Apuesta un beso, si te atreves

No habíamos leído nada de esta autora y tenemos claro que repetiremos. Ambientada en el siglo XIX, Londres… Si te gustan las historias de esa época, con protagonistas femeninas con carácter y que no necesitan a ningún marqués que las rescate te va a atrapar desde la primera página.

Al marqués de Seymour se le acerca la hora en la que su título le obligue a encontrar esposa, pero a él le gusta vivir la vida y el título es una carga más que un beneficio. Sus tres hermanas están decididas a que ese año la encuentre, Justin no se lo pondrá nada fácil, pero cuando descubre a la dueña del nuevo local de juego Hades pone todas sus ganas en conquistar a esa rusa esquiva que tiene claro que algo esconde, y no descansará hasta descubrir el qué.

Ania lo ha perdido todo en su infancia, tras ser entrenada por su tío para una justa venganza, ahora está más cerca que nunca de conseguirlo, el ser despreciable que acabó con su felicidad va a caer y ella será la causante, día a día en su local de juego se encarga de que así sea. No confía en nadie, su círculo de gente de confianza es muy escaso, se encarga de ayudar a los necesitados sin que nadie lo sepa y le encanta crear controversias con sus ideas modernas, ya no posee ningún título por lo que puede permitírselo. El amor está fuera, su único objetivo es la venganza.

Hasta que cierto marqués se obsesiona con ella y con descifrar todos sus secretos, no entiende cómo le resulta tal fácil abrirse a él mientras echan partidas de ajedrez; quien gana puede hacer una pregunta y el otro tiene que ser sincero, y esos ratos acaban siendo sus preferidos, pero ¿qué pasará si la apuesta se sube a un beso?

¿Recomendamos?

Pocas autoras pueden engancharte en historias cortitas sin que sientas que todo ocurre de manera precipitada, la de Justin y Ania se cuece a fuego lento, ella no se deja conquistar tan rápidamente, pero, además, con la trama de la venganza, los descubrimientos, chantajes, etc., estarás enganchad@ desde el principio.

Es bastante completa para lo cortita que es, ideal como lectura entre otras más densas, no sentirás que te falta información.