Terminando de Lukov, con amor, he pasado por el blog para releer mis impresiones sobre esta novela que me encantó en su momento. Cual ha sido mi sorpresa cuando he visto que no había compartido mi reseña en la comunidad. Si os interesa el tema sobre el que habla la reseña, os recomiendo la lectura de Hielo, encarecidamente: Esta ha sido mi lectura de esta última semana y os aseguro que no ha podido ser más satisfactoria. No había leído nada de Érika Gael y me ha sorprendido su pluma de manera muy positiva. Su original técnica narrativa (nos va adelantando algunas cosas que sirven como gancho), me ha resultado muy estimulante y es que además Érika escribe más que bien y te consigue emocionar de esa manera contenida y sin dramas gratuitos, que tanto me gusta encontrar en un libro. En hielo he encontrado muchos elementos, estupendamente combinados que son para mí, sinónimo de buena lectura. Vayamos por partes: Suzanne Boucher ha vivido por y para patinar desde los seis años, de hecho es una estudiante mediocre y a sus diecinueve años esta ha sido la única constante en su vida. Residente en Quebec, patina en pareja con Tom, lo más parecido a un hermano que tiene. Por eso su sorpresa va a ser mayúscula, cuando en el momento de pasar a la máxima categoría profesional, se encuentre sin pareja y sin opciones. Eso hará que termine en San Petersburgo y se separe de todo lo que quiere y conoce para no renunciar a su sueño de patinar. Suzette (la promesa dorada de Montreal), no sabe entonces que sus problemas sólo acaban de empezar. Una tormenta de hielo, un compañero con sus propios problemas y su adaptación, no se lo van a poner nadaácil. Ella es la gran protagonista de esta historia (por eso nos la cuenta en primera persona), una luchadora con muchos recovecos, y aunque goza de un gran tesón y madurez, descubrirá muchas cosa de ella misma que desconoce Kolya y Zenya a los que pongo en el mismo pack son la pareja de Suzanne y la entrenadora de ambos respectivamente, pero Zenya es mucho más que eso, es un personaje secundario absolutamente maravilloso, madre postiza, amiga, entrenadora tirana, y muchas cosas más. De Kolya sólo os diré que se descubre poco a poco, esconde mucho, habla poco, al principio se antoja aborrecible, pero termina siendo sólido como una roca. Suzanne va a vivir un año en la fría Rusia y ese año la va a transformar en otra persona para siempre. Hielo no es una novela romántica como tal, está bastante centrada en la parte deportiva pero eso no la desmerece, todo lo contrario. Hielo es sufrimiento, sacrificios personales, momentos duros, una ambientación maravillosa en la llamada "Venecia del norte",(idioma, cultura, gastronomía, costumbres). Hielo es pasión en estado puro, los sacrificios de los padres de los deportistas de élite, nuevos comienzos, nuevos amigos, (Ex,Asia y Pasha son otros secundarios que traspasan las páginas) precariedad económica, cansancio y viajes interminables. Hielo es emoción hasta las lágrimas,noches blancas en San Petersburgo, la añoranza del emigrante y aprendizaje vital. Hielo es esa historia que querréis saber como termina y no desearéis que finalice jamás. Sólo os deseo que si le dais una oportunidad, la disfrutéis tanto como yo. Estoy segura que estará entre mis diez mejores lecturas de este año. + Leer más |