La ciudad mimética

Chusmitos, antes de nada, me gustaría decir que es uno de mis libros favoritos del año. He descubierto a una autora increíble y sobre todo, la editorial @obscuraed que cada vez me sorprende más con sus libros y es de mis favoritas 🖤.
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¿Como comenzar a hablar de un libro que me ha gustado tanto? Es una novela de ficción, pero también toca mucho el thriller policial. Y esa combinación es de lo mejor, nada malo podría pasar. Me ha sorprendido muchísimo.
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Seguimos con los personajes: Eduardo es ese protagonista imperfecto, con demonios interiores, muy humano. Me gusta que no haya sido el típico protagonista heroico con ganas de salvar el mundo. Es novedoso.
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Estuvimos haciendo una LC, pero es que desde el primer momento me costaba parar de leer, porque te mantenía atrapado desde la primera página. Un libro muy oscuro, lleno de intriga y terrores inimaginables. Mucha sangre, asesinatos y todo lo que a mí me fascina de una lectura. Me ha parecido de diez, nunca me canso de decirlo.
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Una trama espectacular. Muy bien construida y sobre todo, con un final que hace que te quedes impactado. La creatividad de la autora es increíble. No puedo escribir esta reseña sin que se me pongan los pelos de punta con solo acordarme.
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Sin duda, sobresaliente en todos los aspectos. Una novela muy completa y una documentación desbordante. No me cansaré de recomendarlo 👏🏼.
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Una novela impactante con dos partes bastante diferenciadas. La primera parte es un thriller que se centra en una ola de asesinatos cíclicos que duran ya veinte años.
En la segunda parte entramos de lleno en la parte más fantástica del libro y mi interés decayó algo en este momento. En esta parte me perdí con tanta raza extraterrestre.
El final es duro, triste.
El protagonista principal es un policía que llora la muerte de su pequeño hijo y lleva muchos años intentando descubrir la causa y los autores de los crímenes. Este personaje en concreto tiene muchos matices y domina toda la historia.
En resumen, notable historia fantástica con trazas de thriller y bien escrita. Con algunos altibajos pero con más luces que sombras.

Este libro estaba llamándome a gritos. Había leído muy buenas opiniones, sobretodo de amigos acostumbrados al género thriller, pero contar con un extra de terror ha sido lo mejor.
En un primer momento me costó entrar en la historia pero alrededor de las 80 páginas comencé a entender porque tiene tan buenas críticas y es que no es para menos. A mí parecer no debo desvelar nada de la trama ya que este tipo de historia debe leerse sin tener idea previa. Es un libro duro, con alguna que otra escena desagradable, pero si como en mi caso te gusta, adelante. Me ha sorprendido para bien. Me encantaría volver a leer algo más de la autora. Ha sido mi última lectura del año pero ha merecido la pena.
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En esta historia nos encontramos con una mezcla entre thriller y ciencia ficción.
Empieza como una novela policíaca, en donde el protagonista, el inspector Eduardo Castañeda, regresa al trabajo después de tomarse un tiempo por la muerte de su hijo. Justo vuelve a la oficina en enero, uno de los meses en donde Valencia se ve sacudida por una oleada de crímenes que tienen en vilo al mundo entero desde hace más de 20 años.
Pero de repente empiezan a ocurrir cosas que no son muy normales, y que hacen que no quieras parar de leer hasta averiguar qué está pasando.
Me ha gustado mucho esta historia, me parece muy original y muy bien hiladas todas las tramas.
El único pero que le pongo es que para mí hay demasiada narración y muy descriptiva, a veces me daba la sensación de que no avanzaba en la historia.
Aunque ha valido totalmente la pena con tal de leer semejante libro. Muy recomendable!!

Esta novela es rara. Con la sinopsis ya sabía yo que iba a ser inusual pero no me esperaba para nada esto. Es original, lovecraftiana y creo que no va a dejar indiferente a nadie.
Es difícil hablar de ella sin dar spoilers pero lo voy a intentar. Es de corte fantasioso pero comienza como un thriller: hay que resolver una serie de crímenes que se cometen de forma cíclica en Valencia.
Con esta apertura me sumerjo de la mano de Eduardo Castañeda en una novela policiaca que poco a poco se va convirtiendo en otra cosa, con una trama más estilo Lovecraft (perdonadme la repetición pero es que no se me ocurre otra cosa) que me ha encantado. Para mi, ha ido mejorando continuamente, hasta llegar a un final inmejorable, que me ha dejado con ganas de saber más. Es más, si peca de algo es de un comienzo un poco lento, casi podría decir que flojo.
Esto es debido al personaje principal. No está hecho para caer bien, Eduardo es un ser despreciable y está bien así. Los protagonistas no tienen que ser siempre los buenos. Además esta muy bien construido, tiene profundidad. Sus compañeros, aunque mucho más secundarios, dan mucho colorido a la historia y aportan luces donde hay sombra.
Mención especial a la ciudad mimética. No se me habría ocurrido lo que era realmente ni en un millón de años.
En definitiva es una novela que recomiendo mucho si quieres un libro totalmente diferente a lo que has leído hasta ahora. Pero diferente diferente

Sinopsis: Hace ya dos décadas que la normalidad de los vecinos de Valencia la marca el reloj de los llamados Ciclos. Estas extrañas olas de crímenes sacuden la ciudad dos veces al año y tienen a las fuerzas del orden completamente desconcertadas, pues, tras años recabando pistas para hallar a un culpable, estas apuntan a un asesino con un perfil de lo más disparatado. El inspector Eduardo Castañeda no recuerda un momento en el que su vida no girase en torno a los Ciclos. En su reincorporación al trabajo tras la misteriosa muerte de su hijo, y coincidiendo de pleno con el inicio de un nuevo Ciclo, Eduardo se verá envuelto en la investigación a un nivel personal con el que no contaba.

Opinión: Aunque el principio es un poco denso por el resumen que se hace de varias décadas, poco a poco la historia va tomando un cambio que te va dejando con la boca abierta.

Es agradable el paseo por las calles de Valencia a través de esta novela, aunque la ciudad se parece por los nombres de las calles que por las propias descripciones, estos detalles tienen mucha importancia en la historia.

El giro que da la trama a mitad de la novela, te deja totalmente desconcertadx pero con ganas de querer saber más, y de descubrir más detalles.
Si os gusta una mezcla de novela policiaca con fantasía, pero para estómagos fuertes, no podéis dejar escapar esta historia.

Hoy os traigo otra de las novelas publicadas por @obscuraed y escrito por @cordeliaprym que me ha encantado.

En esta historia conoceremos al inspector Castañeda, quien seis meses después de la misteriosa muerte de su hijo, se reincorpora al trabajo y justo coincide con el inicio de un nuevo Ciclo.
Los Ciclos son oleadas de crímenes que se suceden dos veces al año, siempre en las mismas fechas, siempre con la misma brutalidad. Asesinatos que son incapaces de resolver después de 20 años y a pesar de que siempre se encuentran muchas pistas en cada escenario, pero... Algo raro hay en ellos, algo que une a los distintos asesinos y que hace que todo tome un cariz poco natural...

Nos encontramos con un thriller que mezcla ciencia ficción y pinceladas de terror que me ha parecido brutal. Como sabéis, es uno de mis géneros favoritos y muchas veces cuesta que me sorprendan pero este lo ha hecho con creces y se cuela en mi top.

Una trama muy original y en la que la autora nos adentra en esa atmósfera oscura que la rodea con unas buenas descripciones y que no se queda corta en relatar perfectamente los cruentos asesinatos, quizá no apto para personas sensibles pero una maravilla para quienes disfrutamos del género.

Una historia sorprendente, con mucha intriga, angustia y diversos giros que nos mantienen en duda y expectantes desde el comienzo hasta el final. Con unos personajes muy particulares, de los que a veces no sabes si odiar o querer pero que encajan perfectamente en la trama.

En definitiva, una historia muy recomendada si os gustan este tipo de novelas pues seguro que la vais a disfrutar.

*4,25/5*

Desde hace 23 años la ciudad de Valencia se ve asolada cada seis meses por extrañas olas de violencia, de asesinatos brutales y misteriosas desapariciones. El protagonista de la historia es Eduardo Castañeda, inspector de policía que se incorpora al trabajo después de la misteriosa muerte de su hijo, coincidiendo con el inicio de una nueva ola de crímenes. Pronto empiezan a amontonarse los cadáveres, y la policía, una vez más, se ve desbordada por todos los asesinatos. Tras todos estos años de investigación la única pista que tiene la policía es que los asesinos son seis hermanos mellizos con un particular rasgo genético.

La historia combina thriller, ciencia ficción y terror. ¡Y qué bien conseguido está! Con tantos géneros distintos no sabía bien qué esperarme, pero me ha sorprendido para bien y me ha gustado mucho.

El libro empieza siendo un thriller policiaco, con Eduardo Castañeda y sus compañeros investigando los brutales crímenes. Pero pronto se ve que hay algo extraño en esos crímenes, que no son normales, pues los asesino no hacen nada para limpiar las escenas de los crímenes, pero aun así todas esas pistas no llevan a ningún sitio, así que las personas de Valencia empiezan a preguntarse si los asesinos son incluso humanos. A medida que avanza el libro se empiezan a ver toques de fantasía oscura y ciencia ficción y una vez que aparece en escena la Ciudad Mimética todo es mucho más oscuro y terrorífico. Hay mucha sangre, asesinatos brutales y otras cosas terroríficas, y os aviso que hay escenas fuertes.

Uno de los puntos fuertes de la novela es sin duda el protagonista, Eduardo Castañeda, que ya desde el principio no tienes muy claro qué pensar de él. No es el típico policía que quiere hacerse el héroe, sino que es un personaje muy complejo y más bien oscuro, con varios giros interesantes.

El libro está muy bien escrito, tiene mucha acción y la historia es muy original, con un aire muy oscuro y perturbador durante toda la novela. Me ha gustado mucho el final, lo bien hilado que está y lo bien que encaja todo. Recomendadísimo si os gustan las historias oscuras.

La muerte engendra muerte. El sufrimiento y el dolor arrinconan al valor, anulan lo mejor que hay en nosotros, y desencadenan ira y violencia. Ser testigo directo de crímenes y torturas es algo atroz, pero no comprender sus causas y, por tanto, no poder ponerles freno, es aún peor.

Cuando se dedica toda una vida a perseguir a los asesinos más despiadados, crueles y misteriosos de la historia, es fácil convertirse en alguien amargado y dañino. Si eres el hijo (y la víctima) de un policía atormentado cuyos pasos no puedes evitar seguir, corres el riesgo de convertirte en él. Pero aunque nadie duda de que el mayor deber de un padre consiste en proteger a sus descendientes, ¿podrías juzgar a quien perdiese la razón al saberse incapaz de detener el apocalipsis? Y si, por el contrario, supieses que Madre te daña, que se alimenta de ti y de tus hermanos, que te hace sufrir y que antepone sus necesidades a tu supervivencia, ¿podrías dejar de amarla?
Vivir es doloroso. Disfrutar del dolor ajeno, inhumano. No comprender, aterrador. Pero hay muchos mundos, muchas cosas que ignoramos. Y mientras no lo aceptemos, mientras intentemos medirlo todo según nuestro baremo, estaremos condenados.

El fin del mundo podría haber comenzado en cualquier momento y lugar. Pero Mari Carmen Copete decidió que fuese hace dos décadas. En Valencia.

Eduardo Castañeda es un hombre angustiado. Tras haber sufrido el abandono de su mujer y la muerte de su pequeño, decide reincorporarse al servicio activo como inspector de homicidios. Toda su vida ha estado marcada por una serie de crímenes atroces e inexplicables que se repiten cíclicamente. Después de 23 años no hay pruebas determinantes contra nadie y las pistas apuntan a seis asesinos en serie. Seis hermanos que reaparecen puntualmente los meses de enero y junio.
Los avances de la policía científica y el aumento del número de agentes no llevan a la policía más cerca de atraparles de lo que lo estuvo su padre antes de desaparecer. Pero Eduardo no tiene nada que perder. Ni tampoco ningún motivo para vivir que no sea acabar con aquella locura.

Mari Carmen Copete ha soñado con dos ciudades: una Valencia reconocible donde coexisten sus aterrorizados habitantes con adoradores de extraños cultos para los que la Cornucopia no simboliza la abundancia. Y otra aún más siniestra que, inevitablemente, recuerda a la misteriosa Orciny que Mieville inmortalizara en La Ciudad y la Ciudad. Pero esa reminiscencia se mantiene solo mientras el protagonista se desvive por descubrir la terrible verdad. Porque cuando llega hasta ella, cuando descubre la causa de las muertes, lo que la autora nos ofrece es un panorama delirante muy cercano al universo Lovecraftiano. Y es que La Ciudad Mimética es un ejercicio notable de hibridación de géneros al servicio del entretenimiento. El thriller policíaco de vocación cinematográfica se abre paso con fuerza hasta ser sustituido, con la naturalidad de quien atraviesa una puerta, por ciencia ficción oscura y perturbadora. Y esta, a su vez, desemboca en escenas dignas del más puro horror cósmico dejando en la retina del lector algunas imágenes bastante desasosegantes.

Son muchas las crueldades que contienen las cuatrocientas páginas de esta obra. Hay crímenes muy violentos, sufrimiento en cada página y sombras en el alma de muchos de sus personajes. Pero Mari Carmen Copete no se recrea en ello. Son la consecuencia (y no la causa) de un universo complejo ideado para atrapar al lector, para devolverle la tensión y el misterio que años atrás descubriese con Stephen King, para inyectarle la adrenalina que parecía patentada por Michael Crichton o el tándem Preston/Child, y para asombrarlo y repelerlo con ingenios orgánicos dignos del propio Cronemberg. Una novela que, al menos en el plano moral, no cae en tópicos y es capaz de exponer con cierta humanidad el más execrable de los crímenes.

Decidme, ¿Qué monstruo os resulta más aterrador? ¿El que viene de otro mundo, o el que todos llevamos dentro? En La Ciudad Mimética tendréis que enfrentaros a ambos.
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Dos veces al año en Valencia se suceden los Ciclos, durante esos dos meses ocurren asesinatos brutales y desapariciones misteriosas. Han pasado ya más de veinte años y la policía no tiene ninguna pista lógica.

El inspector Eduardo Castañeda se reincorpora al inicio de Enero, comienzo de un nuevo Ciclo, seis meses después de la trágica muerte de su hijo. Pero mientras investiga uno de esos muchos asesinatos y averigua datos sobre la misteriosa “ciudad mimética” descubre algo que le involucra de manera personal.

Así pues encontramos la línea de investigación policial encabezada por Castañeda, pero también por otros de sus compañeros. La historia nos cuenta todos los procesos de investigación, pruebas forenses y pistas que sigue la policía tanto en la actualidad como en los veinte años anteriores. Y como ninguno de estos pasos les ha llevado a nada en firme. Las víctimas de los brutales crímenes aparecen llenos de pistas de sus verdugos, pero estas pistas no llevan a nada.

Pronto empezamos a ver esos toques extraños, esos detalles que hacen pensar que quizá lo que esté sucediendo no sea normal, parece paranormal o sacado de una historia de ciencia ficción.

En cuanto a los asesinatos y el tono general de la novela, absteneos si sois de sensibilidad alta porque las escenas de este libro son bastante fuertes y la autora sabe como detallarlas en profundidad. Los crímenes son brutales, despiadados y crueles, de esos que te remueven por dentro. Y cuando entrevemos algo de la “ciudad mimética”, no esperéis tampoco una imagen bonita.

A través de una prosa cuidada y muy elaborada, con un vocabulario rico y variado, la autora crea una atmósfera tan real que transmite la ansiedad de estar viviendo situaciones tan duras. Además tiene una mezcla muy loable de buena documentación en cuanto al procedimiento policial y una imaginación amplia y retorcida para la trama.

Porque conforme avanza la historia vemos que el puzle va adquiriendo forma, la imagen se dibuja y al final todo encaja. Durante este proceso encontramos muchas sorpresas y giros, aunque el ritmo al principio es pausado va cogiendo fuerza mientras descubrimos más y más cosas.

En cuanto a los personajes, no esperéis un protagonista heroico ni tampoco empatizar con él, al menos no ha sido mi caso, pero esto no le resta valor al libro, creo que es justo la pieza central que necesita esta historia. Castañeda es un personaje principal con más oscuridad que luz, egoísta, cerrado, duro y más cosas, pero sobretodo muy complejo. El resto de personajes, aunque secundarios, aportan variedad y riqueza a la trama.

Sin duda es un libro que van a disfrutar los fans del género, si os gustan las historias oscuras, retorcidas y nos importa ver sangre, “La ciudad mimética” es una novela que pone los pelos de punta y se te mete en la cabeza.