Paisaje con reptiles

Tenía yo muchas ganas de descubrir la pluma de Pilar Pedraza y me decanté por empezar por este libro. Sigo asimilando lo que he podido leer en sus pocas páginas.

He comentado que he tenido medio parón lector y no sé si esta ha sido la razón por la que no he logrado leerlo del tirón, si me hubiera pillado al 100% seguramente hubiera caído en una tarde ya que su ambientación me ha parecido totalmente envolvente e incluso a veces asfixiante.

Alicia es una joven pintora que está casada con Julius, un señor mucho más mayor que ella que está en una isla investigando una mancha en el océano. A priori era un trabajo sencillo y ella iba con intención de trabajar buscando allí la inspiración, pero se ve envuelta en una atmósfera raruna y en una isla que oculta muchos secretos y vecinos un tanto raros y peculiares.
Al pasar tiempo sola decide salir a investigar y a perderse por los remotos rincones de la zona, aunque pasa la mayoría del tiempo con una señal de alerta en la cabeza, la isla es peligrosa pero a ella este hecho parece que no le asusta del todo.
La catarsis llega cuando un día ve a unos niños en la playa, despojando a una tortuga de su caparazón (algunos pasajes pueden herir sensibilidades con este tema) y siente como se debate entre el horror y la fascinación por este hecho.
Además nota como su marido va cambiando a medida que lo hace la mancha, ya que siente que está ligada a la isla y sus lugareños.

Tiene tintes de literatura weird ya que van pasando hechos cada vez más extraños que puede que no convenzan a todo el mundo. Hechizante, onírica y repleta de hechos extravagantes, la autora es capaz de envolver en poesía algunos hechos aberrantes, con esto me ha terminado de convencer y ya he añadido a mi lista otras de sus novelas.