Una educación

La persona en que te conviertas, la persona que llegues a ser, es quien siempre ha sido. Ha estado en ti desde el principio. Es posible que cambie la manera en que te ven los demás y aún la manera en que te ves a ti misma

No era más que una mujer de clase trabajadora con un vestido bonito. Hasta que creyó en sí misma. Entonces no importó el vestido que llevaba puesto.

Podéis llamarlo transformación,
metamorfosis, falsedad, traición. Yo lo llamo una educación.

Mi vida la narraban otras personas, sus voces eran persuasivas, enfáticas, categóricas. No se me había ocurrido pensar que la mía podía ser igual de fuerte que las suyas.

Shawn tenía más poder sobre mí del que era capaz de imaginar. Me había proporcionado una definición de mí misma, y no existe un poder mayor que ese.

porque retener el poder siempre parece la opción ganadora.

Mi padre contaba una historia acerca del pico, antiguo y grandioso como una catedral. Si bien en la cordillera había otros más altos e imponentes, Buck’s Peak era el de factura más bella. Con una base que se extendía un kilómetro y medio, su masa oscura surgía de la tierra y se elevaba para formar un chapitel perfecto. Desde cierta distancia se distinguía la huella de un cuerpo femenino en la cara de la montaña: las enormes quebradas constituían las piernas; el pelo era un conjunto de pinos dispuestos en abanico sobre la cresta septentrional. Su actitud era imperiosa, con una pierna adelantada en un movimiento vigoroso, más una zancada que un paso.

Podéis llamarlo transformación. Metamorfosis. Falsedad. Traición.
Yo lo llamo una educación.

Es extraño que des a tus seres queridos tanto poder sobre ti.

El mayor factor determinante de quien eres se encuentra dentro de ti