Eiven es una niña que está a punto de cambiar su vida desde su último cumpleaños. En él su abuelo le envió un libro en blanco, pero desde que lo tiene en su poder tiene sueños raros y cosas extrañas pasan a su alrededor. Cuando se va de vacaciones con sus padres a casa de sus abuelos y por cosas del destino los acompaña la familia de su mejor amigo las cosas se complican bastante para todos, pues un secreto de poder milenario, la descendiente de una reina poderosa y artilugios mágicos que llevan toda la vida dividiendo el mundo hacen su acto de aparición. Eiven, sus hermanas y algunos aliados deberán descubrir la verdad, resolver las pistas que vayan encontrando y luchar contra los que quieren el poder para hacer el mal. Además de la linea temporal de Eiven, que es en la actualidad, tenemos la linea temporal de Francesca de Luca, que está en un momento del pasado. La novela es interesante y la idea es muy buena, pero entrar y quedarte en ella cuesta bastante. No porque sea mala, sino porque tiene muchos pequeños detalles que hacen que te satures con facilidad. La narración no es perfecta, hay escenas que no están bien explicadas. Hay varias faltas de gramática, también necesita otra corrección ortográfica. Los capítulos se hacen eternos, rondan los cincuenta minutos de lectura pero hay alguno que pasa de la hora. Es una novela de casi cuatrocientas páginas que solo tiene diez capítulos y estos no tienen subdivisiones. Todas estás pequeñas cosas hacen que sea más densa y sature a la hora de leer. La trama de Eiven es interesante aunque yo prefiero los capítulos de Francesco. Tengo una sensación rara con esta novela, porque me ha gustado la historia pero me parece que le sobran la mitad de las páginas. La novela cierra esta etapa pero no cierra la historia, por lo que habrá al menos otra novela más de Eiven y sus hermanas, que por todo lo dicho anteriormente no sé si leeré porque me ha costado mucho terminar esta parte. + Leer más |