La muerte de las cuatro reinas

Hablar de “La muerte de las cuatro reinas” es hablar de un libro que me ha mantenido intrigada y enganchada de principio a fin. He de reconcoer que llevaba las expectativas muy altas con este libro; no porque hubiera leído muy buenas reseñas (no había leído ninguna), ni porque me lo hubieran recomendado (nadie me lo recomendó), sino porque, al leer las sinopsis, supe que tenía que leerlo. Y no me ha decepcionado en absoluto.Cuando leo un thriller es prácticamente imposible que no intente resolver el misterio que se presenta en la historia, pero con “La muerte de las cuatro reinas” no he sentido esa necesidad. Estaba tan sumergida en la historia y estaba disfrutando tantísimo descubriendo los entresijos de palacio y las historias de los personajes que, por increíble que parezca, no quise darle vueltas a quién podría o no podría ser el asesino o asesina de las cuatro reinas.

El hecho de que la historia esté situada en un país que está dividido en cuadrantes no es nada nuevo, lo que sí me llamó bastante la atención es que todas estuvieran gobernadas por mujeres. Única y exclusivamente podían reinar mujeres en este país.

De hecho, la posición y rol de las reinas me recordó bastante al papel de la abeja reina en su colmena, ya que la mujer es criada con el único objetivo de gobernar, el hombre solo sirve como medio para tener descendencia y para servir a la reina.

En cuanto a los personajes, todos… absolutamente todos me han gustado. No con todos he sentido empatía, aprecio o cariño, pero sí considero que todos han estado muy bien perfilados y creados.

-Keralie: Sin duda, mi personaje preferido de la novela. Keralie es una protagonista de las que escasean. Astrid nos presenta a una chica de apariencia menuda y frágil, pero con muuuuuuucho carácter. Pero no, no ha sido solo eso lo que ha hecho que me guste tanto, sino que, además de ser una chica con un par de ovarios bien puestos, también presenta muchos defectos. Keralie es una chica insegura, egoísta y mentirosa, pero no intenta ocultarlo o negarlo. Ella es consciente de sus defectos, por eso es maravilloso ver cómo intenta cambiar a mejor a lo largo de la historia. No es un personaje que se conforme con ser como es, sino que evoluciona. Más personajes así (tanto femeninos como masculinos) necesitan muchas historias.

Varin: Varin es un personaje que me ha producido mucha empatía desde el principio y que también sufre su evolución a través de la novela. Quizá no he sentido una evolución tan marcada como en Keralie, pero tampoco era necesario; Keralie tenía muchos más problemas con los que lidiar que Varin. Me gustó muchísimo que al principio se presentara como un personaje resignado a su destino (no puedo decir cuál, porque serían spoilers) y, poco a poco, cambiara de opinión y quisiera luchar por cambiarlo.

-Mackiel: Un personaje asqueroso donde los haya, pero a la vez fascinante por la manera en que lo trata la autora. Mackiel es un personaje que no quiere a nadie, solo quiere poder. Manipula todo cuanto puede (y a todos cuanto puede) para que todo salga de acorde a sus planes y no siente remordimientos en ningún momento por nada. Es muy fácil sentir asco por él, pero a la vez seguir queriendo que aparezca de vez en cuando, y eso es gracias a la pluma de la autora.

-Arebella: Aunque probablemente la odie más que a Mackiel, sí que es cierto que pude entender y estar de acuerdo con alguna de sus ideas. No puedo decir mucho más de este personaje porque… en fin, spoilers.

-Marguerite: Reina de Toria. Probablemente mi reina favorita. Marguerite es una reina estricta, pero comprensiva; dura, pero amable; recta, pero fexible. Tiene todas las características que considero importantes para ser una buena reina.

-Stessa: Reina de Ludia. Stessa ha sido otra reina que, a pesar de ser impulsiva, joven y un poco “egoísta”, también me ha gustado bastante. Y es que Stessa tenía algo que echaba en falta en las otras reinas: chispa. Stessa amaba a su cuadrante y quería mejorarlo, pero también amaba a su novio y no quería renunciar a él simplemente por el hecho de ser reina. ¿Qué más da que unas reglas escritas por un desconocido digan que no puede amar? ¿Qué es la vida sin amor? Es cierto que necesitaba madurar aún algunos aspectos de su personalidad, pero, en general, empaticé bastante con la reina más joven de Cuadara.

-Corra: Reina de Eonia. Corra me pareció la reina más hipócrita de todas. En su cuadrante está prohibido tener sentimientos y me gustaba su manera de ser porque ella sí sentía. Pero entonces recordaba cómo, aun sabiendo lo cruel e injusto que era el prohibirle a alguien tener sentimientos, no hacía nada por cambiar la situación en su cuadrante (el más cruel de todos, desde mi punto de vista). Vamos a ver, querida Corra, si sabes que no es justo crear “robots” humanos sin sentimientos, ¿por qué no haces algo?

-Iris: Reina de Arquia. Es la reina a la que menos apego le cogí, pero probablemente sea debido a que apenas tuvo apariciones en la novela. Una reina respetada por todo su cuadrante (y quizá ¿temida? No llegó a quedarme muy claro, pero me dio la sensación de que sí.)

En resumen, “La muerte de las cuatro reinas” es una historia que me ha ENCANTADO, pero que no ha llegado a tener una puntuación de 5 sobre 5 debido a la historia de amor. Es decir, me gustó mucho cómo lo planteó la autora desde un principio, pero llegando al final de la historia… ¡mec! Para que os hagáis una idea (sin spoilers), la historia transcurre en una semana más o menos, así que el hecho de que Keralie dijera al final que amaba a Varin pues… como que no me lo creí.

La historia de amor es una trama bastante secundaria en la novela, por eso creo que hubiera sido mejor dejarlo en un “siento algo por ti lo bastante fuerte como para comenzar algo contigo y seguir conociéndote”, no un “te amo, tenemos toda la vida por delante”. Ehh… vamos a calmarnos un poco, Astrid.

Pero dejando ese detallito de lado, el resto me ha parecido maravilloso. ¡Oh! Y algo imporante… ¡Es autoconclusivo! No sé vosotros, pero últimamente me da pereza empezar muchos libros que tienen muy buena pinta por el hecho de que sé que será una saga. Y no me malinterpretéis, adoro las sagas, pero llega un punto en el que tengo tantas sagas empezadas que me peta un poco el cerebro. Así que ahí tenéis otro motivo más para leer “La muerte de las cuatro reinas”, un thriller original y adictivo que os hará pasar una fantástica lectura.
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En esta historia conoceremos a Keralie, una ladrona que se verá envuelta en una trama política y de traiciones en la corte de Quadara, cuando las cuatro reinas empiezan a morir, siendo asesinadas.

Se trata de una combinación de géneros que me ha parecido una maravilla: fantasía y thriller/misterio. Esta mezcla nos regala una historia frenética, que no da tregua y te tiene en vilo todo el tiempo hasta el final.

A medida que vas leyendo, vas descubriendo que la trama es mucho más compleja de lo que parecía en un primer momento y hace que te enganches, que necesites saber quién es el asesino que puede cambiar para siempre las vidas de los habitantes de Quadara. En más de una ocasión he sospechado de todo el mundo y el final me sorprendió bastante.

Me ha gustado mucho como se resuelve todo aunque, en mi opinión, a los personajes les falta un poco de profundidad; no he empatizado demasiado con ellos.

En general, una historia original que engancha mucho y que te tiene en vilo hasta el final; con una combinación de géneros que funciona muy bien. Una opción muy a tener en cuenta.

¡Hola thousands! Hoy os vengo a hablar de la muerte de las cuatro reinas, pero primero voy a contaros como me enteré de la existencia de este libro. Ediciones Kiwi se puso en contacto conmigo este verano para proponerme leerlo y hacer un instatour – tenéis todas las paradas en mis historias destacadas, merece mucho la pena que las visitéis porque se desvelan cosas muy interesantes −. Si me seguís en Instagram sabréis que acepté sin dudarlo porque por la sinopsis intuía que me iba a gustar, ¡y así ha sido!

Keraline es la mejor ladrona de Quadara, trabaja para Mikael, dueño de la casa de subastas del mercado negro de Toria y también su mejor amigo desde la infancia. Mickael ha modelado a Keraline para que sea quien es. Un día Mickael le manda robar un comunicador a un mensajero y esto hace que se meta en un asunto muy turbio de la Concordia, donde viven las cuatro reinas de Quadara.

La ambientación me ha encantado, Quedara está dividida en cinco partes, La Concordia donde viven las cuatro reinas y sus cuatro reinos: Toria, Eonia, Archia y Ludia. Los cuatro reinos están divididos por muros y por modos completamente diferentes de vida que las reinas han jurado proteger y perpetuar. Eonia destaca por la tecnología, la medicina y su estoicismo, Archia es más rural y se dedica a la agricultura, en Toria viven grandes comerciantes y Lucia destaca por su hedonismo. Todos tienen su papel.


La historia está dividida en tres partes pero no siento que haya una introducción como tal, sino que desde la primera página hay mucha acción y no decae en ningún momento. Algo que me ha encantado es que yo pensaba que el libro iba a tirar por un camino y la autora ha logrado sorprenderme con un gran plot twist que no veía venir. Hay capítulos en los que las reinas son las protagonistas y otros en los que lo es Keralie y el mensajero, Varin.

Todos los personajes están muy bien construidos y se han ganado un hueco en mi corazón, por eso me da tanta pena que el libro sea autoconclusivo. Me encantaría poder volver a Quadara y vivir nuevas aventuras.


Keraline, es una chica muy fuerte y astuta que me ha cautivado. Varin, es un joven de Eonia pero es muy especial y conocer a Keraline dejará su mundo patas arriba. Mickael, el mejor amigo de Keraline es una persona astuta pero oscura. A las que menos llegamos a conocer son las reinas, aunque no por eso están pero construidos, ya que están muy definidas por el reino en el que han crecido.

La forma de escribir de la autora me ha encantado. Me ha resultado super aditiva y fluida. Esta es su primera novela, pero yo pienso leer todo lo que escriba, ahora está en el top de escritoras a las que leo sí o sí. Su próximo libro, The Vanishing Deep, tiene prevista su publicación en inglés para 2020 y espero que Kiwi nos lo traiga muy pronto, ¡tiene muy buena pinta!


La edición es sencilla pero con un toque elegante. La portada es una auténtica pasada, y además tiene relieve. Si habéis visto el libro en Instagram habréis quedado maravillados con mapa que contiene, es desplegable y una preciosidad – ya sabéis que a mi un libro con mapa me tiene ganada −. ¡No puedo estar más enamorada de la edición!

Debo dar las gracias a Kiwi por haberme dejado disfrutar de esta historia antes de su publicación y pedir disculpas de antemano a todos los que me seguís por redes porque voy a ser muy pesada con este libro, que estoy segura al 99'9% de que se encontrará en mi top de 2019.

¿Aún por aquí? ¿Por qué no estas de camino a la librería? ¿No he sido lo suficientemente clara? Tiene fantasía con un toque de ciencia ficción y un gran misterio, vamos, que lo tiene todo y tú tienes que tenerlo en tu estantería.
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Quadara está formada por cuatro cuadrantes, cada uno de ellos gobernado por una reina. Pero las reinas viven juntas en un mismo palacio y toman las decisiones de forman conjunta siempre intentando tomar las mejores decisiones para su cuadrante. Por otro lado tenemos a Keralie, una joven ladrona que no lo ha tenido fácil en la vida y que bajos las órdenes de Mackiel roba todo lo que éste le ordena para luego más tarde ser subastado. Se nota muy mucho por donde va a ir la historia y lo que pretende hacer la autora, así que lo que vas leyendo no te resulta nada del otro mundo porque en tú cabeza ya sabes cómo va a ir la cosa. Además en esta parte se nota un cambio, es como si apartir de aquí la historia fuera otra, esa es la sensación que he tenido. Incluso el personaje nuevo que introduce la autora, lo he sentido sin alma, frío. No me ha generado ningún interés.
Obviamente la cuarta parte tampoco me ha dejado un buen sabor de boca. Se siguen haciendo predecibles los acontecimientos que van sucediendo, aunque sí es verdad que sucede una cosa que no vi venir pero tampoco es nada del otro mundo.La muerte de las cuatro reinas ha sido una lectura decepcionante, de la que esperaba mucho pero se ha quedado en nada. Es un libro que se deja leer pero que no ofrece nada nuevo respecto a otras historias del género. Si la autora publica más libros, me pensaré si llegar a darles una oportunidad.
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La Muerte de las Cuatro Reinas es una novela que he disfrutado de principio a fin, una historia con la que Astrid Scholte se inicia como escritora y con la que no ha podido empezar mejor, en mi opinión. Ha sido imposible para de leer, con una trama y una ambientación de lo más originales y adictivas. Sin duda, la recomiendo a todo amante de la fantasía con un toque de investigación policial, suspense, poder y romance.

Keralie Corrington es una joven de diecisiete años que, aunque parezca inofensiva, es más inteligente y audaz que el resto de ladrones de su edad. Es una joven que abandonó su hogar tiempo atrás por un error que cometió, y que su familia, en especial su padre, pagó caro. Desde entonces se gana la vida trabajando para Mackiel como ladrona. Su nueva encomienda la lleva a robar un valioso objeto a un mensajero de Eonia llamado Varin, sin ser consciente de que el objeto que transporta es de suma importancia para Quadara y la supervivencia del territorio tal y como lo conocen, pues ese artilugio oculta imágenes de los asesinatos de las cuatro reinas. Keralie y Varin deberán unir fuerzas para descubrir quién ha matado a las reinas y por qué, y todo ello sin perder sus vidas en el proceso.

Un país, cuatro cuadrantes y una gran murallas que los separa, con una reina gobernando en cada uno de ellos desde la salvaguarda del palacio de la Concordia. Cada cuadrante está especializado en algo concreto que permite que el país avance y prospere. Eonia, reinado por la reina Corra, destaca por la tecnología y la medicina, es la evolución; en Archia, reinado por Iris, nos encontramos con un territorio centrado en la naturaleza; Toria, con Marguerite como reina, destaca por la curiosidad, el comercio y la investigación; y en Ludia se valora la música, el entretenimiento y el arte, con Stessa como reina. Cada cuadrante está muy bien diferenciado no solo por el estilo de vida y el enfoque de su desarrollo cultural, sino también por las personalidades de las diferentes reinas, que saben lo que tienen que hacer por el bien de su gente, de su cuadrante.

La novela está compuesta por tres bloques, con capítulos narrados en primera persona desde el punto de vista de Keralie, y otros en tercera persona y que nos permite conocer más en profundidad a las reinas de cada cuadrante, así como sus diferentes secretos e ideologías de cara a la salvaguarda de los intereses de su cuadrante y de toda Quadara.

La Muerte de las Cuatro Reinas destaca por la gran diversidad de personajes, todos muy bien hilados y con gran implicación e importancia, aunque al principio nos pueda parece insignificante. Por un lado tenemos a las cuatro reinas, como ya he mencionado: Iris, Corra, Stessa y Marguerite; con personalidades muy marcadas. Pero hay que destacar a la protagonista principal Keralie, y Varis, entre otros.
Keralie es una joven perspicaz, audaz y bastante inteligente, toda una ladronzuela capaz de llevar a cabo con suma facilidad las misiones más complicadas. Su vida no ha sido fácil y ha aprendido a sobrevivir por su cuenta, tratando de avanzar pero sin dejar atrás los hechos de un pasado que le pesan como una losa. Es una joven sencilla pero atrevida y que se apoya bastanteen Mackiel, con el que siente una gran conexión. Su punto de vista es fundamental para conocer los detalles importantes sobre la trama principal. Es un personaje que me ha encantado y que también me ha sorprendido por cómo afronta cada situación, metódicamente y tratando de hacer lo correcto, aunque le pueda perjudicar. Evoluciona muchísimo y se ve sometida a situaciones donde deberá salir con vida.
Varis es un mensajero de Eonia y, como buen miembro de ese cuadrante, destaca por ser una persona a la que se le han limitado las emociones desde que nació. Eonia es un cuadrante donde los sentimientos se entienden como motivo de conflicto y es por ello que, desde el nacimiento, aprenden a suprimirlos, dado el gran avance tecnológico e innovador del mismo. Con todo, es un chico tierno, sincero y confiado.


La Muerte de las Cuatro Reinas, como ya mencionaba, destaca por la riqueza de los personajes, con las personalidades tan marcadas y diferentes en función del cuadrante en el que les ha tocado vivir y cómo han sido criados y cuidados. Pero también destaca por la trama de investigación y asesinato; las pistas y la exploración son esenciales en la trama y se vuelven adictivas. Además, tal y como se presenta la historia, resulta muy original su desarrollo pues en Quadara nadie sabe lo que está sucediendo en palacio, pero nosotros, como lectores, y Keralie y Varis, sabemos muy bien que las cuatro reinas han sido asesinadas y andamos en busca del asesino, enredándonos en todo un entramado de misterios, traiciones y sorpresas que dejan con la boca abierta y pidiendo más.
Y para relajar la tensión entre tanto asesinato, callejones sin salida y giros inesperados, también nos encontramos con el amor en varias vertientes: el amor fraternal, el de amistad, el de la reinas por su pueblo, el romántico entre Keralie y Varis, etc. Creo que es otro punto muy a favor de la historia y que la enriquece mucho más, al no centrarse únicamente en la serie de asesinatos y el romance entre los protagonistas. Es una novela autoconclusiva bastante completa y que recomiendo muchísimo.

En resumen, 'La Muerte de las Cuatro Reinas' es una novela autoconclusiva bastante completa y sorprendente. Astrid Scholte se ha estrenado por todo lo alto con una novela juvenil que mezcla a la perfección la fantasía con la ciencia ficción y el thriller. Destaca, sobre todo, por la riqueza de los personajes, con las personalidades bien marcadas y diferentes, y por la estructura de la narración, original y pura adicción.

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Hace unos días volví a participar en un tour organizado por la editorial Kiwi, esta vez en Instagram junto a varias cuentas más. Cada una tenía que poner una palabra secreta y al juntarlas todas podías participar en el sorteo de un ejemplar que estaba sorteando la editorial, algo que me pareció muy divertido y original; pero bueno, no me enrollo más y os diré lo que me ha parecido el libro en cuestión.

Ya sabéis que soy una persona que no suele leer las sinopsis de los libros, así que me aventuré en el libro sin saber apenas nada sobre él o de qué trataba y la verdad es que ha sido una verdadera maravilla sumergirme en sus páginas pues la historia que he podido leer me ha sorprendido muy gratamente.

Se podría pensar por la sinopsis que se ve en la contraportada del libro, que las protagonistas son las cuatro reinas y que vamos a conocer sus historias y aunque en cierto modo es así, ellas no son las protagonistas de este libro, por lo menos no directamente y esa fue mi primera sorpresa. La segunda fue que me hice una idea equivocada de la trama del mismo, pensé que sería una historia de fantasía, quizás épica y la autora se ha decantado más por un futuro tecnológico, por lo que se podría englobar dentro de la ciencia ficción, pero sin naves o extraterrestres y sí con algún toque de fantasía.

El libro nos sitúa en Quadara, sobre todo en Concordia el centro de los cuatro cuadrantes que existen en toda la región, cada uno gobernado por una de las cuatro reinas: Corra está gobernado por Eonia, que es la región de la ciencia; Archia gobernada por Iris, que es la región de la naturaleza; Ludia está gobernada por Stessa, que es la región culta y por último está Toria gobernada por Marguerite que es la región costera.

Cuando Keralie, nuestra protagonista, decide robar un disco de comunicaciones a un mensajero desconocido, aquello que en un principio parecía un trabajo fácil pronto se complicará y la vida de Keralie cambiará drásticamente.

No quiero contaros más cosas de las que suceden en el libro, porque hay que ir descubriendo todo poco a poco, pero desde ya os digo que es un libro que me ha gustado mucho y que me ha dejado sorprendida por varias de las cosas que suceden. Si hay algo que me ha gustado es que el libro está narrado desde diferentes puntos de vista. En primera persona cuando nos narra Keralie y en tercera persona cuando nos narran las cuatro reinas y me ha gustado porque descubrimos secretos que de otra manera nunca hubiésemos imaginado.

El mundo que ha creado la autora está bien detallado y aunque al principio me costó imaginarme todo (me suele pasar a menudo con este tipo de libros) pronto me hice a la idea y disfruté de las cuatro regiones y su manera de pensar y de ser. En ellas también hay distinciones y eso sí que es algo que me dolió, pero es algo habitual en esta clase de libros.

Los dos protagonistas me han gustado mucho, así como las reinas, aunque con alguna de ellas he tenido mis más y mis menos y no he estado de acuerdo con su manera de proceder, aunque al final he terminado empatizando con todas ellas.

En definitiva os diré que La muerte de las cuatro reinas es un libro de fantasía que engancha desde la primera página donde podréis encontrar traiciones, odio, amor y un mundo diferente a lo que se suele encontrar en esta clase de libros.
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