancia y cómo esta marcó su vida. Pero es que, ¿a quién no su niñez determina las bases de lo que será su futuro?

"...ninguna niñez puede ser del todo placentera. Los niños viven en un mundo donde la gran mayoría de sus circunstancias son impuestas. Otros deciden por ellos: la gente que han de tratar, el lugar en el que han de vivir, la escuela a la que asistirán, incluso lo que deben comer cada día. El hecho de que mi padre estuviera preso era parte de lo mismo. de nada servía llorar o estar en desacuerdo".

Poco puedo decir sin adelantar la historia. Lo único que puedo resaltar es que la autora tiene una capacidad impresionante para mantenerte al pendiente del desarrollo de la novela. Iba a poner quizá, pero en realidad es un hecho, con esta autobiografía aprovecha la naturaleza morbosa de los individuos para hacernos querer saber más.

Este es el segundo libro que leo de Nettel. El primero fue La hija única, quizás un libro que me marcó al ver reflejado en sus páginas una historia muy similar a otras las vividas en mi familia.

Enlace: https://www.robertosanchezto..

Es un buen libro para comenzar a explorar la pluma de esta escritora. En el se explora la autoaceptación desde un proceso de concienciación. Narrado en primera persona, con demasiados rasgos de una novela psicológica; a su vez, comprendes el por qué de los actos y empatizas con el personaje. Además, se explora a un México y Francia de la década de los 60-70, mismos que serán importantes e influirán en la historia de la protagonista.
Es, sin duda, una de mis mejores lecturas de este año. Ideal para todo tipo de lectores, aún más, si son amantes de las autobiografías y las novelas con toques psicológicos.

“No contaré nada en lo que no crea”
Parte del discurso autobiográfico convertido en novela de Nettel,
Pergeñado, desde el diván de psiquiatría , en el cual narra su infancia y adolescencia, que físicamente puede haberla colocado en inferioridad, pero que socialmente le ofertó un handicap.
Escrito con un lenguaje claro y fluido, expone, argumentos, en ambos sentidos, que contribuyeron a hacer menos llevadera su situación, que jalonados de la mano de una familia disfuncional, donde las haya, disfrazada de progresista liberal e independiente, solo contribuyeron a la percepción de inferioridad, y a la opresión de su singularidad, aunque..
finalmente contribuyeron a la auto superación basada en la resiliencia, de esta novel ( tal vez no tanto ) escritora mexicana.
Ofertándole además un plus, la capacidad de observar de manera directa otras gente, otros modos, que contribuyen a la amplitud de miras que plasma en sus obras,
Refrescante escritura, admirable, construcción literaria a partir de la deconstrucción personal ligera, interesante apasionante reconciliadora,
Historia personal, pletórica de anécdotas, perfectamente enlazadas que no pierde en autoconmiseración lo que gana en empatía.
A su decir, su madre dijo, “ me harás quedar mal siempre lo has hecho “
No, no lo hace, a menos que se considere así el poner los puntos sobre las ies .
Conjuntamente, hace un devastador repaso, del Mexico, que fue, es y será arrasado por la corrupción, las modas extranjeras y la incapacidad de aceptarse como una nación, fuerte, solidaria, congruente e inclusiva,
Más castas que en la India, menos aceptación de su existencia,
Discriminación democrática, al de arriba, de abajo de frente, de atrás, de un lado y del otro.

“El cuerpo en que nacimos no es el mismo en el que dejamos el mundo”, la autora cuenta su infancia y adolescencia en un monólogo con su psicoanalista, y como cada cicatriz y huella en la vida hace que lleguemos al fin de nuestros días siendo diferentes. En este recorrido que incluye partes en México y otras en Francia expone sin omitir detalles sobre su sensibilidad y sobre el mundo que con sus ojos puede ver. Lleva de una manera fantástica el correr de la inocencia, la relación con su madre y cada punto de contacto con una realidad muchas veces contrariada a su voluntad. El padre, su abuela y las amistades también dejan marcas en su cuerpo.

El cuerpo en que nací es un libro íntimo, un libro-catarsis inspirado en la autobiografía de la autora, es también una novela de formación donde seguiremos la infancia y adolescencia de la protagonista.

La idea del libro surgió en 2009 después que la Revista mexicana Letras Libres encargara a G. Nettel un texto breve autobiográfico sobre su infancia.

El libro narra la historia de una chica que no tendrá nombre; de esta manera el lector se siente aún más propenso a identificarla con Guadalupe Nettel. La chica nace con una mancha blanca en pleno iris lo que va a dictaminar conductas correctivas que la hacen especial, y posicionarla siempre a la defensiva. El relato aparece como una sesión con una psicóloga o psiquiatra, la Dra Sazlavski a quién la protagonista trata de relatar las neurosis de su infancia, es el resultado de sujetos nunca abordados.

La escritura de Nettel es prístina y cantarina, sin ningún patos, conlleva mucho humor irónico, por lo que el relato se aliviana con un aspecto tragicómico que la autora da al texto.

Los padres de la protagonista evolucionan en un medio progresista en Mexico DF, de los años 70; son herederos de los hippies de los años 60. La educación que dan a la protagonista y a su hermano Lucas, no es la tradicional, sino que los envían a una escuela Montessori. Los padres tienen un discurso abierto con la sexualidad, lo que hace que a los 6 años tengan toda la información gráfica y práctica con ellos, pero ninguna posibilidad de interpretarla.

La vida familiar cesará con la separación de los padres, la madre los dejará cierto tiempo con una abuela en DF, bien cuidados, pero abandonados de toda afección.

El defecto ocular de la protagonista, así como su educación van a moldear su carácter y hacerla sentir diferente de los otros niños. Su posición corporal encorvada, hace que la abuela la llame « cucaracha » y elle se identifica con las cucarachas que son los trilobitas, los pobladores más antiguos del planeta con su arte magistral del disimulo.

Luego la madre los hará inmigrar a Francia, donde ella cursa estudios superiores. La instalación en Francia, el desarraigo, la nueva adaptación es otro motivo de desconcierto y de pérdida de la seguridad en si misma.

Todos estos escollos harán que la protagonista sea impelida hacia la escritura desde muy temprana edad. Muy pronto comprendió que con una escritura bien afilada podía vengarse de ciertos agravios. Aquí tenemos, en parte, la explicación a su carrera literaria.

Un libro que marca, un libro que ayuda a comprender cómo se le puede robar la infancia a un crío, cómo se le puede hacer perder la inocencia antes de tiempo, por falta de herramientas psicológicas sensatas y de experiencia.
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