Hora De brillar

Hacía bastante tiempo que quería leer El odio que das, su anterior libro, sobre todo debido a las buenas críticas que escuchaba de él y de la forma de escribir de la autora, pero tuve la oportunidad de conocerla gracias a este nuevo libro y la verdad es que la experiencia ha sido positiva y sigo teniendo ganas de leer su anterior libro.

En esta ocasión la autora nos mete de lleno en el mundo del rap, el hip hop y todo lo que gira a su alrededor, tanto lo bueno, como lo malo. A mí es algo que me gusta bastante, ya que lo escucho desde que era adolescente, así que no me ha parecido pesado. Pero si lo comento es porque quizás, si no te gusta ese mundo, no disfrutarás del libro todo lo que gustaría y te podrías llevar algo de decepción porque tiene bastante peso en la historia.

Bri sueña desde pequeña en ser cantante de rap y es su máxima aspiración en la vida. No ha tenido una vida fácil, ya que su padre fue asesinado y su madre se metió en el mundo de las drogas, todo ello mezclado con que vive en un barrio marginal donde las peleas están a la orden del día y que el dinero escasea.

Para colmo, la vida en el instituto no es un camino de rosas ya que le hacen la vida imposible todo lo que pueden y más. Pero también tiene amigos que la ayudan y que no cejan en ayudarla todo lo que pueden. Pero Bri no sabe que su vida dará un vuelco cuando una de sus peleas de gallos se haga viral y quizás no sea para bien, sino todo lo contrario...

Como os decía más arriba, es un libro que me ha sorprendido gratamente y que trata temas difíciles que la autora ha querido denunciar mediante esta historia. Bri es una protagonista que me ha gustado, ya que no ceja en su empeño de hacer lo que quiere, pero sobre todo porque no lo tiene nada fácil.

Los secundarios también me han gustado mucho, aunque la verdad es que a veces me ha faltado algo de profundización en ellos. Pero tengo que destacar a la tía de Bri: Pooh, ya que me ha parecido una mujer que más que su tía es su apoyo moral y me ha gustado mucho.

Pero hay cosas en el libro que me han fallado, sobre todo a la hora de la traducción. Entiendo a la perfección que se ha querido sacar el libro en un idioma neutral tanto para España como para Latinoamérica, pero a veces me daba la sensación de que el libro estaba traducido palabra a palabra y a la hora de leer eso me sacaba en muchas ocasiones de la historia. Aun así creo que la autora nos muestra lo difícil que es ser mujer y querer triunfar en una "carrera de hombres" y me quedo con eso y con los personajes del libro.
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Os quiero hablar de Hora de Brillar un libro que no te deja indiferente. Su autora Angie Thomas es conocida ya por el gran éxito de su primera novela nos ofrece esta vez con un ejemplar sorprendente. Y ¿porqué digo sorprendente?...
Por su forma de escribir. Utiliza una estructura poco común y es que además de una clara división de inicio, nudo y desenlace, introduce letras de canciones a ritmo de hip hop. Si bien en un primer momento puede descolocar un poco, no cuesta llevar el ritmo de lectura.
Está catalogado por la editorial como una novela contemporánea, juvenil, realista. Discrepo en lo de juvenil porque si bien la acción transcurre en un instituto, tiene unas enseñanzas que da igual la edad que tengas porque te hace reflexionar.
Con gran ingenio te muestra un mundo que conocemos a la distancia, los suburbios de los barrios negros y como una adolescente lucha (por conseguir un sueño) contra un sistema que está tan establecido que sólo por su color de piel, lo tienen realmente difícil para sobrevivir.
Quiero contaros un párrafo que deja claro lo que significa ser negro hoy en día.

" Cuando vamos a un lugar del vecindario tenemos que cumplir las reglas. Son implícitas, pero claras:
Si entras en una tienda, mantén las manos fuera de los bolsillos y de la mochila. No les des un motivo para pensar que estás robando.
Siempre di *señora o señor * y siempre mantén la calma. No des un motivo para que piensen que eres agresivo.
No entres a ningún lugar a menos que planees comprar algo. No les des motivo para que crean que estás causando una distracción.
Si te siguen por la tienda, mantén la calma. No les des motivo para que piensen que tramas algo
Básicamente, no les des motivos. Punto.

He de destacar la importancia que le da a la palabra y las diferentes interpretaciones que puede tener. Es una buena forma de explicar el alcance que puede tener.
Uno no tiene nada en común con la protagonista pero las vivencias que relata hace que logre emocionarte hasta las lágrimas. Los diferentes personajes presentan valores con los que es muy fácil identificarse. Los momentos de tensión hacen que se te erice la piel. Y como siempre digo si un libro consigue eso, es un buen libro.
Es una lectura fresca y actual que no deja de tener momentos dramáticos que lo dotan de gran realismo.
Me ha encantado y le doy ⭐⭐⭐⭐

Desde que leí la trama de esta novela quise hacerme con ella, y es que, como habéis podido leer en la sinopsis, el argumento promete mucho, y la verdad es que la realidad lo ha superado y ha resultado ser un libro que me ha transmitido tanto, que no podía dejar de leer y ahora os contaré por qué.

En esta historia conoceremos a Brianna, una chica que va al instituto y cuya pasión es el rap. Su padre fue toda una leyenda del hip hop, pero fue asesinado y su madre, Jay, cayó en el temido mundo de las drogas, por lo que durante un tiempo estuvo al cuidado de sus abuelos tanto ella como su hermano, pero tras rehabilitarse volvieron con ella.

Viven en un barrio marginal donde las peleas entre bandas están a la orden del día, y tienen muchos problemas económicos. La verdad es que este ha sido uno de los puntos del libro que más me han conmovido, porque la autora te lo va contando de tal manera que es imposible no emocionarse, dándole un gran toque de realidad y dureza a esta historia.

Además, en el instituto de Bri, hay algunos compañeros que son unos auténticos abusones y matones, y siempre están intentado hacerle daño. Lo bueno es que también tiene compañeros buenos, amigos de los de toda la vida que son parte de los pilares de su vida. También tiene una relación especial con su tía Pooh, siendo su apoyo incondicional y quien la acompaña al ring para dar rienda suelta a su talento.

Tras ganar un combate en el ring, el que fue representante de su padre, anima a Bri a subir un video con un tema que ha compuesto, y a pesar de que a su tía no le termina de convencer, acaba subiéndolo, y a partir de aquí la fama empieza a crecer y comienza a suceder muchas cosas que no os dejarán indiferentes, pero ya no os digo nada más para no destriparos el libro.

Solo deciros, que es una historia muy realista por todos los temas que se exponen a lo largo de las páginas. Y que son situaciones muy duras a la que se tiene que enfrentar nuestra protagonista, haciéndonos sufrir mucho durante toda la lectura. Ya sabéis que me encantan las novelas que me remueven sentimientos y esta lo ha hecho y con creces.

La novela consta de 407 páginas estructuradas en tres partes y un total de 34 capítulos y un epílogo. Está narrado en primera persona por Bri, que nos va contando su historia. Es muy fácil empatizar con ella y con sus ganas de salvar a su familia de la pobreza en la que están sumidos, y como irá saltando las piedras que la vida le va poniendo por el camino.

Además de toda esta parte dura y sentimental de la historia, es de admirar las rimas que ha sacado para los raps la autora y la importancia que le da a la amistad y a las ganas de superarse.

En la traducción hay algunas palabras latinoamericanas, pero sinceramente es algo que a mí no me ha molestado porque lo entendía absolutamente todo, probablemente porque veo novelas y series latinas.

Para mí esta autora ha sido todo un descubrimiento, me ha encantado su narración, así como el ritmo que le ha dado a la trama y la evolución del personaje de Bri, que le ha hecho madurar paso a paso.

En resumen, os diré que es una novela urbana, realista y maravillosa y cuya lectura os recomiendo, sin duda alguna.
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Brianna "Bri" Jackson, de 16 años, ha canalizado todo su anhelo en un sueño ferviente: alcanzar el estrellato del rap. Ella cree en ello con tanta certeza como puede contener un corazón. El recuerdo de Bri de su difunto padre, un legendario rapero clandestino que fue asesinado a tiros por una pandilla rival cuando Bri tenía 12 años, siempre ha sido como sombras revoloteando por el rabillo del ojo, pero el sueño de Bri siempre llevó a su fantasma a estar a su lado. Bri ha mantenido esa esperanza en un desesperado control mientras su madre viuda, una drogadicta que llevaba ocho años limpia, se gana la vida con un sueldo de secretaria de la iglesia, y su hermano mayor trabajaba en un trabajo de salario mínimo después de años estudiando para obtener su título universitario. Y Bri sabe que una carrera en el rap podría cambiar el rumbo de la vida de su familia. No habría más días grises en los que tuvieran que elegir entre la electricidad y el gas. Sin embargo, todo cambia después de un incidente en el que Bri es atacada violentamente por un guardia de seguridad de su instituto, creando canciones donde las letras arden brillantes como yesca en su mente, iluminando los rincones oscuros. Bri habla de su creciente frustración por ser discriminada por ser negra, de su ambición incontinente, de la situación financiera de su familia. Y la canción de Bri pronto se vuelve viral, lo que no hace más que empeorar las cosas. Pero la fuerza y ​​la resolución de Bri son muy profundas. Porque el camino por el rap es arduo, pero las maravillas del mundo se desenrollan como una alfombra ante ella... y el futuro es suyo.

Hace ya como tres años que leí a Angie Thomas, enamorándome de su pluma irremediablemente. El odio que das fue su pistoletazo de salida, un libro que consiguió sorprenderme y colocarse como una de mis lecturas favoritas de ese año. Una historia de reivindicación social, de lucha, de llamar al cambio, a la actuación. Para mí, fue la puerta que se abrió a temas sociales de nuestro mundo real para ser conscientes de la sociedad en la que vivimos, para darnos cuenta de la suerte y de los privilegios que tenemos y que otros, por cuestiones que no deberían ni de existir, viven con demasiados problemas. Ahora llega Hora de brillar. Su segunda novela, ambientada en la misma realidad que El odio que das, en ella Thomas sigue con su grito, su intento de cambiar las cosas, de generar más reflexiones y conseguir más aliados a su causa. Una historia donde la música, además, será fundamental. Un libro que, sin embargo, no me ha parecido que tenga tanto impacto como su primer libro.

Dividido en diferentes partes bien diferenciadas, Hora de brillar usa una narración en primera persona para ponernos en la piel de Bri, una adolescente que tiene que lidiar con una vida que, cada día, es un camino muy complicado. Su pasión es el rap, siguiendo los pasos de un padre que la abandonó de la peor manera posible hace años, intentando hacerse un nombre dentro de un mundo donde, el hecho de ser mujer, ya te endurece el salto a la fama. Sinceramente, no sé aún muy bien cómo explicaros lo que vais a encontrar en este libro. Creo que la autora es ya mundialmente conocida y que quedan claras sus proposiciones e intenciones. Hora de brillar no cesa en la lucha, pero lo hace dentro de otros temas o problemas sociales que tampoco tenemos que olvidar. La realidad se expande entre las páginas de un libro que, si bien se puede resumir en el día a día de Bri, su pasión por la música, su manera de expresar las injusticias y las desigualdades en las que vive, también se puede decir que este libro es el escenario perfecto para conocer hasta donde pueden llegar nuestras decisiones, nuestra rabia con el sistema, nuestras ganas de mejorar nuestra realidad social. Bri es un personaje fuerte y, a través de ella, exploraremos el mundo de la música, el rap y las discográficas. Y, sobre todo, lo que supone la fama y los malentendidos. Todo lo que viviremos con ella va a ser un descubrimiento, saber hasta donde llegan nuestros límites. Ponernos a prueba. Y, si algo caracteriza a Angie Thomas y sus historias, es el tema de ser una persona de color hoy en día. En Hora de brillar, la autora nos vuelve a exponer lo mal que lo pasa el colectivo, el miedo con el que tienen que vivir, la desventaja con respecto a otra gente solo por tener un tono de piel más oscuro. La fuerza del racismo que, todavía, sigue demasiado presente en nuestras vidas, juzgando y plagada de estereotipos que deberíamos de empezar a machacar. La historia de Hora de brillar es la historia de Bri, de su evolución y su revelación. de ver cómo una estudiante normal y corriente se convierte en la voz que todo un pueblo sigue necesitando. Y es ahí donde entra el rap, su manera de expresarse. A través de versos mortales, frases ingeniosas, nos vamos a meter en un mundo desconocido para la mayoría de nosotros, haciéndonos partícipes en los problemas con los que se topa Bri sólo por ser mujer y por arrastrar la leyenda que fue su padre. A veces no somos conscientes de lo rápido que podemos censurar, de lo rápido que podemos condenar el pensamiento de cualquier persona, de convertirla en malvada, de provocar un cambio terrorífico en su vida. Bri vive todo eso en su piel, ve cómo sus palabras se usan para el motivo equivocado, no son entendidas y, con ello, nos demuestra el poder de las letras mientras representa la inseguridad, el desprestigio, o algo que hacemos mucho los adultos, el tomar a broma todo lo que un adolescente dice cuando, en realidad, es siempre su manera de hacerse sentir en la sociedad, de también expresarse, de decir esto soy yo y no lo que puedas pensar de mí. de hacerse notar. Sin dudarlo, Hora de brillar sigue siendo una denuncia social, un toque de atención para cuando volteemos los ojos hacia otro lado y no queramos ver esa realidad social dentro de nuestro entorno. Porque la autora también toca temas como la amistad, el amor que va más allá de lo heteronormativo, el tema de las drogas, el machismo y el sexismo, la dependencia, el abandono, la muerte, el seguir tus sueños cueste lo que cueste y la pobreza. Y, hasta la página final, la batalla para conseguir ganarle a todo ello va a estar muy presente.

Entonces, ¿por qué comento que este libro no ha sido tan impactante como El odio que das? Pues porque creo que la denuncia social, en Hora de brillar, se hace menos notoria. Y creo que eso es así porque se le da más importancia al tema de la música y el rap y todo su universo, tanto, que deja algo relegado la reivindicación de estos temas. Algunos están ahí para darle sentido a la vida de Bri, para darle personalidad a ella y a su familia o amigos, pero no se va más allá. Incluso he notado que el libro es más la cabezonería y rebeldía de Bri que otra cosa, algo que, también, me ha sacado de quicio en más de una ocasión. Ojo, no digo que la denuncia esté ahí, porque la autora se encarga bien de usar todos los elementos de los que dispone para crear alboroto, es solo que se le ha dado más importancia a la vida del barrio de Bri, el tema de las bandas callejeras, los problemas que existen entre familias, el ajuste de cuentas y la historia del pasado.

Y creo también que parte de la fuerza del mensaje de la autora se ha perdido a causa de una traducción que me ha chirriado desde la primera página. Hora de brillar contiene expresiones latinas desde el comienzo, lo que ha hecho que muchas de las situaciones, frases y demás no se entiendan bien. He tenido algo de dificultad con palabras sueltas que describían algo y, al ser palabras latinas no usadas en España, nunca he sabido que era eso o aquello. Seguramente, si la narración se hubiera ajustado mejor a nuestra jerga, nuestro coloquio, el mensaje se hubiera entendido o sentido mucho más y mejor. Pero, por desgracia, no ha sido así, lo que ha dificultado, como digo, la comprensión de la lectura en muchos puntos.

En resumen, Hora de brillar sigue teniendo la magia de la autora: una historia para reivindicar y denunciar injusticias y desigualdades sociales. Usando el rap como manera de expresarse y de gritar hacia el cambio, Bri sorprende con su fuerza para hacer frente a todo tipo de problemas, una lectura directa y ágil que, si bien no se posiciona al mismo nivel que El odio que das, sigue tratando temas fundamentales para hoy en día.

Después de haber leído muy buenas críticas del anterior libro de Angie Thomas, El odio que das, quise darle una oportunidad a la autora con su nuevo libro. Es posible que lo que vaya a ofrecer aquí sea una opinión bastante impopular, y la razón es que Hora de brillar me ha decepcionado bastante. Quizás esperaba encontrar una historia con un argumento potente y profundo y con un mensaje que me hiciera reflexionar, pero lo que he encontrado, en mi opinión, es una historia en la que el mensaje principal se pierde entre tanta escena de rap, que he de reconocer no es un género musical que me guste, y tal vez ahí radique el problema.

Era consciente de que la cultura del hip hop iba a ser una parte importante de la trama, pero desconocía hasta qué punto iba a tener relevancia en la historia. Lo cierto es que me he aburrido bastante leyendo estas escenas, que prácticamente ocurren en todo el libro, porque como decía anteriormente no es una música con la que me sienta conectada. Aun sabiendo que el rap iba a ser importante, quise leer el libro porque pensaba que la autora utilizaría este tipo de música para dar voz a los pensamientos y sentimientos más profundos de la protagonista, Bri. Y aunque esto en parte es cierto, es decir, Bri utiliza el rap como forma de expresar situaciones duras por las que ha vivido, me parece que no se le da la importancia que merece, relegando este mensaje a un segundo plano, perdiéndose entre batallas de rap y conflictos entre bandas. Las últimas páginas me han gustado algo más, pero aún así el final me ha parecido bastante abierto y precipitado.

Algo que sí me ha gustado mucho de este libro es el desarrollo de los protagonistas, pues me parece que son complejos y que están muy bien construidos. Ninguno de los personajes que aparecen en esta historia ha tenido una vida fácil y eso se ve muy bien representado. Me quedo con ganas de saber mucho más de ellos, y sobre todo me quedo con ganas de saber cómo han evolucionado y qué ha sido de ellos en un futuro.

En cuanto a la narración de la autora, esta me ha parecido bastante simple, y la verdad es que a mí no me ha transmitido nada, no me ha llegado. Las canciones tampoco me han hecho sentir nada, aunque es posible que en la traducción se haya perdido parte de la esencia de las rimas. A pesar de ello entiendo la dificultad de traducir este tipo de contenido y que quede acorde con su versión original. A modo de observación, decir que este libro está traducido a español latinoamericano.

Es una pena que este libro no me haya gustado porque empecé a leerlo muy entusiasmada esperando encontrar una historia mucho más profunda. Aún así, sigo teniendo muchas ganas de leer El odio que das. Si habéis leído alguno de estos libros, os agradecería un montón que me dijerais en comentarios qué os pareció.
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