La maestra del jabón

Felipe R., @tintasyhoras en Instagram, el autor, con un estilo cercano al realismo mágico, que tan bien desarrollaron los autores hispanoamericanos, nos relata el empoderamiento y la fuerza de una mujer que desafió la moralidad y a la sociedad de su época.
La novela cuenta la historia de Sofía, una mujer que gracias a su matrimonio con un empresario sevillano del jabón pudo salir de la pobreza, aunque siempre estuvo obsesionada con su olor corporal. Además, gracias a su lujuria y belleza, conquistó a los hombres. Sin olvidarnos de que nunca estuvo sujeta a las órdenes ni deseos de ningún hombre.
Así, con bellas palabras y usando metáforas para describirlo, el autor nos habla sobre la necesidad de libertad de todas las personas, especialmente en los aspectos más íntimos de cama. Hace especial incidencia en la libertad de las mujeres para elegir su destino o camino. de esta manera, también compara la posición que siempre ha tenido el hombre en la Sociedad; la cual, en algunas épocas, incluso ha alabado ciertos comportamientos pocos éticos de éstos, y que si eran realizados por mujeres eran criticados con dureza, e incluso criminalizados.
De igual manera, hace que reflexionemos sobre las condiciones de vida y trabajo de algunas personas que viven en el límite de la pobreza. Y, sin embargo, los empresarios se aprovechan de las necesidades de estos trabajadores, y de más personas que dependen de un sueldo, para ganar más dinero pagando cada vez un salario menor y con peores condiciones de trabajo.
Igualmente, señala la importancia de la Sanidad y salubridad para evitar epidemias. Así como una buena y rápida intervención ante determinadas situaciones de salud pública.
A todo esto, hay que sumarle la gran enseñanza y leitmotiv que el autor ha querido dejarnos entre las páginas de la novela, y que no es otra que no debemos dejarnos controlar ni planificar nuestra vida dando prioridad a nuestras obsesiones y supersticiones, pues al hacerlo nuestra existencia será más triste, y, además, también haremos sufrir a quienes nos quieren bien.
Aparte de esto, ambienta la obra en el siglo XIX y procura además pequeñas dosis de información histórica verídica muy bien enmascaradas y acopladas entre el relato de las desdichas de la protagonista.
Personalmente, ha sido una obra que he disfrutado gracias a su temática, y al estilo de narración que permitía la ilusión de creer que se estaba leyendo un cuento, que permanecía escondida entre los retazos de realismo mágico que impregnan la novela. Por ello me parece una obra recomendable.

Hay novelas que son historia en sí mismas, donde los huecos que rellena la ficción, a pesar de ser mayoría, cobran tal verosimilitud que estructuran un engranaje perfecto con los hechos verídicos, siendo indistinguibles. Este es el verdadero poder de un libro que cuenta la vida de un personaje que debe de ser contada, este es la fuerza incontestable de “la maestra del jabón”.
La narración es una trepidante, enigmática y cautivadora sucesión de acontecimientos que configuran la existencia de Sofía, una mujer incalificable en el mejor sentido del término cuyo empoderamiento e insumisión la condujeron a múltiples aventuras, avatares y andanzas que ya querría el mejor de los mortales para su propia realidad. Aunque se sitúa en una época y lugar concretos, el eje fundamental de la obra es ella, sobre la que pivota el tiempo y el espacio, el amor y la desdicha, la mentira y la verosimilitud, en definitiva, las luces y sombras que adornan la trama.
El autor nos zambulle en el océano que alberga la vida de Sofía, en la decimonónica Sevilla y en el momento donde una de las peores epidemias de cólera asola la ciudad. Una mujer que desafía cualquier orden establecido, norma social y tradición ancestral. Un personaje que se rodea y utiliza a su antojo a quien necesita y desea, que se establece o viaja cuando le place y que vive rodeada de misterio, magia y ambición. Nacida con una maldición, todo comienza en su lecho de muerte cuando se sincera con su hija para depositar el secreto que le pesó como una losa desde que tuvo uso de razón.
Me ha encantado la profusión de detalles que el autor proporciona sobre la época, las costumbres y la ciudad, mostrando el profundo conocimiento y la prolija documentación que sostienen al libro. Cabe destacar que el argumento cabalga entre el marco histórico y las pinceladas de misterio que sazonan adecuadamente para proporcionar una lectura sabrosa. Las pinceladas de humor proveen el toque justo para sonreír en medio de la verdadera lección subyacente, que somos dueños de nuestra vida y solo se trata de ser valientes, incluso siendo una mujer en un tiempo y un contexto con todo en contra.
Mi viaje con esta novela se ha convertido en un transitar en la piel de Sofía, empatizando con su situación y aprendiendo de las decisiones que sus encrucijadas exigían. Desde el primer capítulo me enrolé en su barco y dejé que ella me condujera por los mares de una historia trepidante, con trazos tenebrosos, pero siempre marcando los pasos y mirando el horizonte del futuro. “La maestra del jabón” es una lectura que os hará sentir de todo menos indiferencia.

Nos encontramos en esta ocasión ante una novela de narrativa desarrollada como si hubiese sido escrita perfectamente en el siglo XIX en que se desarrolla. "La maestra del jabón” no puede ser considerada una novela histórica al uso y Felipe R. se deja imbuir precisamente por todo ese costumbrismo de la Sevilla decimonónica. Cabe señalar que precisamente por esta manera de narrar los acontecimientos quizás no pueda tenerse como una novela ligera, pero está escrita con muchísimo gusto y una lectura atenta puede llegar a sacar más de una sonrisa. Por otra parte, si bien los años centrales en que se desarrolla la obra coinciden con la epidemia de cólera que pasó por la ciudad andaluza, el argumento principal es la vida de Sofía, siendo éste uno más de los hitos a lo largo de la misma.

En una sociedad dominada por los hombres, Sofía es una mujer que tiene claro que no sigue los dictados de éstos ni de lo que se supone que debe esperar por su humilde origen. Con un enigmático secreto familiar que se ha convertido en su maldición, tiene el objetivo de convertirse en una maestra del jabón que fabrique las más finas y aromáticas piezas de este producto tan preciado, especialmente en medio de la epidemia de cólera que afecta a la ciudad.

En primer término, hay que destacar que el autor nos retrata personajes pintorescos con sus hazañas casi caricaturescas que además se mezclan con sucesos históricos que jalonan la novela dándole ese punto de verosimilitud entre todo lo rocambolesco que también llega a ocurrir en el libro. En esta obra que trata de emular en cierto modo las novelas de la época con esa pluma densa de la que hace gala el escritor, hay que prestar especial atención entre tanta metáfora y retranca para discernir todos esos sucesos humorísticos que, una vez acostumbrados a las peculiares descripciones, pueden llegar a ser verdaderamente refrescantes en medio de una trama que pudiéramos calificar como trágica por los estragos de la enfermedad que trata.

Aunque esta no sea la nota dominante, los personajes también viven aventuras siempre en pos de la obsesión de Sofía que en ocasiones puede tornarse un tanto desagradable por las consecuencias de la misma. Bajo mi punto de vista, son especialmente destacables las que tienen lugar en alta mar; aunque realmente todos los contextos que describe el autor se nota que han sido debidamente documentados fruto de una exhaustiva labor de investigación histórica. En este sentido hay que reconocer que el escritor ha realizado un gran trabajo al conseguir aunar esta faceta más histórica con todo ese cúmulo de pasiones exaltadas y llevadas casi a lo ridículo, una parodia con escenas disparatadas, casi de sainete, que casan muy bien con el costumbrismo de la época.

Conocí al autor con su anterior libro ¨Tierra de valientes¨ una historia que sorprendió y en este caso también lo ha conseguido.
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Contado como si de una voz antigua se tratara y ambientado en el Sevilla del siglo XIX, empezaremos a conocer a Sofía, la protagonista de esta historia.
Desde niña Sofía arrastra temores, obsesiones o quizá algún tipo de miedo, por ello su cometido en la vida es ser la maestra del jabón, disfrutar de un olor que embriagara a los demás será su ambición en la vida.
Pasó de ser sirvienta a casarse con alguien que ascendió su estatus, aún así Sofía escondía muchos secretos y casi como si de brujería se tratara era capaz de atraer todo tipo de hombres hacia ella. Por ello, su vida fue toda una aventura y aunque en ocasiones parece una loca, en otras veces su pasión por ayudar y por ser una buena hija, esposa y madre.
Os invito a conocer las mil caras de Sofía.
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Cuando leía este libro me parecía como si me estuvieran contando una fabula antigua de cuando en los tiempos del cólera, una mujer vagaba por Sevilla sin miedo a la muerte. Si bien es cierto que la manera de narrarlo con estilo antiguo, propio de aquella época, me hacia no terminar de engancharme ya que no estoy acostumbrada a esta manera de narrar los hechos, quizás también algunas descripciones me resultaron pesadas. Aún así tengo que decir que descubrir a Sofía ha sido algo inesperado, no esperaba un personaje así, tan característico, con tantos traumas y con tantos secretos que dan sentido al final de la historia. El giro final no me lo esperaba ha sido todo un acierto por parte del autor.
Una historia perturbadora, que cobra sentido con un personaje luchador y valiente como es Sofia, aún cuando la traicionan nunca se rinde y sigue explorando mundos hasta conseguir su cometido.

La sinopsis de este libro, me llamó mucho la atención y esperaba encontrarme una novela con elementos históricos y un personaje femenino fuerte. Disfruto de los libros con ambientación histórica, pero este libro era bastante diferente a lo que esperaba.

El libro se centra en Sofía una chica con un olfato peculiar que no soporta los malos olores, por eso desea utilizar jabones con aromas agradables y oler bien. Esta característica de la protagonista se convierte en un problema para su padre por su negativa a realizar determinados trabajos o estar en determinados lugares por el olor. Seguiremos a este personaje desde su compromiso, una huida, la vida de casada, etc. Y así mismo se narran diferentes historias, de familiares, de vecinos y amigos, que van mostrando las preocupaciones, necesidades y creencias de estos.

Sobre los personajes, nos podemos encontrar muchos tipos, cada uno con sus peculiaridades, conflictos, creencias y supersticiones. Hay un gran número de personajes que interactúan de forma directa o en forma de recuerdo, en mi caso este llego a ser un poco excesivo y en algunas partes me sentía saturado de nombres. En relación a la protagonista me generó sentimientos diversos ya que es un personaje complejo, tienes sus luces y sombras, convirtiéndola en un personaje bastante real por el que puedes sentir, por momentos, admiración, desconcierto, pena y molestia.
Contiene elementos históricos, pero debo confesar que me resultó complicado diferenciarlos o saber hasta qué punto eran reales y cuales pertenecían a la imaginación el escritor. Esperaba encontrarme con algo más definido en este aspecto.

En cuanto a la edición debo decir que me parece muy buena, con detalles al inicio de los capítulos que me encantan. El color de las páginas no es blanco y personalmente, el color empleado, me resultó cómodo para la lectura. El tamaño de las letras me pareció correcto y los márgenes adecuados.

Un elemento especial de este libro se encuentra en la forma narrativa que tiene el autor, no es una narración sencilla y lineal, resulta mucho más complejo. Durante la lectura hubo varios momentos en los que me sentí confundido, a veces por la velocidad con la que se cambia de personaje del que se habla y en otras ocasiones por los mismos sucesos que se desarrollan. Sin ser un experto, diría que tiene elementos de realismo mágico, y me recordó, en este sentido a “Cien años de soledad” de Gabriel García Márquez. Personalmente no soy fan de este tipo de narración, me resulta confuso y la lectura del libro termina siendo agotadora y lenta. Pero animo a cualquier amante de este estilo a leer el libro, y descubrir la historia que se encuentra entre sus páginas.

Una trama que a priori es interesante se convierte en una lectura farragosa por los extensos detalles que introduce el autor y que no aportan nada a la historia. Saltos en medio de una explicación que te desconectan de la historia solo para dar un dato que no aporta absolutamente nada. Demasiadas florituras en la prosa.
Quizás yo no he sabido captar la escritura y la forma de esta novela, que desde mi punto de vista quiere ser una especie de saga familiar con pinceladas de realismo mágico y ambientación histórica. Y si la historia hubiera estado narrada de forma diferente, me hubiera gustado. Aun así creo que escribir un libro entraña un grandísimo acto de valentía y de trabajo duro que hay que reconocer a pesar de mis gustos personales.

Cuando vi la preciosa portada y la sinopsis de la maestra del jabón no puede resistirme a conocer la historia de Sofía, una mujer terca y decidida con una vida interesante que debía de ser contada, pero tengo sentimientos encontrados con esta novela, me ha gustado pero a la vez han habido algunos puntos que no me han terminado de convencer.

La historia comienza con una Sofía que está muriendo y necesita contar a su hija un secreto que lleva arrastrando toda su vida. En este punto hago un alto para comentaros  que me costó  mucho el cambio de tiempo y trasladarnos al pasado, para mi gusto no estuvo bien definido y tuve que leerlo varias veces. Una vez ese salto en el tiempo nos encontramos con una Sofía sirvienta, que nos irá desgranando su vida, una vida donde hace y deshace a su antojo envuelta siempre en ese halo de misterio.

Una narración que en ocasiones me ha costado pero a la vez Sofía como protagonista me ha encantado ya que su vida , toda una aventura, debía ser contada.

En conclusión, un libro que me ha gustado con esos pequeños “peros”  sobre todo por conocer a una gran mujer con mucho misterio tras de si. Si te apetece trasladarte a Sevilla del siglo XIX, no dudes en leer este libro y conocer a la maestra del jabón.

Debo decir que con este libro tengo sentimientos encontrados. Ha ido por otros derroteros diferentes a los que imaginaba (debía estar influenciada por El perfume).
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La protagonista, Sofía, tiene un problema de olfato por un trauma accidental de jovencita, y desde ese momento sufre una obsesión con los olores y su mayor objetivo es convertirse en maestra de jabones. Veremos todo su periplo vital como " mujer que no obedece a ningún hombre" y todo el esfuerzo que hace en su contrariada existencia para conseguirlo. Paralelamente conoceremos también las vicisitudes de familiares y amigos, llegando al final con un tremendo giro que te acaba dejando con la boca abierta.
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El punto histórico más álgido es, sin duda, cuando el autor se apoya en la epidemia de cólera que asoló Triana (Sevilla siglo XIX), epidemia que llegó a través del puerto, ya que el barco era el principal medio de transporte, a orillas del Guadalquivir. Los contagiados que tenían relación con el río y Triana, el barrio más cercano a él, quedaron confinados.
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A pesar de que pululan muchos personajes por la historia, destaca enormemente Sofía que, cual viuda negra, sabe cómo terminar con cualquier amante molesto o persona que se le pueda cruzar en la consecución de sus objetivos. Debo decir que lo hace de manera muy desagradable.
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La impresión que da al leer la novela es que el autor bebe de una mezcla de costumbrismo por un lado y realismo mágico por otro, sin pertenecer estrictamente a ninguno de ellos.
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Si alguna pega debo poner es la forma narrativa, no veo una pluma sencilla y fluida, a veces me daba la impresión de discontinuidad y desconexión, tanto así que en ciertos momentos tenía que releer párrafos. Lectura densa y compleja, propiciada por el exceso de narración frente a muy poco diálogo.
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Aun así, la historia es pintoresca en ocasiones, y didáctica en otras, así que si tienes paciencia y ganas puedes echarle un ojo.