El último argumento de los reyes

No voy a entrar en detalles de la trama para no hacer spoilers de los libros anteriores. Pero os comento que es el que más me ha sorprendido.

En este libro he sentido que los personajes se quitan la máscara que llevaban mucho tiempo vistiendo. Vemos juegos de poder en su máximo esplendor y cómo todo estaba pensado y dirigido a un final específico.

En éste, más que nunca, se ve cómo el autor juega con la psicología de los personajes y con nuestras mentes, llevándonos a un final que te deja con la boca abierta y un regusto agridulce. Este libro es puro Grimdark, no esperéis una historia con final feliz, es una historia oscura, cruenta y con unos personajes grises, que aceptan sus defectos y crueldades, llegando a la conclusión de que hay cosas que no cambian y pasados que no se pueden borrar.

En el momento que empiezas este libro tienes la sensación de que va a ser como los otros dos, aventuras y personajes de moral dudosa, así como ingeniosos. Pero a medida que avanzas, el tono de la historia va oscureciendose y la atmósfera se va viciando; vas viendo como los personajes se dirigen a un final que no esperabas y cómo, como dije antes, los verdaderos artífices de la historia se desenmascaran, eliminando de un plumazo la imagen que tenías de ciertos personajes.

Me ha parecido una maravilla de trilogía en general y de final en particular. Es una historia que te dice: "eh, no se te ocurra relajarte, que queda tela por cortar" y, cuando te parece que ya sabes de qué va la cosa, va el autor y te da un guantazo de realidad que te deja la cabeza del revés.

Aunque siempre había tenido curiosidad por este autor, no me animaba a leerlo y pensaba: "no será para tanto"... Si pudiera ir atrás en el tiempo me daría una buena colleja por pensar eso. Me he alegrado mucho de leer por fin a Abercrombie y ya estoy continuando con las historias cortas ambientadas en el mundo de la Primera Ley.

Esta trilogía me ha parecido súper interesante, además de que me encanta la forma de escribir del autor, que me hace querer seguir leyendo incluso en partes que para mí son más áridas (batallas largas) La he disfrutado mucho.

Si esta última parte no ha llegado a las cinco estrellas ha sido sencillamente porque este libro está plagado de batallas, y aunque a veces me gusta leerlas (hay muchas que me han encantado), cuando hay demasiadas a veces me acabo cansando un poco de leerlas. Pero esto es mera preferencia personal. Otra cuestión que ha influido ha sido que el final se me ha quedado un poco cojo, por tramas que se podrían considerar abiertas con respecto a algún personaje, dejándome la incertidumbre y no dándome esa sensación de final cerrado y rematado.

Por lo demás, me encanta cómo se aborda a cada personaje, su evolución, su comportamiento y su personalidad. Personalidades muy reales, con flaquezas y rasgos de carácter de los que uno no se enorgullecería o sobre los que sencillamente no se tiene poder. Aunque desolador, me ha parecido una representación muy buena de las luchas internas por la que pueden pasar (y pasan) las personas. Encima en un mundo muy oscuro.
El tono general es muy grimdark. No hay héroes, y los supuestos son más villanos que héroes. Pero en realidad ¿qué los diferencia? Es una pregunta que se nos plantea a lo largo del libro. Repito, el trabajo de personajes es maravilloso. Y aunque todo suene desalentador, siempre hay una chispa de esperanza por aquí y por allá.

En este último libro también vemos desvelados ciertos misterios que se planteaban en los libros anteriores, o sobre los que se daban pistas sutiles, y que nos llevarán poco a poco al desenlace y a entender cosas que quizá no acababan de encajar antes.

En fin, sin querer desvelar nada, solo decir que es un buen final para la trilogía, una muy buena trilogía, en la que se ahonda en personajes que a priori pudieran parecer estereotipados (el guerrero, el mago, el aprendiz, el caballero, etc) pero que no lo son en absoluto, con una trama de fondo que me ha gustado mucho, salpicada, eso sí, de muchas batallas (la guerra está siempre presente) y de grises, muchísimos grises.
Totalmente recomendada.

Este tercer libro, comienza justo donde acabó el segundo, por lo tanto, el lector no se pierde en el tiempo. Hay personajes que, después de un largo e interesante viaje, regresan a casa, sólo que el hogar a cambiado de tal forma que les puede llegar a resultar un tanto diferente, especialmente después de todo lo que vieron y vivieron en sus viajes.

Lo que más cambia es la situación política, y sólo es el comienzo de lo que vendrá después. Todos ellos se verán envueltos en enredos, conspiraciones, traiciones, guerras…

Muchos de los personajes son simples títeres de una obra, pero ¿quién es el titiritero?



Si dividiéramos este libro en tres partes, la última, como no puede ser de otra forma, es la más adictiva, la que te hace devorar sus páginas sin parar (y sólo paras porque la vida real te obliga).



Una historia donde los bueno no son tan buenos y los malos no son tan malos, donde todos esconden secretos, todos han tenido un pasado, más oscuro o menos. Unos con más corazón que otros y muchos de los personajes te llegan a sorprender hasta el final. Una historia llena de cruentas batallas, magia, horrores, torturas… Escenas crueles y duras (pero no os alarméis, no resultan difícil de leer)

RESEÑA COMPLETA EN EL BLOG:
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Después de casi un mes de lectura, con esto del aislamiento no tenía muchas ganas de leer esta novela en particular, la he terminado. Casi 900 páginas de sangre, violencia, guerra e intrigas.
Me ha gustado mucho el último tercio del libro, esas últimas 300 páginas las he devorado, pero se me ha hecho en muchos momentos terriblemente lento.

Creo que mi favorito de la trilogía fue el primer libro, el segundo me dejó con sabor amargo y este tercero... quizá también. Las escenas de guerra y de lucha hay que reconocer que se le dan de muerte (nunca mejor dicho) a Joe. Quizá incluso se pasa un poco de macabro pero estamos aquí por la sangre y por los magníficos personajes que es lo que destaca del autor. Glokta sigue siendo, con diferencia mi personaje favorito de toda la trilogía, aunque hay varios personajes que te llegan al corazón. Las sorpresas (muchas de ellas bastante predecibles) no han estado mal. La del final me pilló totalmente por sorpresa y no queda otra que aplaudir al autor. Sin embargo el final me ha dejado un poco a medias. Ya me pasó con el libro anterior, aunque más bien fue el sabor amargo que antes comentaba, pero en este esperaba que todo terminase de una forma diferente. No se puede contentar a todos los lectores, supongo.

Fin de la Trilogía.

En este final del camino, no hay página del libro que no muestre la crueldad de la guerra, las luchas de poder y esté manchada de sangre, sudor o lágrimas.

Me ha fustado el hecho de que no hay final feliz para todos los protagonistas: cada uno tiene lo que se ha ido ganando paso a paso, o lo que otros le han ido preparando. Unas veces más agradable, otras menos.

Y para mi gusto, como en las entregas anteriores, Glokta y Logen destacan por encima del resto de personajes en cuanto a personalidad.

Logen Nuevededos vuelve al norte para combatir con el ejército de la Unión contra Bethod y sus tropas, quien se ha autoproclamado rey del Norte. Jezal dan Luthar vuelve a la ciudad para disfrutar de un descanso y buscar el amor de Ardee tras su largo viaje, pero Bayaz, el primero de los magos, no se lo va a consentir, pues sigue buscando la Semilla. Será también este quien proponga a Ferro Maljinn su ansiada venganza. Todo esto con Sand dan Glotka, superior de la Inquisición, enfrascado en una trama política llena de peligros en la capital.

Los personajes de esta parte siguen siendo muy carismáticos y dinámicos y con una excelente evolución. Esta tercera parte es un final asombroso a una trilogía. Contiene muchos giros argumentales que cambian los caminos que la trama estaba tomando.

El mundo creado por Abercrombie está muy cuidado y sumamente detallado, con un complejo entramado político lleno de intrigas. Abercrombie coge las características y los clichés de la alta fantasía o fantasía épica para darles su toque particular y único, dándole la vuelta a todo. En este tomo se cierran todas las tramas y subtramas planteadas en el primero, aunque la historia de los personajes va a continuar en otros libros.

El volumen es denso, el que más de los tres, pero es una novela que atrapa desde el inicio. Las descripciones que hace Abercrombie sin brutales, te meten de lleno en la trama como un espectador y te va a transmitir muchos sentimientos. Además, describe escenas vivas, realistas a más no poder, muy dinámicas e intensas, especialmente con las batallas. Recuerdo que esta novela se enmarca en el grimdark, fantasía oscura, y hay algunas escenas un poco gore y con un humor muy negro. Se nota bastante la madurez que ha tenido el autor con respecto al primer libro. Una trilogía que se convierte en necesaria para los amantes de la fantasía.
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