Lejos del Edén

En esta novela la autora nos lleva a Japón, al seno de una familia adinerada donde a través de su hija, Sol, iremos conociendo la vida y la cultura nipona. Amén de vivir una historia de amor, pasión e intriga.

Con Sol, la protagonista, vamos a ir viviendo el reencuentro entre ella y su familia tras su retorno al país del Sol Naciente después de terminar los estudios preuniversitarios en un internado de monjas español. Con su llegada, veremos el choque cultural e ideológico entre la protagonista y su primo, Eric, un personaje que nada entre los recuerdos de sus padres fallecidos y los traumas que le causaron tener que sobrevivir en la calle tras su muerte, el odio a su tío millonario y la pasión sexual y amorosa que siente hacía su prima.

Entre Sol y Eric, irá subiendo cada vez más el tono de la atracción sexual, aunque disimulada por la animadversión con que quieren vestir sus interacciones juntos, pero que va a ir cediendo poco a poco terreno al deseo. Estos encuentros amorosos, están narrados con una gran viveza por la autora, y son capaces de que el lector imagine la escena como si de un vídeo se tratara.

Así, los personajes recogen todo el espectro de las personalidades que podamos imaginar, pues van desde el frío y calculador sin sentimientos, el padre de Sol, al que está lleno de traumas y resentimientos, Eric, sin olvidar al maníaco y mafioso del prometido de Sol.

Respecto al padre de Sol, es el personaje con el que la autora nos pone de manifiesto el temperamento de las personas manipuladoras, las cuales aúnan tanto los malos tratos físicos como los psicológicos a la falta de escrúpulos y sentimientos, y que únicamente tienen como objetivo en la vida ser superiores a los demás sin importar a quién se llevan por delante. En este caso, utiliza a su hija como moneda de cambio para obtener más poder y dinero.

Siguiendo con la personalidad de los personajes principales, veremos que ambos, por distintos motivos, sufren de falta de amor familiar. Sin embargo, cada uno lo expresa de diferente manera, una guardando los sentimientos en su interior, y el otro a través de manifestaciones violentas y pulsiones sexuales no controladas.

Igualmente, nos adentra en el oscuro y sórdido mundo de la yakuza, o mafia japonesa, en la persona de Kuroga, el prometido de Sol. Éste, además, desencadena una venganza contra Eric y su tío, que nos permite conocer el modus operandi de estas organizaciones donde el fin siempre justifica los medios. 

Uniendo esta venganza, junto con la manera de trabajar de los medios de comunicación especializados en prensa rosa, hace una crítica feroz a este tipo de informaciones sensacionalistas y todo lo que ello conlleva, haciendo hincapié en la manera en que destrozan la vida de quienes caen en sus garras, consiguiendo incluso que las personas que son difamadas terminen en tratamiento psicológico y psiquiátrico. al igual que sucede con las acciones de la yakuza, mas esta termina condenando al individuo perseguido por ella a la muerte. En ambos casos, nos sirve para evaluar el apoyo que se recibe de familiares y amigos.

A su vez, nos lleva a la figura del incesto, o algo entendible como no muy recomendable por las connotaciones genéticas negativas que tiene, e incluso morales. Y con la relación entre los protagonistas y los celos que conlleva en varios momentos en personas cercanas a ellos también pone de manifiesto lo que no se puede considerar amor, sino enfermedad y sociopatía.

Y aunque no se espere, por ser una novela romántica con bastante toque erótico, también hay una parte negra que hará las delicias de todo lector, pues verá como la novela es un compendio de varios géneros muy bien hilados unos con otros.

Personalmente me ha parecido bastante buena, y por momentos ha conseguido que recreara ciertas escenas, y no son las de tipo erótico, en mi mente durante varios minutos. Consiguiendo hacerme reflexionar sobre los momentos que ofrece la vida y la ayuda con la que contamos sin darnos cuenta, es decir la confianza ciega de algunas personas en nosotros sin pensar nosotros mismos que la merecemos.

Reconozco que “Lejos del Edén” es un libro que ha logrado impresionarme con su gran evolución y la auténtica sorpresa que ha supuesto en este sentido. Esther Sierra F. ha conseguido despistarme completamente desde unas primeras páginas en que pensaba que iba a ofrecerme una obra que versara básicamente de la historia de amor de los dos protagonistas. Según me adentraba en la trama me di cuenta de que poco había de la dulzura inicial que nos traslada la protagonista Sol y que, de hecho, me deparaba un argumento tremendamente duro que en muchas ocasiones no da tregua al lector sobrecogiendo con momentos de máxima tensión y crueldad.

Sol vuelve a Japón para reencontrarse con su familia después de haber estado estudiando en un colegio religioso español (país del que su padre es originario). A su llegada se encuentra con unos padres casi desconocidos y un destino que ya parece acordado y que se escapa completamente de sus manos. El hecho de que su primo Eric parezca dispuesto a sacarla de sus casillas en todo momento no es algo que mejore la situación con la que se ha topado.

Se trata de una historia que va perdiendo inocencia de una manera progresiva hasta llegar a unas cimas de acción insospechadas al comenzar el libro. Es un argumento duro, de personajes con traumas profundos a los que se tienen que enfrentar de la peor manera posible. Además, encontramos en todo momento sentimientos verdaderamente exacerbados que llevan a los protagonistas al extremo. Incluso la historia de amor principal no es precisamente idílica y es muy interesante ir descubriendo los secretos que guardan. La evolución de Sol es increíble, se transforma con rapidez y se adapta a las circunstancias mostrándonos una cara completamente diferente a la de la chica un tanto anodina de las primeras páginas.

Se nos retrata además una sociedad especialmente misógina, algo proyectado por el padre de Sol (un personaje rancio que pretende encajar en la sociedad nipona acogiéndose a sus más anticuadas prácticas) pero también por la dinámica de la yakuza que tiene mucho que ver con la evolución de la trama. Algunos momentos pueden llegar a herir la sensibilidad, están narrados de una forma muy visual, con la crudeza de una película. También nos encontramos con un villano cruel que se deja llevar por la venganza hasta perderse a sí mismo. Con todo, tenemos una historia de acción, celos, una atípica historia de amor, venganza…pero también de superación en los peores momentos, de perdón y de autorredención. Es complicado no querer saber más de esos cabos deliberadamente sueltos que nos deja muy acertadamente la autora.

- Una novela que se desarrolla en Japón y nos acerca a la cultura nipona en un ambiente muy elaborado y documentado.
- La gran crítica al machismo y a la homofobia se junta a la crítica de las jazukas japoneses, creando un clima electrizante.
- Los personajes están bien construidos y llega un momento que no sabes si sientes pena por ellos o los odias. Todos tienen sus tintes grises.
- Es una novela que empieza dulcemente y según avanza evoluciona hacia escenas muy duras, violaciones o relaciones tóxicas, creando un clima de miedo, tensión e inseguridad constantes.