A cada día su pena, a cada hora su problema.
|
A cada día su pena, a cada hora su problema.
|
Fue a acostarse sin una sola preocupación en la cabeza. En aquel momento no le apetecía en absoluto pensar en cómo debía actuar una vez a bordo del Alcyon. "A cada día su pena, a cada hora su problema", como le decía su tía, que le había hecho de madre. |
10 negritos