¿Podemos hablar de la FANTASÍA que es este libro? O sea es que tiene demasiadas cosas buenas. Para empezar, los protagonistas, Nora y Adrián: ella es tontísima, una dramática de cuidado y está completamente ida, no la he podido amar más; y él es pasota y un buenazo, no acabar prendada de él es imposible (yo aviso). Por supuesto, su relación es maravillosa. Después, la representación arromántica y las escenas de sexo: el enfoque de la primera me parece superinteresante e importante y he aprendido mucho, y las segundas son naturales y una gozada, se habla muchísimo de sexo de la forma más abierta posible, mis dieces. Además, los nombres de los capítulos son una genialidad. Y para acabar, los secundarios y el p*** final: adoración máxima por Natán, Rodri, Alina y Oriol, pero es que con Lía me caso, y casi infarto con semejante epílogo (necesito para ya «Tres (no) son multitud»). Una historia adictiva, provocativa e innovadora con personajes entrañables llena de mamarracheo del bueno y escenas ridículas con las que partirse de risa. A mí me ha encantado. + Leer más |