Fascinante Emily, escribió una novela impresionante, cargada de simbolismo y redonda de principio a fin. Su hermana Charlotte la definiría como "árida y nudosa como la raíz del brezo".
Sin duda es un clásico diferente, una novela que nada tiene que ver con las novelas que se escribían en aquella la época, por ello resulta tan sorprendente. Es una novela romántica, con inspiración gótica. Un relato oscuro y macabro, donde nos encontramos entre dos familias los Earnshaw y los Linton que viven completamente aislados en estos páramos y llenos de rencores los unos con los otros.
Para mí, lo mejor de esta novela es la ambientación. Parece que estamos en penumbra mientras leemos. El aislamiento de las familias, el paisaje, las luces y las sombras, el clima, lo son todo en la ambientación de esta novela, donde la maldad de los personajes y sus tormentosas vidas se nutren de esa penumbra, de la luna, de la nieve o el viento, provocando escalofríos en el lector, sensaciones angustiosas, inquietud y hasta miedo en algunas escenas.
Los personajes están muy bien construidos, todos tienen personalidad propia y un duro carácter marcado por la meteorología y las condiciones de vida. Yo no he podido empatizar con ninguno de los personajes, todos me han provocado rechazo, pero no podía parar de leer para saber a dónde les iba a llevar tanta maldad y cuándo iban a parar de tenerse rencor, un rencor que está tan enquistado que incluso pasa de generación. al final me daban pena los personajes, porque están todos tan focalizados en sus rencores hacía los demás que no se permiten ser felices.
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