Una llama en las cenizas de Sabaa Tahir
Hay dos tipos de culpa. La que es una carga y la que te da un propósito. Que tu culpa sea tu motivación. Deja que te recuerde quién quieres ser. Traza una línea en tu mente y no la vuelvas a cruzar. Tienes alma. Está dañada, pero está ahí. No permitas que te la quiten, Elias.
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