Los renglones torcidos de Dios

El llanto es una descarga de la emotividad. Cuando ésta llega a un punto grave de concentración es preciso abrir compuertas al alma. Y el llanto, a veces, es su mejor cauce.

Mi marido y yo estamos muy compenetrados. Compartimos sin un mal gesto, desde hace dieciséis años, el tedio que nos producimos..

El silencio no existe. A veces huimos de la gran ciudad para escapar del bullicio, pero no hacemos sino trocar unos ruidos por otros.

Todo era posible en aquel reino de lo absurdo, donde la extravagancia es ley.

La verdadera locura quizá no sea otra cosa que la sabiduría misma que, cansada de descubrir las vergüenzas del mundo, ha tomado la inteligente resolución de volverse loca.

La fobia es un pretexto que se ha inventado el organismo para ocultar un terror verdadero, justificado, pero que la mente se empeña en ignorar.

Consideró Alicia que los espejos, como muchas personas, tienen respuestas distintas para las mismas preguntas, según los casos.

Quizá la verdadera locura no sea otra cosa que la sabiduría misma que, cansada de descubrir las vergüenzas del mundo ha tomado la inteligente resolución de volverse loca.

Las personalidades especialmente exquisitas son más vulnerables que las más zafias; del mismo modo que una taza es más frágil cuanto de mayor calidad sea la porcelana.

multitud de seres cuyas úlceras no estaban en la piel o en las entrañas, sino en la mente: individuos llagados en el espíritu, tarados del alma