Un lugar demasiado tranquilo

Viajamos al barrio de Hollow's Edge en Virginia para conocer el caso de Ruby Fletcher, una mujer que fue condenada a veinte años de cárcel tras ser acusada de quitarle la vida a un matrimonio vecino con monóxido de carbono.

La trama comienza cuando Ruby sale de la cárcel catorce meses después del suceso, algo que llama la atención de todo el vecindario. No confían en su inocencia, ellos mismos la acusaron con ayuda de las cámaras de vigilancia y declararon en su contra en el juicio.
Harper, su compañera de piso es la que más está sufriendo las consecuencias de su regreso ya que Ruby ha llegado para quedarse.
¿Cual es el motivo de que su condena se haya recortado? ¿Que intenciones tiene?

La trama comienza apresurada, sin entrar en mucho detalle de primeras la autora nos presenta a todos los vecinos especialmente a Harper que es desde mi punto de vista el personaje principal.

Los capítulos no son largos pero llega un punto que la lectura me ha resultado monótona. Los pocos giros que tiene están cogidos con pinzas a la par que previsibles por lo que el factor sorpresa ha estado ausente durante toda la novela.

Con respecto a los personajes, no he conseguido empatizar con ninguno. Además la autora utiliza un recurso bastante común en otras novelas que a mí personalmente no me gusta, ya que pienso que es porque no sabe como sacar del lío en el que ha metido a un personaje... (No quiero hacer spoilers)

Cómo decía, la lectura se me ha hecho cuesta arriba y con respecto al final ha sido tan previsible como esperado... Lo que no se puede negar es que el título está perfectamente elegido.

¡Hola lectores!
La Agatha Christie moderna, eso es para mi Megan Miranda. Todas sus novelas guardan historias llenas de misterio, suspense y ocurren en lugares pequeños, cerrados, en los que el asesino se encuentra entre alguno de ellos.
La leí por primera vez en “El último invitado” y me enamoré de su manera de escribir y de la ambientación que logra en cada una de sus novelas.

En esta ocasión, conviviremos con los vecinos de Hollow's Edge, un lugar muy tranquilo en el que todos los vecinos se conocen bien, o eso es lo que ellos creen. Pero la paz de tan idílico lugar queda rota con el asesinato de un matrimonio, asfixiados en su propia casa, y con el regreso de Ruby, la supuesta asesina que todos ellos condenaron, después de que nuevas pruebas anularan su condena.
Ruby regresa a la casa de su amiga Harper dispuesta descubrir la verdad y a destapar al verdadero asesino que aún se encuentra entre ellos.

Es la propia Harper la que nos irá narrando los acontecimientos y, a través de sus ojos, viviremos con el miedo del regreso de Ruby. ¿Será de verdad inocente? y, si así fuera, ¿a qué ha venido?, ¿quizás a vengarse de todos ellos?

Es maravilloso como Megan Miranda nos va presentando cada uno de los vecinos y como logra crear un ambiente lleno de sospechas y que resulta ser asfixiante. Todo ocurre en un lugar de lo más normal y cotidiano, haciéndolo totalmente real y cercano.
Una trama llena de detalles, me ha gustado el inicio de cada capítulo con los fragmentos del chat de los vecinos.

En conclusión, una historia de venganza y de lo que son capaces algunas personas con tal de mantener ocultos sus secretos. Un vecindario con una tranquilidad y seguridad aparentes a la que nos traslada magistralmente la autora.
Una novela súper recomendable si te gusta el misterio y el suspense.

Este thriller gira entorno a una mujer, Ruby, que acaba metida en la cárcel por un crimen que dice no haber cometido. Consigue salir y vuelve a donde vivía, en el barrio de siempre, para buscar al culpable real y vengarse de todos los vecinos que mintieron para inculparla. Harper, su mejor amiga, tiene que aceptarla de nuevo en su casa sin saber porqué ha vuelto y nos irá narrando todo lo que ocurre entre estos vecinos que tienen demasiado que esconder.

La historia es bastante entretenida y me parece una premisa genial, vas dudando todo el tiempo de quién serían los que mataron a la pareja de vecinos, si sería Ruby o fueron otros. Poco a poco, se van desvelando secretos que te van sorprendiendo y es que madre mía, varia vecindario. Todos aparentan normalidad pero es una locura todo lo que entierran en sus huertos jajaja

Es un libro entretenido, con un final que te sorprende y con varios giros geniales. Venganza, mentiras, asesinatos y mucho suspense hasta el final.

En este libro conoceremos a Ruby Fletcher, una chica que fue acusada de la muerte de sus vecinos, los Truett. Pero catorce meses después, Ruby es puesta en libertad por falta de pruebas y regresa a Hollow's Edge, a casa de su amiga Harper. ¿Por qué ha vuelto Ruby a la escena del crimen? ¿Qué busca? ¿Qué esconden los vecinos de este tranquilo barrio? Porque éramos buenas personas con malas intenciones. O malas personas con buenas intenciones.

Con vibes a “Big Little Liars” y “Mujeres Desesperadas”, la escritora nos trae un thriller psicológico, donde las apariencias, las mentiras y las amenazas estarán muy presentes. Ruby, tan cautivadora e impredecible, no cejará en su empeño por resolver este crimen; pero nadie se fía de ella, ni siquiera su amiga Harper.

Sospechas, giros inesperados y unos vecinos que parecen ocultar muchas cosas, en un libro para fans de Agatha Christie.

Un final sorprendente, muchos plot twists, una ambientación angustiosa y una pluma fascinante y adictiva, en una lectura la cual he disfrutado mucho. Un plus que nos da la autora es que cada inicio de capitulo es un chat entre los vecinos. ¿Os atrevéis a adentraros en la tranquila Hollow's Edge?

Os dejo una de las frases que más me han gustado: “Nos imaginamos jueces y jurados, protectores de nuestra comunidad. Nos convertimos en monstruos y, a partir de ahí, en asesinos. Nos convertimos en lo mismo que temíamos”.

Hollow's Edge es una urbanización privada, cerca de la naturaleza y de la universidad, donde la mayoría de sus residentes trabajan. Disponen de un nivel de vida aceptable y todos ellos conviven en comunidad celebrando numerosas actividades conjuntas. Salvo los Truett ellos nunca se adaptaron. Ruby Flecher, una de las jóvenes vecinas, terminó premeditadamente con su vida en un cruel asesinato. Todos se unieron en su contra. Pero un año después han anulado su condena. Todos la mandaron a la cárcel declarando en su contra. Y ahora ella ha vuelto insistiendo en su inocencia. Eso quiere decir que entre ellos hay un asesino escondido. Y que Ruby tiene sed de venganza.

Un domestic noir abrumador por la inquietud que despierta, ¿Cómo en una comunidad tan consolidada puede haberse cometido un asesinato tan cruel? Estos vecinos tienen mucho que esconder, y gracias a la pluma de la autora nos sentiremos uno más y acabaremos desconfiando de todos. Eso sí, darle tiempo para situar todos los personajes, son bastantes, por suerte hay un mapa para ayudarnos.

Harper es la narradora, ella es la compañera de piso de Ruby, nadie mejor para contarnos que ocurrió la fatídica noche. También es ella quien la recibe de vuelta a casa, y consecuentemente, quien deberá volver a integrarla. Todo son tensiones, nadie sabe muy bien con qué intención ha vuelto Ruby, ¿Quiere redimirse? ¿Les dará alguna explicación? ¿Quiere vengarse? El suspense solo hace que aumentar con los días que pasan y ella sigue allí.

Con una ambientación excelente la autora hace que la naturaleza sea una protagonista más, la zona residencial está rodeada de bosque, de quietud y silencios que hacen aún más palpable el miedo. Hay un lago, demasiado fácil deshacerse allí de las pruebas. Y una piscina comunitaria que los obliga a socializar entre ellos, incluso cuando quieren esconderse.

Una obra perfecta para leer en un par de tardes, aunque debo confesaros que el final no me ha convencido, me ha faltado desarrollo algunas partes y credibilidad en otras.
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