Valancy Stirling o el castillo azul

Es horrible vivir con miedo; es el más degradante de todos los sentimientos.

Casi todos los males del mundo tienen su origen en el miedo que siente alguien por alguna cosa.

Estaba permitido, e incluso resultaba aconsejable, leer para mejorar el espiritu y la fe, pero un libro que resultara agradable podia ser peligroso.

Y solo me resta seguir viviendo porque no puedo detenerme.

No tengo intención alguna de callarme —dijo Valancy perversamente—. Me he callado toda la vida. Gritaré si lo deseo.

Simplemente me he cansado de vivir para complacer a todo el mundo y he decidido hacer mi propia voluntad. Eso es todo.

El miedo es el pecado original. Casi todos los males del mundo tienen su origen en el miedo que siente alguien por alguna cosa. Es una serpiente fría y viscosa que se enrosca sobre uno mismo. Es horrible vivir con miedo; es el más degradante de todos los sentimientos

No existe nada semejante a la libertad en la tierra. Solo distintas clases de atadura. Y cadenas comparativas. Tú ahora crees que eres libre porque has escapado de una especie de confinamiento particularmente insoportable. ¿Pero lo eres realmente? Me amas... eso es una cadena.

Valancy se levantó y se vistió con una extraña y profunda sensación de libertad. Cuando terminó de arreglarse el cabello abrió la ventana y arrojó la jarra de flores secas sobre el terreno adyacente, que fue a estrellarse gloriosamente contra el cutis de una colegiala de la vieja tienda de carruajes.
—Estoy harta de la fragancia de las cosas muertas —dijo Valancy.