El susurro del ángel

Lo que quiero decir es que en este tiempo he comprendido que la vida es esto: caerse, levantarse y seguir. Y hay veces que la caída es tan tan grande que levantarse se vuelve imposible. Pero si no lo haces pierdes.

Y es ahí, en ese momento justo, cuando entiendo que el amor no es entregar tu corazón a alguien y quedarte vacío, sino querer que ambos palpiten en el mismo lugar.

Es ahí cuando comprendes que las personas estamos aquí por un tiempo limitado, y que por más que le dediques a la gente que amas, nunca será del todo suficiente.

Cuando tocas fondo y eliges quedarte en la oscuridad, por más luces que enciendas nunca verás luz.

Cuando tocas fondo y eliges quedarte en la ocuridad, por mas luces que enciendas, nunca verás la luz.

Porque una madre es una madre.

Me costó mucho tiempo comprender que a lo largo de tu vida te enamoras muchas veces, pero hay una sensación distinta que solo sientes una vez en la vida, y es cuando te sigues emocionando a pesar de llevar muchos años a tu lado. Esa sensación puedes notarla al principio o quizás al final, pero cuando ocurre, viajarás a lugares sin esa persona y sentirás que te hubiese gustado que estuviera a tu lado; si te dan un premio, te gustaría leer su nombre en alto en los agradecimientos aunque ya no esté junto a ti; si miras el asiento del copiloto en el coche, sabes perfectamente quien debería estar allí sentado. Y hasta que entiendas que todo eso ya no forma parte de tu presente estarás con muchas personas, pero ninguna te hará sentir eso. Entenderá, y eso quizas sea lo duro, que la vida, simplemente, os ha llevado por caminos distintos y que tu corazón ya se lo entregaste a alguien una vez y lo de después son restos que siguen valiendo, pero no completando. Que con suerte, si la vida así lo quiere, alguien quizá pueda restaurarlo.

El amor no es entregar tu corazón a alguien y quedarte vacío, si no querer que ambos palpiten en el mismo lugar.

Cuando tocas fondo y eliges quedarte en la oscuridad, por más luces que enciendas nunca verás la luz

Hoy en la orilla de esa playa, he comprendido que la vida es eso, momentos, coleccionar momentos