Cómo escribí nuestra historia de Elísabet Benavent
Hay rincones a los que los amigos no llegan. Ni nosotros mismos. Ni la familia. Hasta para rascarte la espalda necesitas otra mano. |
Cómo escribí nuestra historia de Elísabet Benavent
Hay rincones a los que los amigos no llegan. Ni nosotros mismos. Ni la familia. Hasta para rascarte la espalda necesitas otra mano. |
Un cuento perfecto de Elísabet Benavent
—Que es de los que te hacen reír, Margot — ¿Y? Eso es bueno, ¿no? —No. —Sonrió con pena—. Esos son los que no se olvidan nunca. |
Seremos recuerdos de Elísabet Benavent
Hay personas con las que el destino, sin saber por qué , no funciona.
|
Seremos recuerdos de Elísabet Benavent
Si tienes que decidir con prisas, la respuesta debería ser siempre no.
|
Cómo escribí nuestra historia de Elísabet Benavent
Escribimos para entender lo que nos pasa, ¿no? Es la única forma que conocemos de curarnos.
|
Seremos recuerdos de Elísabet Benavent
Y de pronto te das cuenta de que , catorce o quince años mas tarde , sigues sin quererte lo suficiente a ti misma como para no tener miedo y dejar de pedir perdón por todo. No tienes respuesta para muchas cosas que ya te preguntabas entonces y te das cuenta de que hace tiempo que dejaste de interrogarte sobre otras.
|
|
Cómo escribí nuestra historia de Elísabet Benavent
Yo no quiero que dependas de mí para quererte a tí misma ni para nada más. Yo quiero que me escojas.
|
Fuimos canciones de Elísabet Benavent
El amor viene y va. Las personas vienen y van. Hasta que de vez en cuando la chispa perdura. Y eso, eso es lo complicado. Que un amor dure siempre, que no se vaya , que se quede ardiendo sin importar cuanto tiempo pase.
|
Los abrazos lentos de Elísabet Benavent
En la era de la inmediatez, en el momento histórico en el que más conectados estamos pero más solos nos sentimos, es la palabra una vez más, lanzada al vacío de la red, lo que nos une de una manera que es difícil de explicar.
|
Los abrazos lentos de Elísabet Benavent
Las palabras, además, siempre han sido para mí un billete que invita a viajar a cualquier realidad imaginable.
|
Los abrazos lentos de Elísabet Benavent
Las palabras siempre me han salvado de morir ahogada en la piscina de lo que me falta. Porque escribiendo, mastico lo que me pasa, porque escribiendo imagino realidades lejanas, porque escribiendo me analizo y me entiendo. Me mido, me abrazo, me calmo. Las palabras son para mí, un salvavidas, un modo de vivir, un puñado de abrazos lentos.
|
Cómo escribí nuestra historia de Elísabet Benavent
Ojalá pudiéramos querer siempre a quienes nos quieren tal y como se merecen, pero solo somos humanos y el amor es cuestión de suerte.
|
El arte de engañar al karma de Elísabet Benavent
-[…] Los sueños no están ahí para frustrate en caso de que no conseguirlos, sino para hacerte sentir realizada, para crecer... No son una caña que se rompe si las ráfagas del viento soplan muy fuertes, sino un junco que se mece con la brisa.
|
Cómo escribí nuestra historia de Elísabet Benavent
No hizo nada. Y no hacer nada, dejar que la vida siga su curso, es la forma más efectiva de matar el amor. Incluso el propio.
|
Cómo escribí nuestra historia de Elísabet Benavent
Cuando una relación termina, la persona de la que nos despedimos es un poco quien nos enamoró y también forma parte de quien eres ahora. De modo que... sigue siendo a quien amaste y ahora es un poco de ti. Creo que se puede romper bonito y dejar que esa persona marche libre, sin fantasmas, para curarse y volver a enamorarse.
|
Cómo escribí nuestra historia de Elísabet Benavent
A veces tienes que romperte del todo para saber que hay una grieta que reparar.
|
La magia de ser Sofía de Elísabet Benavent
Cuenta una leyenda oriental que nacemos con un hilo rojo atado a uno de nuestros dedos y en cuyo otro extremo se encuentra la persona con la que estamos destinados a compartir la vida. Este hilo no desaparece y no le afecta el tiempo ni la distancia. Da igual si el hilo se enreda un poco y tardas en conocer a esa persona porque puede estirarse, es paciente y no se rompe. Te acompaña desde tu nacimiento a lo largo de toda la vida e irremediablemente te lleva a tu destino.
|
Seremos recuerdos de Elísabet Benavent
no estamos condenados por quiénes éramos cuando erramos. Somos mucho más que los aciertos y las equivocaciones que cargamos. Sin importar qué fuimos, somos y en el futuro seremos. Total, aceptémoslo, de lo único que estamos seguros de ser algún día es pasado. Seremos recuerdos de otros. Pintémoslos de colores, de modo que no nos olviden y que el amor nos sobreviva.
|
Seremos recuerdos de Elísabet Benavent
Pero hay cosas que tienes que escuchar de boca de un desconocido para creértelas.
|
¿Qué medida tomó el profesor Snape para proteger la Piedra Filosofal?