Una historia muy emotiva y real como la vida misma.
Esta novela ha despertado en mí, muchos sentimientos. Pena, dolor, amor, pasión e incluso pérdida.
Por una parte he vivido y sentido en primera persona a través de la historia de Lucy ese primer amor que lo arrolla todo, que se mete en la piel, a pesar de los años, y la distancia, siempre perdurara esa llama.
Un amor que surge en medio de una gran tragedia. Donde dos personas que cada vez que se encuentran saltan chispas.
Por circunstancias una de ella decide dejarlo atrás e ir en busca de sus sueños. No entrando en sus planes esa persona que deja atrás.
Lucy nos relatara porque tuvieron que renunciar el uno al otro por cumplir sus sueños. Ella se quedó en Nueva York mientras él se iba a uno de los lugares más peligrosos del mundo Irak.
Gabe se marcha y poco a poco van perdiendo el contacto. Ella conoce a otro chico. Alguien que la quiere, que la trata como una reina, con quien se siente bien y a quien aprende a querer. Sin embargo no es él y nunca llegará a desaparecer del todo de su vida ni de su corazón.
Aunque Lucy se case y tenga hijos, nunca olvidara a su gran amor. Y a través de estas páginas le va contando la historia de su vida, sus sentimientos, sus miedos y sus sinsabores.
Me encanta como su autora hace que te mantengas pegadas a sus páginas capitulo a capitulo, como a través de su pluma hace que vivas y sintamos en nuestra piel lo que siente Lucy y acompañarla en ese largo camino, que no es para nada un lindo camino de rosas. Todo ello mostrado de una forma muy cercana y directa. Que hará que mientras lees sea maravilloso lo que te hace sentir.
Su vibrante comienzo, el deseo, la pasión, la compañía, el sacrificio, el arrepentimiento, la costumbre y la pérdida. Lucy va escribiendo la novela, pero en realidad son palabras para su primer y gran amor Gabe, el cual ella siempre considera el verdadero.
Lo que más me ha gustado son los cortos que son los capítulos, los cuales iras devorando sin darte apenas cuenta.
Su final ha sido uffff, no me lo esperaba para nada y he de reconocer que me ha hecho llorar.
La luz que perdimos es una novela llena de amor, emociones y sentimientos. La cual recomiendo al 100%. Ya que te llenara de sentimientos y con la cual en algún momento de su lectura te sentirás identificada.
En definitiva un libro que trata del amor, la familia, los sacrificios que hacemos por ella, la amistad, esas decisiones que terminaran marcando nuestras vidas.
Y sobre todo lo corta que es la vida y como puede cambiar todo en un momento sin apenas darnos cuenta.
No conocía a su autora
Jill Santopolo pero me ha encantado su manera de plasmar los sentimientos a través de su pluma, por lo cual no me queda más que darle las gracias y desear leerla de nuevo.
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