Sálvame de mí

Este libro nos transporta a Drogueda, una ciudad dormitorio, y en concreto a las vidas de Jack y de Emily.
Jack Myers, joven, rico, guapo, con una esposa trofeo, un bebé y un negocio en expansión. Y que sin embargo, tras una traición, ha perdido el rumbo y el control de su vida.
Que puede llevar a un hombre, a querer deshacerse de todo en la vida?
Que puede pasar, cuando alguien a quien creías desesperado, rechace la salida fácil de sus problemas?

Emily Bristol, joven, al borde de la pobreza, soltera, en paro, sin perspectivas de futuro, que sin embargo se resiste a dejar su ciudad para ayudar a su padre.
Que puede evitar, que alguien que no puede pagar ni su comida, rechace miles de libras?
Que puede pasar, cuando una persona se empeña en sacarte, por pura fuerza de voluntad, del pozo en el que estás metido?

Este libro se adentra en la depresión, en como esta es capaz de convertir a una persona luchadora en alguien sin deseos de vivir, incapaz de seguir relacionándose con los demás. de la pelea que supone avanzar día a día para salir de ella y que si pretendes ir muy rápido, las inseguridades vuelven a dejarte caer en el pozo, aunque lo que puedas perder sea vital para terminar de sanar. Y por supuesto, en la paciencia, fuerza de voluntad y constancia que se necesita para acompañar a un ser querido en esa lucha.
Aunque en la vida real este problema sea un camino muy muy largo.

Sálvame de mí, es el primer libro que leo de Mita Marco, por cierto, no será el último y es una de esas historias que mientras leemos, sentimos la necesidad de un final de película, nos envuelve con la necesidad que los protagonistas tienen de llegar a ser felices, de sus momentos de angustia y desesperación. Y sinceramente, me encanta que los libros me dejen un buen sabor de boca.