«a las mujeres hay que amarlas, no comprenderlas».
|
«a las mujeres hay que amarlas, no comprenderlas».
|
«La vida es algo demasiado importante como para hablar de ella con seriedad».
|
él. Cada uno tenemos nuestros propios demonios y nos enfrentamos o nos escabullimos de él como podemos.
|
Llegó un punto en el que la situación se hizo insoportable, un punto límite que te lleva a la revolución de conocerte realmente. Y después de un año había descubierto que aburrirse está infravalorado. Si te aburres, piensas, y si piensas, estás perdido. Pensar no es tan bueno como nos hacen creer, porque cuando ya no quedan más mentiras, solo queda sitio para la verdad. Una que suele apestar. Estamos tan habituados al ruido que nos rodea que ni le prestamos atención hasta que todo cesa y solo quedas tú y solo oyes tus pensamientos de una forma tan nítida que acojonan. Pavor porque son vacíos. No hay nada. Y eso da más miedo porque, fuera, ese silencio es vida si sabes escucharlo y tú has olvidado cómo hacerlo.
|
Haré que vuelva tu inspiración como lo haría una musa. Eso es. ¡Voy a ser tu musa navideña!
|
«Si por delante se asemeja a un Dios, por detrás parece el Hércules de Baccio». (N. de la A: Si no sabes a qué escultura me refiero, búscala. Siempre es buen momento para ver un buen culo arte).
|
«Hay lunes y luego está este».
|
Ahora quieren que escriba un villancico para la petarda esa de Nala. Yo… que odio la Navidad. Yo… que la música me odia. |
—Supongo que lo que la nieve unió… —Eso ha sonado demasiado pastelón, señor rey del rock. |
Tú de Marte y yo de sábados, nuevo disco de Lionheart. A la venta el 7 de diciembre. |
Gregorio Samsa es un ...