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El laberinto de los espíritus de Carlos Ruiz Zafón
Un padre nunca ve envejecer a sus hijos, y a sus ojos siempre se aparecen como aquellos niños que un día le miraban con veneración, convencidos de que tenía las respuestas a todos los enigmas del universo.
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El laberinto de los espíritus de Carlos Ruiz Zafón
Los juramentos eran un poco como los corazones: roto el primero, los demás resultaban pan comido.
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La sombra del viento de Carlos Ruiz Zafón
Cada libro que vez aquí, tiene un alma, el alma de quién lo escribió el alma de quienes lo leyeron y vivieron con el
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La sombra del viento de Carlos Ruiz Zafón
Para cuando la razón es capaz de entender lo sucedido, las heridas en el corazón ya son demasiado profundas.
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Marina de Carlos Ruiz Zafón
A veces las cosas más reales sólo suceden en la imaginación. Sólo recordamos lo que nunca sucedió.
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La sombra del viento de Carlos Ruiz Zafón
Quien quiere de verdad quiere en silencio, con hechos, nunca con palabras.
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Las luces de septiembre de Carlos Ruiz Zafón
(...) el futuro apenas deparaba para ambos más que la perspectiva de una simple amistad. Una profunda amistad. Un puente invisible se alzó entre dos mundos que se sabían separados por océanos de recuerdos.
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Las luces de septiembre de Carlos Ruiz Zafón
(...) no valía la pena perder el tiempo en intentar cambiar el mundo; bastaba con evitar que el mundo lo cambiase a uno.
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El prisionero del cielo de Carlos Ruiz Zafón
“A lo mejor si me pusiera yo a decorar el escaparate en calzoncillos conseguiríamos que alguna fémina ávida de literatura y emociones fuertes entrase a hacer gasto, porque dicen los entendidos que el futuro de la literatura depende de las mujeres, y vive Dios que está por nacer fámula capaz de resistirse al tirón agreste de este cuerpo serrano”. (Fermin Romero de Torres) |
El palacio de la medianoche de Carlos Ruiz Zafón
«La verdadera diferencia es que, mientras los hombres tienen el estómago mucho mayor que el cerebro y el corazón, el corazón de las mujeres es tan pequeño que siempre se les escapa por la boca».
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El palacio de la medianoche de Carlos Ruiz Zafón
—Ben deplora el ajedrez —explicó Ian—. Según él, es la segunda forma más inútil de desperdiciar la inteligencia humana. —¿Y cuál es la primera? —preguntó Sheere, divertida. —La filosofía —respondió Ben desde su atalaya. |
El palacio de la medianoche de Carlos Ruiz Zafón
(...) normalmente se permite a los muchachos vivir en la ignorancia del verdadero rostro del mundo hasta bien entrada la juventud (...)
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El príncipe de la niebla de Carlos Ruiz Zafón
En un universo infinito, había demasiadas cosas que escapaban a la comprensión humana.
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El príncipe de la niebla de Carlos Ruiz Zafón
La edad te hace ver ciertas cosas. Por ejemplo, ahora sé que la vida de un hombre se divide básicamente en tres períodos. En el primero, uno ni siquiera piensa que envejecerá, ni que el tiempo pasa ni que, desde el primer día, cuando nacemos, caminamos hacia un único fin. Pasada la primera juventud, empieza el segundo período, en el que uno se da cuenta de la fragilidad de la propia vida y lo que en un principio es una simple inquietud va creciendo en el interior como un mar de dudas e incertidumbres que te acompañan durante el resto de tus días. Por último, al final de la vida, se abre el tercer período, el de la aceptación de la realidad y, consecuentemente, la resignación y la espera.
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El príncipe de la niebla de Carlos Ruiz Zafón
(...) supo, probablemente antes de que ellos mismos lo advirtieran, que entre ambos se estaba forjando un estrecho lazo que habría de unirles como un destino irrebatible durante aquel verano.
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El palacio de la medianoche de Carlos Ruiz Zafón
"Hubo un tiempo en mi vida en que creí que nada tenía más fuerza que el amor. Y es cierto que la tiene, pero su fuerza es minúscula y palidece frente al fuego del odio."
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¿Quién es autor del libro?