Quería creerlo, pero no sabía si era capaz. Era muy fácil prometer algo, lo difícil era cumplirlo. Muy pocas personas cumplían sus promesas.
|
Quería creerlo, pero no sabía si era capaz. Era muy fácil prometer algo, lo difícil era cumplirlo. Muy pocas personas cumplían sus promesas.
|
Me enamoré de ti por lo que me hacías sentir cuando estábamos juntos. Porque contigo tenía la impresión de que te importaba. A tus ojos era el hombre que aspiraba a ser.
|
Para ti todo es blanco o negro. O te odio o te quiero. Pero las cosas no funcionan así. La vida nunca sigue un camino tan claro. Las emociones nunca son tan definidas.
|
El rencor raras veces hiere a alguien que no sea el que lo alberga.
|
Nadie conoce su verdadero temple hasta que lo ponen a prueba.
|
Todos nos arrepentimos. Ningún alma viviente es inmune a ese desagradable sentimiento.
|
—¿Quién eres tú Strykerius? —Soy un alma perdida —susurró. |
Solo nosotros, nosotros mismos, podemos definir nuestro propósito en este mundo.
|
Entonces moriré amándote.
|
—¿Sabes lo que recuerdo de ti, Stryker? Las últimas palabras que me dijiste. “No hay ninguna razón para que me quede”. Entonces te marchaste de mi casa y nunca miraste atrás. Ninguna razón para quedarte, dijiste... Ninguna. —Estrechó los ojos peligrosamente en él—. Me rompiste el corazón con esas pocas palabras.
|
¿Qué criaturas mágicas podemos encontrar en Gringotts, el banco de magos?